Si el Imperio de la Ley
es el principio básico o la primacía de la ley, democráticamente establecida,
sobre cualquier otro principio gubernativo, especialmente contra la tiranía y
la arbitrariedad del poder político, aunque fueran bienintencionadas, no caben
críticas a las declaraciones del Presidente de Gobierno Rajoy tras los comicios
autonómicos catalanes, pues, al margen de coincidencias o discrepancias
ideológicas que con él se tenga, son impecables en un gobernante democrático.
En efecto, Rajoy, tras ofrecer “diálogo y lealtad institucional” al Gobierno
catalán futuro y mostrarse “dispuesto a escuchar y a hablar”, aclarando que lo
que comienza es una nueva “legislatura autonómica” (para eso eran los comicios
y no para otra cosa) y que, en todo caso, “los partidos de la ruptura nunca
tuvieron el respaldo de la ley y no tiene el apoyo de la mayoría de la sociedad
catalana” (como evidencian los resultados), es contundente a la hora de
precisar que el único límite es el marco de la ley, la línea roja que no se
puede rebasar en dicho diálogo, que, de forma abstracta y sin limitación ni
precisión alguna, tanto reclaman algunos, y precisa, por tanto, que seguirá
“velando porque se respete el Estado de Derecho, la igualdad de todos los españoles
y los derechos y libertades de todos” lo que supone que el Gobierno en ningún
caso aceptará que se “liquide la ley” ni se discuta “la unidad de España y la
soberanía nacional”. Además, remata sus declaraciones asegurando que el Estado
continuará prestando su apoyo a los catalanes, como ha sucedido hasta ahora,
“en condiciones muy difíciles”, para seguir garantizando la “viabilidad
económica de la Generalitat, y de los servicios esenciales que de ella
dependen”, recomendando al nuevo Ejecutivo catalán a “gobernar para todos los
catalanes, a superar la fractura, la tensión y los enfrentamientos que han
marcado estos últimos años” y “a sustituir el monólogo y la imposición
unilateral por el diálogo constructivo y leal, porque ayer se constató que¡... (sigue leyendo en
Blog Ojo crítico, http://jcremadesena.blogspot.com.es/)