En efecto, ERC impide en
el Parlamento catalán señalar a Mas por corrupción, evitando constatar que
conocía las cuentas de su padre y los manejos de los hijos de Pujol, reprobado
por la Cámara que ve indicios de ilegalidad en los negocios de su familia; nada
mejor pues para Mas que esta simbiosis desideologizada pero interesada que
tiene, al menos de momento, con Junqueras y compañía, capaz de envolver toda la
porquería, la irresponsabilidad y la ineficacia en la bandera del
independentismo. Por su parte, mientras la Reina Letizia felicita a los
responsables del Instituto Cervantes por la difusión del idioma español (casi
relegado a la mínima expresión en Cataluña), el Rey Felipe instará a Artur Mas
y a la cúpula judicial catalana a cumplir la Ley en el encuentro que tendrá
mañana en Barcelona tras la Audiencia en la Zarzuela, a la que, como recuerdan,
el president acudió diciendo que iba “en son de paz”. Y todo ello cuando se
conoce que Cataluña es la Comunidad Autónoma que más ha mejorado su balanza
fiscal en la última década, así como que Madrid aporta al Estado más del doble
que Cataluña, ya que los madrileños ingresan al Estado 11.576 millones más que
los catalanes. Entretanto, Rajoy, que promueve una vía de dialogo con el líder
socialista ante el órdago soberanista, y Sánchez culpan a Artur Mas (a quien al
parecer le importa un pito) de fracturar la sociedad catalana; el presidente
asegura que el Gobierno “está preparado” para responder al desafío
independentista (cuya lista unitaria incluye medidas sociales que rechazó la
Generalitat… lo que haga falta en pro de la demagogia), mientras el líder del
PSOE advierte de que el 27-S sólo provocará más frustración, en tanto que
expertos jurista prevén que habrá que apelar al art. 155 de la Constitución tal
como se están desarrollando los acontecimientos. Es la triste, intolerable y
antidemocrática situación que vive hoy Cataluña, cuyo máximo responsable, el
president Mas, gracias a su... (sigue leyendo en
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