domingo, 31 de marzo de 2024

EL LABERINTO POLÍTICO NACIONAL

                         Cada vez se hace más confusa la salida del laberinto político nacional en que Sánchez y sus socios han convertido a nuestro país, España, al extremo de que, hoy por hoy, salvo que los ciudadanos lo vayan aclarando en las urnas, cada vez es más difícil prever el futuro inmediato de nuestro Estado de Derecho, que paulatinamente se va convirtiendo en un Estado de Desecho ingobernable, y de cara al año electoral que nos espera, más aún. En Cataluña, Aragonés presiona a Sánchez exigiendo el ilegal referéndum para sacar rédito electoral y recuperar terreno frente a Puigdemont, entrando al cuerpo a cuerpo con el prófugo acusándole de blando con Moncloa (¡quién lo diría!), mientras que en Barcelona el socialista Callboni tantea una alianza con ERC para el Ayuntamiento; por otro lado, mientras Anna Grau deja la política y no concurrirá con Ciudadanos a los comicios del 12-M, el PP controlará desde Génova las listas y la campaña del popular Fernández cuando el favorito como candidato era Reyes, el alcalde de Casteldefels, que irá de número dos (es la solución precipitada tras frustrarse una transición tranquila por el adelanto electoral, cuando el PP tiene pendiente un Congreso Regional para ejecutar el reajuste orgánico del partido). En el País Vasco, PNV y Bildu, ambos socios de Sánchez, con empate técnico según los sondeos y con el PSE como tercera fuerza, el PSOE habrá de decidir a quién apoyará para gobernar Euskadi, mientras Otegi le quita cinco escaños a Sumar, cogobernante en España con los socialistas; pues todo apunta a que casi 45.000 indecisos del PNV, por sus alianzas con Sánchez, serán decisivos en la lucha por el voto con EHBildu, también socio de Sánchez (los abertzales, según SigmaDos, ganan seis décimas en un mes, lo que les acerca a un empate de 29 diputados con el PNV de Pradales, el novedoso candidato de los nacionalistas de derechas), cuyo PSOE en versión PSE de Patxi López pierde 1´4 puntos y el 12% de sus votantes elegirían la papeleta peneuvista. En las elecciones europeas, ERC, Bildu y BNG, todos ellos socios de Sánchez, sellan entretanto su alianza con el objetivo común (aquí al menos hay un objetivo común) de “alcanzar Estados propios” en sus territorios, en definitiva, de convertir España en un mosaico de mini-estados independientes a la gresca unos contra otros frente a la unidad e igualdad proclamadas en nuestra Constitución, por lo que el PP denuncia esta coalición “radical” de los socios del Gobierno para comparecer en los comicios de la UE. Y mientras tanto a nivel nacional, es decir de España, el PSOE sanchista, cada vez más arrinconado y atado por los socios del Presidente Sánchez, endurece su estrategia de confrontación para intentar recuperar terreno en las urnas, pues, aunque dirigentes socialistas alertan del peligro de desmovilización, se impone el sector que apuesta por el choque frontal con el PP en todos los frentes….pues Sánchez ignora el bloqueo legislativo de sus propios socios para hacer campaña electoral, y, pese a que en los últimos tres meses su Gobierno no ha podido aprobar ninguna ley, anuncia cínicamente 49 nuevas normas, mientras el PP cree que la renuncia obligada por sus socios a los Presupuestos Generales del Estado demuestra a qué extremo llega la “dificultad del funcionamiento de este país”….y lo que nos queda.

            Así las cosas, Sánchez está cada vez más cercado por el “procés”, el “caso Koldo” y los Presupuestos con el Senado con mayoría absoluta del PP retomando el Pleno con el probable requerimiento al Congreso de los Diputados por la amnistía. El prófugo, socio de Sánchez y rehabilitado por él, se presenta a los comicios en plan personalista como “Junts más Puigdemont” incitando a una especie de unidad “fake” a las fuerzas minoritarias postconvergentes testimoniales que rechaza ERC, en tanto que el TSJC retrasa el juicio a los fontaneros de Junqueras para evitar “interferencias” en la campaña electoral. Sánchez se dispone a acabar con Yolanda Díaz y torpedear al prófugo, con lo que ninguneará a su Vicepresidenta, que progresivamente se desvanece en el liderazgo de Sumar y los socialistas la consideran ya amortizada, y también se dispone a busca fórmulas para frenar a un crecido Puigdemont, rehabilitado por él mismo con el objetivo de hacer la cuadratura del círculo entre sendos secesionismos de izquierdas y de derechas a la vez, mientras Illa, el candidato socialista a la Generalitat, sostiene que “el procés se supera con ERC y Junts en la oposición en Catalunya y el PP en España”. Y todo ello adobado con el pulso inédito por la hegemonía en Euskadi, donde el PNV habrá de medir en los comicios vascos el gran ascenso de Bildu, blanqueado por Sánchez, en los últimos cuatro años, con caras nuevas en sendos partidos aspirantes a ser los más votados. ¿Y cómo va a incidir la gobernabilidad en Euskadi y Catalunya en la gobernabilidad de España? Misterios sin resolver. Se atribuye a...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

miércoles, 27 de marzo de 2024

DEMOCRACIA, SÍ; DICTADURA DE LA MAYORÍA, NO

                         Confundir “democracia” con “dictadura de la mayoría” es un grave error que al final se paga muy caro, pues, aunque obviamente la democracia se sustenta en la conformación de mayorías parlamentarias para gobernar, jamás debe olvidarse que por encima de esas mayorías coyunturales en cada momento está el permanente entramado institucional y procedimental de convivencia diseñado en la Constitución, refrendada por el pueblo mayoritariamente, y que todo gobernante democrático, legitimado y amparado por ella, ha de considerar como límite ineludible a la hora de tomar decisiones por mayoritarias que estas sean para impedir que esas mayorías no actúen como les venga en gana al margen de las reglas de juego establecidas, atropellando con ello derechos ciudadanos contemplados en la Carta Magna, lo que en el fondo supone realmente una inaceptable dictadura de hecho por mucho que se quiera disfrazar de democracia. En “román paladino”, para que todo el mundo lo entienda, que las mayorías parlamentarias no pueden hacer lo que les venga en gana saltándose a la torera los límites impuestos por el marco legal emanado de la Constitución y por los procedimientos establecidos, que incluso contemplan la calidad de dichas mayorías parlamentarias según la importancia y alcance de lo que se quiera legislar (es decir, requiriendo mayoría simple, absoluta o cualificada, según para qué cosas), pues, por ejemplo, no es lo mismo modificar preceptos constitucionales fundamentales que regular leyes ministeriales del ámbito que sean. No tener esto en cuenta, supone, sin duda alguna, un fraude de ley inadmisible, lo que, según muchos juristas, sucede, por ejemplo, con la tramitación de la patética ley de amnistía, impuesta por Puigdemont y ERC, minoritarios en las Cortes, lo que en el fondo se convierte en una reforma encubierta de la Constitución, que, en todo caso, requeriría una mayoría cualificada que, hoy por hoy, no hay en las Cortes Generales, y, por tanto, genera obviamente un conflicto político de primera magnitud, que, al final, tendrá que dilucidar el Tribunal Constitucional, donde los letrados del Senado invocarán que se trata de una reforma encubierta de la Constitución y que, por tanto, el Congreso (cuyos letrados también se oponen, pero acatan la decisión del nuevo Secretario General) invade atribuciones que corresponden a la Cámara Alta ya que como reforma constitucional (encubierta o no) el Senado tiene capacidad para frenarla e incluso tumbarla pues tendría las mismas facultades que el Congreso, mientras que tal como la amnistía se pretende tramitar ahora con un procedimiento legislativo normal y de urgencia, el Senado queda simplemente como una Cámara de “segunda lectura” sin capacidad para frenar la iniciativa legislativa, tal como pasa con otras leyes de menor importancia que no afectan a derechos fundamentales. No en vano este conflicto entre Senado y Congreso, inédito hasta ahora como sucede en otros muchos asuntos con el Gobierno de Sánchez y sus socios, provoca cierta tensión en los letrados de la Cámara Baja al extremo de que algunos de ellos amagan incluso con la renuncia para no tener que verse obligados a defender la amnistía en el TC, al que, por cierto Sánchez recurre ahora para frenar la iniciativa del Parlament de Catalunya en favor de la independencia, iniciativa que, sin embargo, sus socios secesionistas defienden. Entretanto Sánchez endurece sus ataques contra el PP y Feijóo, al que equipara con Abascal, y asegura que “España va en la buena dirección y la oposición desbarra”, mientras el PSOE ve muy débil a su socia Yolanda Díaz que “ya no es una figura poderosa”, apuntando los socialistas “en su libreta” la decisión de los “comunes” (socios de Yolanda y de ellos mismos) de no apoyar los Presupuestos de Cataluña, convencidos de que Sumar no ha avanzado en su estructura y que eso lastra el liderazgo de la gallega. Ya ven, otros desbarran pero no Sánchez, arropado por esta serie infinita de socios minoritarios, convencidos de que la “democracia” es sinónimo de “dictadura de la mayoría”…o, si conviniera a sus intereses y llegara el caso, incluso de dictadura de las minorías, que sería el siguiente paso; esperemos que Sánchez, al final, no coincida ideológicamente con ellos y se pueda superar esta pesadilla antidemocrática.

            Así las cosas, mientras el PP acusa al Gobierno de reactivar el procés secesionista a base de cesiones de dudosa constitucionalidad y avisa de que los independentistas “no mienten” y son “insaciables” (es su razón de ser), Sánchez y su Ejecutivo, aunque ahora intentan frenar de cara a la galería las voraces demandas del independentismo, se ven desbordados pues tanto Junts como ERC, ambos contradictorios socios ideológicos de Sánchez, le exigen el famoso referéndum en plena campaña electoral catalana, al extremo de que Junqueras, en apariencia más sensato que el prófugo Puigdemont y más próximo al PSOE ideológicamente hablando, se suma abiertamente a este nuevo “procés” impuesto por el fugado y, tras la amnistía regalada, manifiesta, tras haber sido indultado por Sánchez sin nada a cambio, que..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

domingo, 24 de marzo de 2024

PUIGDEMONT, EL RESUCITADO

                         Un totalitario Puigdemont, resucitado por obra y gracia de Sánchez cuando estaba políticamente muerto y fugado de España, cada vez más olvidado, regresa triunfal a la primera plana de la política española y anuncia cerca de la frontera española (todavía no puede pisar suelo español por más esfuerzos que el Presidente del Gobierno hace ahora para que lo consiga lo antes posible a cambio de sus siete votos) que será candidato por Junts en los comicios catalanes como “president legítimo”, exigiendo por ello recuperar el cargo que perdió tras aplicar el entonces Gobierno de Rajoy a Cataluña el artículo 155 de la Constitución, obviamente con el respaldo de Sánchez, quien, entonces en la oposición, decía que “la mejor forma de defender la Constitución es poner freno a cualquier quiebra unilateral” (sabias palabras del entonces constitucionalista Sánchez). Hoy, sin embargo, mientras el prófugo reúne en Elna, la localidad francesa dónde los independentistas ocultaron las urnas para el patético referéndum unilateral del 1-O, nuestro Presidente Sánchez, bastante menos constitucionalista que entonces, se limita a minimizar la afrenta y las amenazas del chantajista Puigdemont diciendo que el sedicioso (perdón, ya se ha encargado Sánchez de borrar este delito del Código Penal) “está en su derecho” de plantear, entre otras cosas, que sólo volverá a España para ser investido ya que “se abre la oportunidad de restituir la presidencia destituida” y para lograrlo ofrece a todo el independentismo, y especialmente a ERC, una lista unitaria a modo de plebiscito en su primer mitin de campaña desde la “Cataluña Norte” (las tierras del sur de Francia donde obviamente, si hubiera hecho lo que ha hecho en la “Cataluña Sur”, es decir, en tierras del Estado Español, sin duda estaría inhabilitado o preso) dejando bien claro que regresa el “procés” pues por ello será candidato a los comicios catalanes, y no a los europeos, “para culminar la independencia” ya que su candidatura es “la oportunidad” de “acabar el trabajo que empezó el 1-O”, antes de largarse de España para no comparecer ante los tribunales de Justicia, y “retomar el camino que la represión bloqueó”. Y al efecto desafía a ERC a ir en una lista única, que Aragonés rechaza, para celebrar otro referéndum como el de entonces en 2027, mientras presume de haber arrastrado al PSOE a pactar con él fuera de España (insólito en cualquier país europeo) y anuncia que volverá a nuestro país si puede ser president, aunque no descarta hacerlo antes, en plena campaña electoral, aun a riesgo de ser detenido nada más pisar suelo español (bien sabe que en este supuesto sería por poco tiempo ya que la amnistía que le ha impuesto a Sánchez a cambio de sus siete votos le garantizaría su puesta en libertad nada más ser aprobada la ley por vía de urgencia en las Cortes Generales). Y entretanto Sánchez quitándole importancia a todo esto, que ahora ve normal en democracia, y mintiendo a los españoles al decir que todo ello es para mejorar la convivencia entre los catalanes y entre éstos y el resto de españoles, cuando todo el mundo sabe perfectamente que semejante barbaridad antidemocrática se debe a la necesidad que el Presidente tiene de los siete votos del prófugo para mantenerse en Moncloa.

Y mientras Puigdemont se dispone a dirigir su campaña contra el PSC, que podría arrebatarle la presidencia a la Generalitat (aunque el CIS catalán relega a Junts al tercer puesto, detrás de los socialistas y ERC), Aragonés (otro que tal baila), desde la Generalitat, lanza un órdago a Sánchez sobre la soberanía fiscal catalana diciéndole “no voy a aceptar que Andalucía nos limite la financiación”, mientras rechazan la oferta del Gobierno de negociar el nuevo sistema de financiación autonómica, que hay que mejorar, en un marco “multilateral” que los secesionistas catalanes rechazan. El PP por su parte fuerza al PSOE a tomar posiciones en el Congreso sobre el “cupo catalán” (aquí todo el mundo ha de retratarse de cara a lo que nos viene) mientras Puigdemont convulsiona a ERC y obliga a Aragonés a apretar el acelerador secesionista, amenazando con ello las opciones de ganar de los republicanos y su desgastado líder, el actual President de la Generalitat. Entretanto el Congreso y recursos judiciales frenarán el “cupo catalán”, pues las CCAA gobernadas por el PP, que son la mayoría, reaccionarán al pacto fiscal en favor de Cataluña ante los tribunales y el Constitucional, y difícilmente tendría el apoyo de otros grupos integrados en Sumar, que cada vez es más Restar que Sumar, como Compromís, BNG y Chunta (¡cómo justificarán ante sus respectivos electores este manifiesto trato de favor a Cataluña en detrimento de sus respectivos territorios!). Y para mayor intriga e incertidumbre el Gobierno se abre a...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

miércoles, 20 de marzo de 2024

DE AQUELLOS POLVOS…..

                         Estamos llegando a tal extremo de sinvergonzonería, cinismo y descrédito político por parte de nuestros gobernantes que la convivencia ciudadana se hace cada vez más difícil y el desencanto crece exponencialmente. Un desencanto, no ya ideológico sino democrático, en el que prevalecen las astucias y artimañas para que los ciudadanos sólo tengamos la capacidad de elegir entre lo malo y lo peor en vez de entre lo bueno y lo malo, en medio de un preocupante ocaso de las ideologías y los principios tradicionales que las sustentan y, obviamente, con semejantes planteamientos siempre salen ganando los más sinvergüenzas, cínicos y desacreditados, no ya a nivel electoral entre los partidos, sino también a nivel interno en cada uno de ellos con lo que, al final, siempre pierden los más coherentes, comedidos y sensatos, frente a los que más capacidad tienen de mentir y hacer barbaridades, moviéndose en el oscurantismo como pez en el agua con la imprescindible ayuda ciega de fieles colaboradores con orejeras que apelan, normalmente por interés personal, a una fidelidad infinita al jefe de la manada del grupo en vez de a la razón y la lógica. Y en esta situación kafkiana cabe todo, se justifica todo con tal de que tu partido y su jefe salgan mejor parados que el adversario, convertido en enemigo irreconciliable, pues es absurdo, angustioso e incomprensible que de todo se haga una torticera lectura maniquea, según la cual, todo está bien, si lo hago yo o mi partido, pero mal si lo hace mi contrincante, porque, simplemente, yo soy el bueno y él es el malo. Así las cosas sólo cabe esperar inéditos e insólitos comportamientos inesperados e indeseables como, entre otros, el choque constitucional entre el Congreso y el Senado por la ley de amnistía, después de que el informe de los letrados de la Cámara Baja y la Alta discreparan sustancialmente sobre la constitucionalidad de la ley de amnistía impuesta al Gobierno por Puigdemont a cambio de sus siete votos que le permitan seguir gobernando. En efecto, los letrados del Senado, que cuenta con mayoría absoluta del PP, advierten que la amnistía “dinamita” la Constitución y en su informe califican de “fraude” la ley aprobada por Sánchez y sus socios en el Congreso, donde prácticamente hay un empate técnico sobre dicho debate entre Gobierno y Oposición (178 votos frente a 172), y la acusan de dejar “en papel mojado” la carta Magna, aunque la tramitan obviamente por obligación, tal como establece la Constitución, a pesar de sus dudas sobre su constitucionalidad. Por su parte en el Congreso, a pesar del criterio en contra de los letrados de la Cámara Baja (ya ven que los expertos no discrepan tanto en el diagnóstico), la ley sale adelante con la citada mayoría y lo hace con el aval de su letrado mayor, Galindo, hombre de confianza de la Presidenta Armengol, quien, pese al criterio contrario de sus compañeros, defendió la legalidad de la dichosa ley, aunque ahora quede entre la espada y la pared frente al mayoritario rechazo de los letrados de ambas Cámaras Legislativas a la constitucionalidad de la misma, asunto que el propio Gobierno, con Sánchez a la cabeza rechazaba contundentemente hasta darse cuenta de que, tras el resultado electoral, cabía la posibilidad de arrebatar el Gobierno al ganador de los comicios (aunque sin mayoría absoluta), en este caso el PP, lo que es insólito hasta ahora en nuestra democracia, aunque semejante triquiñuela exigía el sometimiento al chantaje del prófugo de la Justicia, Puigdemont, sobre quien Sánchez prometió que le traería a España para ponerlo ante los tribunales para responder sobre los presuntos delitos graves que se le imputaban contra el Estado de Derecho por el que otros compañeros suyos de aventuras no fugados ya habían sido condenados y, para atraerlos a su proyecto, luego indultados por su Ejecutivo sanchista…..Y de aquellos polvos vienen estos lodos. Hoy, insólitamente, el Senado acusa al Congreso de “reforma constitucional encubierta” provocando el choque indeseado de las dos Cámaras Legislativa, después de que los juristas de la Cámara Alta hayan considerado que la ley vulnera hasta 16 artículos de la Constitución y, por tanto, planteará un conflicto de atribución de competencias contra el Congreso ante el Tribunal Constitucional que tendrá que decidir al respecto, pues los populares, con mayoría absoluta en el Senado, denuncian, visto lo visto, que la norma supone una modificación ”fraudulenta” de la Carta Magna, con la aquiescencia del Letrado Mayor del Congreso. 

            Y en medio de este putrefacto lodazal, PP y PSOE se enzarzan además en un patético debate sobre la corrupción, después de que, tras las dimensiones que está tomando el “caso Koldo”, saliera a la palestra el presunto fraude fiscal del novio de Ayuso por lo que casi en tromba el Gobierno pide la dimisión inmediata de la presidenta madrileña, equiparando este hecho a la trama del ex asesor del ministro Ábalos, quien por semejante asunto ahora forma parte del Grupo Mixto del Congreso tras ser expulsado del Grupo Socialista. Y como se trata de arremeter contra..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

domingo, 17 de marzo de 2024

CADA VEZ PEOR

                         Con impostada alegría el Gobierno de Sánchez y el Grupo Parlamentario Socialista celebraban en el Congreso de los Diputados la aprobación de la Ley de Amnistía impuesta por el secesionismo (y muy especialmente por Puigdemont, el más beneficiado cuando se aplique) por la pírrica ventaja de 178 votos a favor y 172 en contra, mientras que los variopintos socios de Sánchez (todo el secesionismo catalán, vasco y gallego, más todo el populismo del entramado de Sumar, incluido Podemos) exhibían su verdadera alegría y se felicitaban mutuamente por haber impuesto al patético y débil “gobierno Frankenstein dos” todas sus exigencias (incluso las que el propio Gobierno consideraba inconstitucionales a bombo y platillo hasta anteayer) a cambio de nada….bueno, sí, a cambio de los siete votos de Junts para seguir gobernando, pues los de los demás socios ya los habían comprado mucho más baratos. Una amnistía que, aunque algunos intentan equipararla, nada tiene que ver con la promulgada en 1977 que, con sus errores y aciertos, pretendía transitar sin violencia de un régimen dictatorial a un régimen democrático mediante un amplio consenso político-social y respondía a un verdadero clamor social y político, saliendo aprobada en el Congreso por 296 votos a favor, dos en contra, 18 abstenciones y un voto nulo (eso sí es mayoría incuestionable). Nada que ver pues con la actual amnistía sanchista aprobada con calzador en el Congreso, que transita hacia no se sabe dónde desde un régimen democrático, homologado con los que conforman la UE, donde los comportamientos delictivos se dirimen en los tribunales de justicia mediante procesamientos con todas las garantías procesales para los procesados; y, como ven, nada que ver con el resultado de la votación, que no obedece a clamor social o político alguno sino a satisfacer a quienes, a cambio de unos votos para apalancar al Ejecutivo, han cometido graves delitos contra el Estado de Derecho y, para colmo, sin compromiso alguno por parte de dichos delincuentes de no volver a repetir los mismos delitos. Así pues, por más que se pretenda disfrazar esta torticera amnistía, la realidad es que vamos cada vez peor en la consolidación democrática que se pretendía con la consensuada amnistía de 1977, pues ahora lo que se consigue es deteriorar gravemente el Estado de Derecho al desautorizar el Ejecutivo al Tribunal Supremo, blanqueando los delitos a cambio de nada (bueno, sí; de siete votos) y, por ende, dejando inmaculados a una serie de delincuentes que encima presumen de que esta amnistía “no es punto final de nada” sino el inicio de retomar su proyecto totalitario para imponer la autodeterminación de los pueblos de España por vía inconstitucional si el Estado chantajeado no se pliega a concederles este derecho como sea y, si fuera preciso, al margen de los cauces democráticos establecidos, como se hizo en el “procés”, hoy blanqueado por el Gobierno de España, o forzando previamente situaciones de dudosa legalidad (como ha sido el caso de esta amnistía) que no obedecen a ningún clamor general ni a ningún amplio consenso político-social para resolver un conflicto inexistente, sino que obedece a intereses personales espurios de unos pocos, como es el caso. Cabe decir de una vez por todas, claro y alto, que, de conflicto político, nada de nada, pues, a diferencia de lo que sostiene el secesionismo totalitario (especialmente el ultraderechista representado por Junts, con el prófugo a la cabeza) y que lamentablemente avala el Ejecutivo de Sánchez, en España no se persigue a nadie ni se impide que los secesionistas promuevan su proyecto separatista, lo que se persigue y debiera impedirse, como es lógico, es que pretendan imponerlo al margen de la ley y de la Constitución sin previa reforma de ésta que lo permitiera, lo que supondría unas mayorías amplias que hoy no se dan en España por más que uno de los partidos mayoritarios, en este caso el PSOE de Sánchez, juegue con esa ambigüedad, como hace con la amnistía recién aprobada, cuando lo que tiene que hacer, si es que así lo quiere, es asumir el objetivo de sus socios secesionistas como propia propuesta electoral socialista o, en caso contrario, decirle a dichos socios totalitarios que la fiesta se acabó, pues en asunto tan crucial no caben medias tintas ni ambigüedades, nos jugamos nuestra democracia.

            Cada vez peor pues con una amnistía que da el pistoletazo de salida a una precampaña electoral catalana tras decidir el president Aragonés un adelanto electoral al 12 de mayo, porque los socios de Sánchez no le han aprobado los presupuestos en el Parlament, generando más alboroto político si cabe, ya que, al parecer, la verdadera razón del adelanto electoral es..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

miércoles, 13 de marzo de 2024

CON EL TERRORISMO NO SE JUEGA

                         Mientras en España, con motivo de la patética amnistía, debatimos si procede o no seguir investigando a Puigdemont por presunto delito de terrorismo y mientras muchos demócratas consideran, o debieran considerar, que en asunto tan grave siempre procede aclarar judicialmente cualquier indicio sospechoso al respecto en vez de buscar subterfugios legislativos sobre terrorismos buenos o malos (todos son perversos en el grado que se den), en este caso, con tal de contentar al prófugo a cambio de los siete votos de Junts que necesita el Ejecutivo de Sánchez para mantenerse en el poder, ha querido el destino que semejante debate coincida con el 20º aniversario de los trágicos atentados del 11-M que dejaron 193 inocentes muertos y más de 2.000 heridos y que, desgraciadamente, marcaron un antes y un después en las relaciones democráticas del Gobierno y la Oposición en España a causa del repugnante uso político torticero por parte de unos y otros, cuando lo procedente hubiera sido ponerse de acuerdo para esclarecer los hechos lo antes posible y más aun teniendo en cuenta que tres días después del terrible atentado estaban convocadas unas elecciones generales que cambiaron todo radicalmente en lo referente a lo que hasta entonces había sido el proceder normal de la alternancia política. La trágica realidad fue que en plena amenaza terrorista etarra y yihadista, cuando todas las encuestas señalaban al PP como claro vencedor de los comicios con Rajoy a la cabeza, el Gobierno de Aznar sugirió que el atentado era obra de ETA y el PSOE de Zapatero le acusó de mentir exigiéndole que en plena conmoción nacional se aclararan los hechos inmediatamente mientras apuntaba a que la autoría era yihadista y no etarra. El dilema era, a tres días de las elecciones, que, si el mayor acto terrorista cometido en España lo había perpetrado ETA, tal como presumía el Gobierno, el PP barrería en las elecciones, y, si lo había cometido Al Qaeda, como presumía el PSOE, podía dar un vuelco a las encuestas. Y con esta irresponsable forma de proceder por parte de unos y otros se afrontó el final de la campaña electoral en la que, incluso en el día de reflexión, las sedes del PP fueron rodeadas por miles de manifestantes que acusaban al Gobierno Popular de Aznar de mentiroso. La tragedia, la confusión y los móviles con aquel “pásalo”, que se hizo viral, convirtieron los asesinatos del 11-M en el epílogo sangriento de una campaña electoral en la que ni gobierno ni oposición estuvieron a la altura de las circunstancias, iniciándose así un desencuentro profundo entre PSOE y PP (los dos partidos protagonistas de la gobernabilidad democrática desde aquel fatídico golpes de Estado del 23-F) que les ha convertido en enemigos irreconciliables hasta el día de hoy en vez de contrincantes políticos capaces de entenderse al menos en los asuntos de Estado aunque solo sea para salvaguardar la Democracia y garantizar la pervivencia de nuestro sistema constitucional de convivencia. El 11-M supuso que el terrorismo diese un vuelco electoral inquietante, y hoy el terrorismo sigue siendo parte sustancial de la lucha política sin cuartel entre PSOE y PP, cuando ambos debieran saber que con el terrorismo no se juega. El Gobierno de Sánchez modifica a la baja los delitos terroristas con una modulación intolerable sobre la violencia empleada con el objetivo de contentar a Puigdemont, investigado, entre otras cosas, por terrorismo y se permite en plena investigación judicial desacreditar a los jueces diciendo, como sostiene el secesionismo, que en las actuaciones de Tsunami Democrátic y los CDR nada de nada, pretendiendo dejarlo todo como meros altercados callejeros.

            La gravedad del 11-M fue tal que, aún hoy, circulan teorías, bulos y desinformaciones sobre lo ocurrido pese a que en 2007 el tribunal condenó a los yihadistas como autores de la masacre que, por cierto, ha prescrito ahora después de veinte años sin que todos los cabos ya hayan sido atados, cuando ya sólo quedan en prisión tres de los 18 condenados. A las víctimas de la masacre se las homenajea en este aniversario con un acto principal con la presencia de los Reyes de España y el Vicepresidente de la Comisión Europea, ya que la Comisión ha elegido Madrid para celebrar este homenaje haciéndolo coincidir con el 20º aniversario, un acto al que, por cierto, no asiste Feijóo, alegando que el PP no ha sido invitado al mismo. Por su parte Aznar reivindica hoy su gestión del 14-M, ataca a quienes desmontaron las mentiras y dice que ningún documento oficial confirmó la autoría yihadista, y el PP le defiende. Entretanto el Gobierno de Sánchez..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

domingo, 10 de marzo de 2024

IGNOMINIOSA AMNISTÍA

                         Conociendo a Sánchez, su manera de proceder, y, tal como algunos vaticinábamos, la ignominiosa amnistía pasa el primer trámite en la Comisión de Justicia tras haber cedido a todas las exigencias de Puigdemont, aunque había reiterado que ya no cedería más a modificar ni en una sola coma el texto pactado con el secesionismo que, a pesar de tenerlo ya acordado, Junts había rechazado en el Pleno del Congreso de los Diputados, porque todavía no le parecían suficientes las vergonzantes trágalas antidemocráticas a que el prófugo había sometido al Gobierno del Estado Español como, entre otros asuntos, los indultos, la eliminación del delito de sedición, el abaratamiento de la malversación, los insultos y descalificaciones a los jueces, etc etc, que cualquier gobierno democrático decente ni se hubiera planteado negociarlas, menos aún si no formaban parte de su programa electoral, sino que, por el contrario, las venían descartando contundentemente por anticonstitucionales o inadecuadas. Y, para colmo, más allá de la vergonzosa justificación de Sánchez de “hacer de la necesidad virtud”, mientras el Presidente viaja por tierras sudamericanas, su lugarteniente Bolaños, muñidor de la ignominiosa operación, tiene la cínica desfachatez de manifestar públicamente su impostada alegría auto-felicitándose por lo que ha conseguido (es decir, los siete votos de Junts para seguir gobernando España, o desgobernándola) al pactar con el prófugo de la Justicia, cuando éste es el único que realmente puede sentirse feliz por haber conseguido todos sus objetivo sin ceder nada a cambio por su parte. ¿Puede decirnos el superministro una sola cesión de sus exigencias iniciales por parte del fugado? Seguro que no, porque no ha cedido en nada y simplemente celebra su claro triunfo sobre el Estado Español de Derecho, que repudia, mientras anticipa ya un permanente chantaje y anuncia el reinicio del “procés”, que en su día (con el beneplácito del PSOE en la oposición) llevó a sus promotores a la cárcel o a la huida de la justicia para evitar ser condenados por los tribunales españoles. ¡Qué pacto es este del que Bolaños se alegra tanto cuando la realidad es que sacude la democracia española y hunde los principios de igualdad tradicionales del socialismo gobernante democrático consagrados en la Constitución y, desde ahora, unos españoles serán, a criterio del Gobierno, más iguales que otros! Ya ven, razones para la alegría, ninguna, pues, como dice Page “es una mala ley, aunque algunos den saltos de alegría”, mientras el Gobierno confía en que el prófugo Puigdemont le apoye para que “todo esto tenga sentido”, cuando la inmensa mayoría de los ciudadanos sabe que el único sentido que tiene semejante ignominia es la compra de los siete votos que le faltan a este patético Gobierno para aguantar la legislatura….pero ¿merece la pena a tan alto precio? La cruda realidad es que con este acuerdo ignominioso de amnistía total, basado en una ingeniería jurídica cogida por los pelos con la esperanza de que cuele en la UE, la amnistía remite a las normas europeas sobre terrorismo y elimina las referencias al vigente Código Penal Español, ya que, para intentar beneficiar al prófugo, el delito de terrorismo sólo queda excluido de la amnistía si “ha causado vulneraciones graves del Convenio Europeo de Derechos Humanos” y no del delito contemplado en el Código Penal Español vigente, y además borra la traición si no ha implicado “uso de la fuerza” o “invasiones” y sólo castiga la malversación “si ha conllevado beneficio económico” personal para el chorizo que la practique. En román paladino, para que se entienda: que el terrorismo no sea amnistiado salvo que cometa atrocidades repugnantes, que no hay traición salvo que use la violencia extrema o invada un territorio y que tampoco haya malversación salvo que el delincuente no la use para lucrarse económicamente. Vamos, que se puede ser un poquito terrorista, algo traidor y medio malversador, siempre que, en vez de enriquecerte tú mismo, enriquezcas a tu entorno. Ya ven, con un poco de suerte hasta los implicados en el “caso Koldo” pueden tener esperanzas de salir indemnes o ser inmunes como Puigdemont.

            Tristemente el Gobierno vuelve a ceder por enésima vez, tras decir y prometer que no lo haría, para beneficiar “a todas las personas vinculadas con el procés” y, en plena crisis de corrupción, cede en todo al chantaje secesionista sólo un mes después de afirmar que ya tenía una posición “firme y clara” de “no tocar el texto” de la ley…. pero ya saben aquello de “estos son mis principios, y, si no le gustan, tengo otros” que es lo que rige la conducta de nuestro Presidente, que, con ello, ve despejada la legislatura mientras Junts y ERC compiten por capitalizar el relato político ligado a la ignominiosa medida de gracia y Puigdemont ya prevé volver a España en verano y ser candidato a las europeas, si la UE no se lo impide, sabedor de que en España.... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

miércoles, 6 de marzo de 2024

VÍCTIMAS O CÓMPLICES

                         La investigación del patético “caso Koldo”, que estalla contra el Gobierno de Sánchez y el PSOE sanchista, va pasando de castaño a oscuro a medida que van saliendo informaciones con el levantamiento del secreto del sumario, dando la sensación de que los presuntos implicados, a quienes obviamente hay que concederles la presunción de inocencia en el ámbito penal (en el ámbito político, como en el resto de casos, es imposible), intentan como pueden quitarse las pulgas de encima y en dicho intento nos van dejando una serie de curiosidades sospechosas que bien podrían evitar simplemente contestando a las preguntas que se les hacen o aportando las pertinentes pruebas de que no mienten y dicen la verdad. Así las cosas, llama la atención que, por ejemplo, no lo haga Francina Armengol, la Presidenta actual del Congreso de los Diputados (impuesta por el secesionismo) y ex presidenta del Govern balear (sustituida tras perder las elecciones autonómicas), quien, tras demasiados días callada siendo señalada de cierta complicidad en la trama (al igual que Ángel Víctor Torres, expresidente de Canarias y hoy Ministro de Política Territorial), comparece por fin ante los medios para defender su actuación en Baleares (bueno, salvando aquella anécdota de que en pleno confinamiento por el covid, ella se saltara el toque de queda que ella misma impuso), negando su relación con la trama corrupta (eso sí, sin aclarar como su govern entró en contacto con la trama de Koldo), y descartar que vaya a dimitir (como le exige el PP) pero evitando señalar quien estuvo tras la operación sospechosa de compra de mascarillas, reconociendo únicamente que, en todo caso, “puedo ser víctima, no cómplice” y cerrando el asunto con un “nadie nos dio una orden”, cuando sencillamente los periodistas le pedían que, en concreto, dijera quién se puso en contacto con la trama, tras saberse que otras CCAA socialistas como Aragón o Castilla-La Mancha rechazaron la oferta y descartaron la compra de mascarillas ofertadas por la trama. Bien sea, tal como dice Armengol, víctima o cómplice de la estafa, la realidad es que Armengol ocultó el informe de las mascarillas fake a cuatro controles pues su govern no trasladó la alerta sobre los defectos de las mismas o la no correspondencia con el pedido a los funcionarios que fiscalizaban el pago a la trama, con lo que ni Intervención, ni Guardia Civil, ni técnicos de Fondos-UE, ni Oficina Antifraude….sabían que el material no se correspondía con el pedido y, por tanto, era fake en el mejor de los casos. Y la triste realidad es que el govern de Armengol pagó la factura con inusual rapidez tras detectarse que era una verdadera estafa, tal como incluso reconoce Ábalos, mientras los correos internos evidencian, al menos, trato de favor a la trama de Koldo, pues el subdirector alertó de que las mascarillas eran un fraude a los dos días de recibirlas y, pese a ello, el Govern balear fabricó un expediente y libró en un insólito tiempo record 3´7 millones….y aunque un informe lo constató en 2020 no reclamó el importe abonado hasta 2023 cuando ya era patente que Armengol perdía las elecciones y tenía que dar paso a un govern del PP. Por todo ello, guste o no, víctima o cómplice, mientras no quede patente y bien explicado semejantes anomalías el PP exige por escrito la dimisión de Armengol como Presidenta del Congreso y la acusan de “mentir” y causar un “enorme daño” a la institución y de ser “una colaboradora necesaria” de la trama, ya que en su entorno se escudan en Ábalos, entonces todopoderoso ministro de Sánchez, con un expeditivo “nos fiamos del Gobierno”, pero nadie precisa quien fue el contacto con Fomento (misterios sin resolver).

            Entretanto el nuevo ministro Puente destituye a un alto cargo de Puertos por el “caso Koldo”, se trata de Álvaro Sánchez, secretario general del organismo, quien en principio negó (como ahora hace Armengol) cualquier vinculación con la trama tras conocerse que el aparato del PSOE sanchista colocó en Puertos al enlace de la trama corrupta y tras publicarse que el “Alvarito” que sale en las grabaciones mintió a la Inspección de Fraude. Y es que, a medida que avanzan las investigaciones se va enredando cada vez más el asunto conociéndose, por ejemplo, que la trama cobró más a Interior que a Fomento, es decir a Marlaska más que a Ábalos, por las mascarillas; o que el comisionista de Koldo también acudió a Barajas para reunirse con Delcy Rodríguez, ya que Víctor de Aldama estuvo con Ábalos y su lugarteniente durante su polémico encuentro con la Vicepresidenta de Maduro pues, según la ONIF, Air Europa recurrió al intermediario para cobrar una deuda del Gobierno de Venezuela tras “haber fracasado Zapatero” (otro que tal baila), en tanto que..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

domingo, 3 de marzo de 2024

HARTAZGO POLÍTICO GENERALIZADO

                         Cuando en democracia no se gobierna con lealtad y respeto a las reglas de juego democráticas establecidas las frustraciones ideológicas de la ciudadanía se van amontonando al extremo de que, con el tiempo, van consolidando una especie de hartazgo político generalizado, no ya con este o aquel partido o con este o aquel gobierno, sino con el propio sistema democrático, que ya no les vale, poniendo así en grave peligro la libertad y los derechos de los ciudadanos que contemplan hastiados cómo se desvanecen sus ansias y esperanzas de una convivencia pacífica y segura, frente a quienes actúan con absoluta impunidad. Y esa añorada y frustrada seguridad pasa inevitablemente por imponer siempre las reglas de juego democráticas establecidas y respetar las sentencias dictadas en firme por los tribunales de Justicia que, con todas las garantías procesales, se dicten contra quienes las hayan incumplido, lo que, de entrada, invalida “per se”, o debiera invalidar, cualquier negociación, pacto o contubernio de favor con los condenados o con quienes huyen de la Justicia para eludir sus responsabilidades, especialmente si se trata de gobernantes de cualquier ámbito territorial ya que en ese caso no sólo tienen la responsabilidad y obligación de cumplir las leyes, como cualquier ciudadano, sino además de hacerlas cumplir al formar parte libremente del entramado institucional del Estado de Derecho. Por tanto, lo que de entrada tiene que hacer este o cualquier otro Gobierno, si quiere empezar a poner orden y rebajar el hartazgo generalizado de la ciudadanía española, es, tal como prometió su Presidente Sánchez, traer al prófugo Puigdemont diciéndole al entonces candidato del PP “a ustedes, señor Casado, se les fugó Puigdemont, y yo me comprometo hoy y aquí a traerlo de vuelta a España y que rinda cuentas ante la justicia española” (exquisita promesa democrática), en vez de, como ha hecho y sigue haciendo, dedicarse a indultar a los colegas del prófugo condenados, eliminar del Código Penal alguno de sus delitos probados o rebajar las penas de otros y, por si no fuera suficiente tamaña arbitrariedad, en vez de, como prometió, traer al prófugo para que le juzguen los tribunales de Justicia, arroparlo y ampararlo al extremo de estar pactando con él una patética ley de amnistía que borre del mapa todas las graves fechorías contra el Estado de Derecho que cometió siendo parte del mismo como President de la Generalitat de Catalunya, con lo que el Ejecutivo, se pone de parte de los perseguidos de la Justicia y en contra de los tribunales, incluido el Tribunal Supremo. Con semejante forma de gobernar cualquier Gobierno ya hubiera dimitido por poner en grave riesgo la estabilidad democrática, más aún si, como es el caso, el partido político del Presidente ni siquiera es capaz de conseguir ser el partido más votado en los comicios. Pero, ya ven, en España da igual y PSOE y Junts (la izquierda nacional y la derecha catalana) acercan posturas para intentar cerrar esa ley de amnistía que el prófugo rechaza de momento porque no se considera personalmente amparado con el texto ya pactado, cuando el Tribunal Supremo, ya tan desautorizado por Sánchez, investiga además por “terrorismo” al prófugo al situarle como “autor intelectual” de Tsunami, mientras la Eurocámara se dispone a defender la prohibición de amnistías a malversadores (otro asunto por el que se investiga a Puigdemont) negociando que la directiva contra la corrupción incluya la prohibición de amnistías en toda la UE. Y mientras el Supremo, contra el criterio de la Fiscalía General y a favor de la mayoría de los fiscales (otro sinsentido peliagudo) abre la citada causa por terrorismo a Puigdemot y al diputado de ERC Wagensber, que huye a Suiza, la Comisión de Venecia, organismo del Consejo de Europa, que considera legítima la amnistía para la reconciliación, censura la tramitación urgente de la misma que exige el prófugo, al que cinco jueces del Supremo imputan terrorismo sin “duda alguna” y deciden por unanimidad investigarle mientras el Presidente del Gobierno se anticipa a sentenciar públicamente que no hay terrorismo alguno (palabra de Sánchez) mientras negocia la amnistía por la vía de urgencia con el prófugo.

            Un hartazgo político generalizado al que, sin duda alguna, colabora el cáncer de la corrupción crónica instalada en España y que escala al punto álgido con el patético “caso Koldo” en plena pandemia, que tan beneficiosa ha sido para algunos listillos y tan trágica para el resto. El “caso Koldo” se suma así a toda una lista de conductas inaceptables (e insoportables) que, en este caso afecta directamente al Gobierno de Sánchez y al PSOE, quienes, con la bandera de acabar con la corrupción, consiguieron derribar al anterior gobierno popular, mientras ahora son los protagonistas de la misma a la espera del alcance que pueda tener la investigación en curso, cuando se van conociendo aspectos de la trama tras el levantamiento del secreto del sumario. De momento sabemos (y esto no ha hecho más que empezar) que el empresario y comisionista Aldama, presidente del Zamora FC y clave en la trama del “caso Koldo”, presentó la...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).