lunes, 30 de octubre de 2023

ESPAÑA SOY YO

                         Después de meses de secretismo y chalaneo negociador, Sánchez, seguramente porque ya tiene pactada con el secesionismo su investidura, decide hablar por fin sobre la “amnistía”, la palabra maldita hasta ayer pero, desde hoy, bendita y benefactora; y lo hace ante el Comité Federal del PSOE, el máximo órgano de dirección del partido que, en su día, él desacató para hacerse con el poder del mismo mediante un proceso asambleario, ajeno a los Estatutos, con el objetivo de que las decisiones las tomasen los militantes de base, cuando, a tenor del acatamiento ahora y la falta de crítica de sus miembros (excepto, la de Page, una “rara avis”), hoy se apoya en ese Comité Federal más dócil y domesticado, dispuesto a decirle “sí bwana” a todo lo que él diga o haga; sin duda hay que valorar la capacidad de Sánchez como manipulador, con la ayuda de su más íntimo círculo de fieles que participan de los beneficios derivados de mantenerse en el poder. Y, convencido de que será fielmente arropado por los suyos, defiende ahora en ese domesticado Comité Federal que apoya la amnistía que le exige ERC y Junts (por ilegal que sea, tal como él defendía hasta el 23-J), y que lo hace por “el interés de España”, añadiendo que “en ese interés y en defensa de la convivencia entre españoles, defiendo hoy la amnistía en Cataluña por los hechos acaecidos en la década pasada”, cuyos protagonistas, hoy sus socios esenciales, andan condenados e indultados por él o fugados de la Justicia, cuando él mismo avalaba, como no puede ser de otra forma y cuando no eran imprescindibles para ser investido. El Presidente, no obstante, admite que ese cambio de opinión, tan frecuente en su proceder, es para “hacer de la necesidad, virtud” y defiende ahora la amnistía por “interés nacional” y en “nombre de España”, reconoce que es la “condición” que pone Junts y ERC para investirle, que es “la única vía posible” para que haya Gobierno y que el olvido “no es un fin, es un medio para avanzar en el reencuentro y la concordia”. Y, dichas todas estas mentiras o verdades a medias, un Comité Federal domesticado aclama a Sánchez con la única nota discordante (y a medias) de García-Page, único gobernante autonómico que le queda al PSOE con mayoría absoluta, quien no aplaude a Sánchez y se reafirma como líder de la oposición interna manifestando que “acatar no es comulgar” y que “no hay garantías de que renuncien a volver al punto de partida”, advirtiendo de que “choca con el proyecto político del PSOE”…. No le falta razón a Page pues Aragonés, conseguida la amnistía, exige además un referéndum de autodeterminación convenido de que si Sánchez le necesita se lo concederá antes o después, y Puigdemont, por otro lado, afirma que no renunciará “nunca” al 1-O, pues está envalentonado porque va a ser amnistiado, cuando Sánchez había prometido a los españoles que lo traería a España para ponerlo ante los tribunales y reparar así el error de Rajoy a quien el expresident se le escapó escondido en un maletero. Y todo esto porque Sánchez, embadurnado por un egocentrismo y narcisismo patológicos, se ha instalado, salvando las distancias, en las tesis del absolutismo de Luis XIV del siglo XVII, que identificaba al Rey con el Estado con el famoso lema “el Estado soy yo” de Rey Sol, o, en el mejor de los casos, se ha instalado en el despotismo ilustrado de finales del XVIII con su eslogan “todo por el pueblo pero sin el pueblo”, pues a Sánchez en el Comité Federal solo le ha faltado decir “España soy yo” y, por tanto, lo que me viene bien a mí le ha de venir bien a los españoles, como les sucedía con Luis XIV a los franceses, o argumentar que todo lo hace “por el pueblo, pero sin el pueblo”, como sucedía a los españoles con Carlos III, ya que es obvio que el pueblo español no ha decidido en las urnas conceder una amnistía, pues curiosamente ni PP, ni PSOE, ni Vox, ni otros partidos minoritarios, proponían semejante medida cuando pedían el voto ya que la consideraban inconstitucional y sólo defendía la medida el secesionismo catalán a la baja y alguno más suelto por ahí que entre todos no llegan al 4% de los votos y, si añadimos otros más benévolos con la medida (PNV, EHBildu, BNG….), incluido Sumar ni alcanzan el 20% de los sufragios, frente al 80% de votos alcanzados por quienes se oponían tajantemente a la amnistía y la consideraban inconstitucional (PP, PSOE, VOX….y alguno más).

            Salvo que los españoles aceptemos que el Estado es Sánchez (España soy yo) y que él todo lo hace por bien del pueblo pero sin contar con los ciudadanos (todo por el pueblo pero sin el pueblo), a quienes se puede engañar prometiéndole una cosa en campaña para que le voten y hacer luego la contraria si a España le conviene (es decir, si le conviene a él), es inaceptable y repudiable lo que...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

jueves, 26 de octubre de 2023

PACTO SÁNCHEZ-DÍAZ

                         Como era de esperar y todo el mundo sabía, el Presidente socialista y la Vicepresidenta comunista, para presionar al resto de socios ya que se agotan los plazos para la investidura, firman un pacto con el objetivo de reeditar la coalición gubernamental si, como también se espera, los secesionistas se prestan a apoyar el proyecto pluriideológico a cambio de que la coalición PSOE-Sumar acepte sus chantajes en este mercadeo de intereses personales y no del interés general que es lo que debiera inspirar cualquier proyecto gubernamental democrático. Y titulo este artículo como “pacto Sánchez-Díaz” y no como “pacto PSOE-Sumar” ya que las discrepancias al mismo son evidentes tanto en las filas socialistas, con críticas internas importantes, como en las populistas, con críticas severas de uno de los partidos, Podemos, a lo pactado por su jefa con el líder socialista. Pero, en todo caso, el acuerdo ya se ha firmado y, si la derecha secesionista de Junts lo considera oportuno a cambio de cesiones intolerables, estamos encaminados a reeditar un Gobierno de coalición semejante, o peor aún, que el que ahora está en funciones suscrito en su día entre Sánchez e Iglesias, es decir, entre PSOE y Podemos, que tantos bochornosos espectáculos nos ha brindado a lo largo de la Legislatura, con discrepancias internas insalvables e intolerables, al extremo de que a veces el Ejecutivo se posicionaba en una cosa y en su contraria a la vez. Pero, en fin, según Sánchez y Yolanda, es lo que han dicho los españoles en las urnas; yo creo que eso no lo hemos dicho. El programa pactado, que para nada cita la amnistía (palabra maldita), incluye, entre otras cosas, bajar la jornada laboral a 37´5 horas semanales con igual salario, más medidas ecológicas, limitar los vuelos cortos, encarecer el despido de espaldas a los agentes sociales, subir en 10.000 millones el Impuesto de Sociedades, prolongar los tributos a la Banca y a las energéticas, una reforma fiscal para elevar los impuestos…..en definitiva, disparar la ya elevada presión fiscal y trabajar menos, lo que obviamente aboca a que serán las empresas (en España medianas, pequeñas y autónomos en su inmensa mayoría) quienes pagarán la investidura de Sánchez….y no pasa nada, pues si, económicamente, todo ello fuera viable, adelante, pero me temo que su viabilidad recaiga en seguir endeudándonos más ya que nada dice, ni una palabra, sobre la mejora de la productividad o el necesario cambio de una estructura económica que en España hace aguas por todas partes, situándonos a la cola de la UE en muchos asuntos. En definitiva, un pactado programa de gobierno para presionar a los demás socios para que se sumen al mismo, pero que, ya de entrada, suscita reservas de Podemos, dentro de Sumar, cuyos portavoces rechazan las advertencias que hacen los podemitas, mientras los secesionistas, imprescindibles para que salga el proyecto adelante, avisan de que su voto no es seguro, por más que todos, incluidos Sánchez y Díaz, sepamos que todo es postureo como el que ellos dos han mantenido hasta la firma de este acuerdo, ya que ninguno de los que participan de este macro circo político puede echar marcha atrás por meros intereses personales y de grupo, lo que pone en evidencia que al final, más pronto que tarde, reeditarán el anterior “gobierno Frankenstein”, hoy en funciones, pero con ingredientes más lesivos aún para la ciudadanía española y para la higiene democrática. Un postureo que incluye una supuesta consulta a las bases del PSOE sobre la coalición, que elude la amnistía (como si no formara parte esencial de la negociación), y que ya ha escenificado Puigdemont en su patético Consell de la República, cuyas bases con una participación del 4% (¡del 4%!, es decir, cuatro gatos) le piden que no apoye a Sánchez y que bloquee la investidura, siendo la primera vez que el prófugo conoce la opinión de sus bases (ya ven que bases) tras el 23-J, mientras él sigue exigiendo la “nación catalana” en un acuerdo paralelo a la amnistía, para llevar al PSOE al límite de la negociación de la investidura y que acepte una fórmula que permita superar el filtro de un Constitucional politizado en que las decisiones ya se sustentan cada vez más en criterios políticos estrictamente, con mayorías ideológicas entre sus miembros, que en criterios jurídicos estrictos, como debiera ser.

            La cruda y patética realidad es que un prófugo, Puigdemont, tiene en jaque al Estado de Derecho porque Sánchez, sea como sea y a costa de lo que sea, quiere seguir siendo presidente del Gobierno tras haber perdido las elecciones, y al efecto Turrull, Nogueras y Boye negocian cara a cara con los socialistas para sellar un pacto en pocos días (se acaba el tiempo), mientras Junts, su partido, da ya por conseguida la amnistía y reclama que los violentos CDR y los policías también sean amnistiados, dejando fuera a Borras. Pero además Puigdemont exige que el Estado, a sus pies, les devuelva siete millones de euros (la pela es la pela) pues Junts reclama también al PSOE el pago inmediato de las fianzas del procés a cambio de su voto, cada vez más caro, hasta que llegue la hora de la verdad y...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

  

lunes, 23 de octubre de 2023

EL PUNTO DE PARTIDA

                         Lamentablemente son los secesionistas, socios de Sánchez, quienes no mienten ni cambian de opinión, tienen claro lo que quieren, ya sea legal o ilegal, y así lo dicen y reivindican, mientras quién miente y cambia de opinión según le conviene es el Presidente de Gobierno con su ambigüedad calculada para que le apoyen su investidura. En efecto, Aragonés comparece en el Senado y dice claramente que la amnistía no es el objetivo final sino que es “el punto de partida” pues “el destino es votar la independencia” y, reafirmándose en lo dicho, se marcha de la Cámara legislativa sin esperar a escuchar a los barones del PP defendiendo la igualdad de los españoles, ni a escuchar a los socialistas que ni siquiera asisten al encuentro en la Cámara Alta, donde en semejantes circunstancias, se responde al órdago del President catalán y al silencio de La Moncloa en pleno clamor autonómico contra la “indignidad” de Sánchez, que lamentablemente se blinda con más escoltas ante el rechazo progresivo de la calle, mientras la nutrida comitiva del Presidente, que llega a alcanzar las cien personas, contrasta con la discreción con que se mueven otros líderes europeos como el socialista alemán Schols o la derechista italiana Meloni. Así pues Aragonés ve la amnistía como un punto de partida para un referéndum pactado, que sería ilegal si no votan todos los españoles (y eso es lo que le debería responder el Gobierno), y obviamente los barones del PP lo utilizan para cargar contra Sánchez, que nada dice al respecto, mientras doce CCAA levantan un muro ante él por la “igualdad” que el Presidente no defiende, con lo que presidentes autonómicos que representan y gobiernan al 70% de la población española avisan que no permitirán “privilegios por apoyo a la investidura” y al respecto dice el andaluz Moreno que “ningún territorio es más importante que otro” y la madrileña Ayuso añade que “perpetra la mayor traición posible a un país”, España, mientras el catalán Aragonés reitera en el Senado que la amnistía sólo es otro paso más para votar “la independencia en Catalunya”, que sería ilegal, y son ya al menos cinco CCAA las que dicen que recurrirán al Constitucional si el Gobierno condona la deuda catalana y no la de ellas. Pero no queda ahí el asunto, pues, animado por este espectáculo bochornoso para cualquier país democrático que se precie, dice el presidente peneuvista Ortuzar, otro socio de Sánchez, en este caso de derechas, que “nos sentimos nación vasca y es la hora de resolverlo”, que “una de las tareas del PNV será limitar los excesos ideologizantes en la acción legislativa”, que “es el momento de que en Madrid haya voluntad para sacar la reforma del Estatuto” y que “hablamos de nación, garantías, soberanía y de quien arbitra en caso de conflicto”, obviamente todo ello referente a la nación vasca o catalana, que jamás conformaron un Estado propio a lo largo de la Historia, pero no referente a la nación española que se constituyó en uno de los primeros Estados modernos y que hoy, por decisión de todos los españoles deja en la Constitución todas esas cosas que Ortuzar dice que es de lo que se ha de hablar y cuya respuesta democrática se resume en una sola frase: respeto y acatamiento a la legalidad constitucional vigente y a sus procedimientos para modificarla. No en vano Rollán, Presidente del Senado, manifiesta que “la amnistía dejaría a España en un Estado fallido” pues, como dice Aragonés, sólo es “el punto de partida” para que el siguiente paso sea usurpar el derecho de todos los españoles (tu derecho y el mío) para que sólo unos pocos de ellos (de momento vascos y catalanes) decidan sobre el futuro de España, mientras por ese camino otras CCAA, con muchos más argumentos sobre derechos históricos que Cataluña y País Vasco, por haber sido al menos alguna vez Estados independientes (como Asturias, Aragón, Galicia, Andalucía, Valencia, León, Castilla, Mallorca…etc) podrían optar a independizarse con argumentos más solventes y entonces cabría preguntarse cuántos Estados independientes cabrían en este fallido Estado español y a continuación cuántos cabrían en una supuesta fallida UE o Europa. En fin, una locura que sólo es posible parar aplicando con contundencia la legalidad vigente en vez de pisotearla como se está haciendo en España.

            Y por si todo lo anterior no fuera suficiente, además Junts y ERC presionan para que Moncloa acepte un mediador o relator internacional, polémica figura que ya provocó en su momento una grave crisis interna en el PSOE y se rechazó, pero que ahora, la necesidad narcisista personal de Sánchez de ser investido deja la puerta abierta a semejante felonía aunque, de momento, se resiste a que seamos tratados como una república bananera menor de edad a la que hay que tutelar. ¿Caeremos en semejante bajeza antidemocrática? Esa es la cuestión. Entretanto Puigdemont pretende además negociar con..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

  

jueves, 19 de octubre de 2023

EL CONFLICTO POLÍTICO

                         Asumida ya por Sánchez la tesis de los secesionistas de que el “procés” es un conflicto político y, por tanto, lo acontecido durante el patético 1-O no fue un flagrante delito contra el Estado de Derecho al formar parte de ese “conflicto político”, Moncloa sigue dispuesta a abordar una Ley de Amnistía, sí o sí, para intentar conseguir con ello el apoyo del secesionismo totalitario a la investidura del Presidente, aunque intenta rechazar amnistiar a los violentos CDR para asumir el coste del 1-O (ya sería demasiado) cuando doce de sus miembros están a punto de ir a juicio acusados de delitos de terrorismo y además ocho de ellos de tenencia de explosivos. Pero es que además del sometimiento de Sánchez a los chantajes del secesionismo, el prófugo Puigdemont exige que un mediador internacional arbitre las negociaciones para resolver “el conflicto político” como si España fuera una república bananera y no un Estado de Derecho democrático perteneciente a la UE y, por tanto, homologado y homologable con las democracias de sus Estados miembros, en las que sería impensable que sus respectivos gobiernos pactasen o negociasen semejantes asuntos con partidos liderados por fugados de la Justicia y sería igualmente imposible un arbitraje internacional para superar los conflictos políticos. Así las cosas y con semejante degradación democrática aceptada por el Ejecutivo español los díscolos del prófugo añaden tensión a la investidura, mientras Aragonés presiona y se dispone a exigir un referéndum “escocés” en Cataluña (como si la historia y el marco legal democrático de Reino Unido tuviera algo que ver con el de España), acudiendo hoy al Senado para defender sus exigencias ante los barones del PP, en tanto que Zapatero (otro que tal baila) se declara a favor de ella y Felipe González pide que, en todo caso, Sánchez consulte a los españoles sobre el asunto, como hizo él con el polémico caso de la permanencia de España en la OTAN, tras habernos metido en ella el Presidente Calvo Sotelo. Por su parte Feijóo, ante todo este embrollo, se planta en Barcelona y Bilbao con su “tercera vía” para presentar la próxima semana una propuesta de “autonomismo amable” frente a las cesiones de Sánchez, con el objetivo de actualizar su discurso y su programa sin renunciar a sus esencias en materia territorial, lo que de entrada parece estar sentenciado al fracaso. No obstante Moncloa sigue confiando en un acuerdo “in extremis” con el prófugo Puigdemont ya que sus encuestas son más pesimistas que las del CIS de Tezanos, que otorga al PSOE un apoyo del 32´6% frente al 32´2% del PP, y por ello las usan para presionar a sus socios y hacerles entender que repetir elecciones no les conviene a ninguno para no asumir el riesgo de un gobierno popular más perjudicial para todos ellos, con lo que lo que hay que hacer es garantizar gobernar esta legislatura con las mimbres que han dado los comicios del 23-J, por esperpéntico y variopinto que sea, valga lo que valga y cueste lo que cueste….cuestión distinta es lo que convenga al conjunto de los ciudadanos españoles y a la higiene democrática de nuestro país.

            Y en medio de este patético espectáculo la guerra entre Israel y Hamás pone en evidencia las antagónicas posturas entre los miembros socialistas y los populistas del Gobierno español, una evidencia más en la política exterior, al igual que en muchas otras políticas, en que la visión del socialismo democrático y del comunismo populista no son compatibles, provocando un caos gubernamental cuando el sector minoritario del Ejecutivo se niega a asumir colegiadamente las posturas mayoritarias del mismo o a dimitir, dado que el Presidente no les cesa. En efecto, el dividido Gobierno de Sánchez provoca una verdadera crisis diplomática con Israel que califica de “inmoral” a parte del mismo denunciando que se “alinea con el terrorismo” por lo que pide a Sánchez que “condene las vergonzosas declaraciones” por parte de algunos ministros, mientras Exteriores tilda de “falsedades” estas declaraciones sobre el Gobierno y acusa a Israel de difundirlas. Pero lo cierto es que Sánchez evita corregir a Belarra que reclama procesar a Netanyahu por crímenes de guerra, aunque la crisis diplomática causada por la ministra podemita le fuerza a..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

lunes, 16 de octubre de 2023

PALABRA DE SÁNCHEZ

                         Terminada la ronda de consultas de Sánchez para conocer con cuantos apoyos cuenta para ser investido Presidente del Gobierno, resulta que sólo cuenta, de momento, con los 121 escaños socialistas y los 6 de EHBildu, es decir, 127 en total, dado que el resto, incluidos los 31 de Sumar (su socio de Gobierno) le han dicho de momento “no a la investidura” salvo que Sánchez se someta a cumplir sus condiciones o chantajes, algunas de ellas, como la amnistía o el referéndum de autodeterminación, totalmente inadmisibles y de difícil encaje constitucional. ¿Qué se estaría diciendo si con semejante bagaje de votos el anterior candidato, Feijóo, ganador de los comicios, se hubiera presentado ante el Rey para ser candidato cuándo se dijo que con los 172 que le aseguraban (137 del PP, 33 de Vox, 1 de CC y 1 de UPN) no merecía serlo ya que era una irresponsable “pérdida de tiempo” por su parte? Imagínenselo. Pero no importa dado que Sánchez asegura a los ciudadanos que más tarde o temprano tendrá los votos que le faltan, los ansiados 50 o 51 (31 de Sumar, 7 de ERC, 7 de Junts, 5 de PNV y 1 de BNG) pendientes de confirmación condicionada para alcanzar los 176, 177 o 178 que supondrían su pírrica victoria en el Congreso de los Diputados, ya que, salvo BNG, que si se lo negara al final le dejaría con 177, el resto del variopinto grupo de posibles socios ha de apoyarle “sí o sí” pues con sólo la negativa de uno de ellos o su abstención daría al traste con la anhelada investidura del Presidente. ¿Sería esto perder el tiempo o no? Pero, en fin, no pasa nada, si lo dice Sánchez, sabiendo el valor que para los ciudadanos tiene su palabra, seguro que lo consigue….y si además dice a los ciudadanos que ya está dispuesto a conceder la amnistía del procés, pero no el referéndum de autodeterminación, como le exigen los secesionistas catalanes tanto de izquierdas como de derechas, su segura investidura está más que garantizada, pues a poco que se empeñe ERC y Junts en mantener la doble exigencia, gracias al cumplimiento de la palabra de Sánchez es obvio que habrá amnistía y referéndum pues ya saben, la palabra de Sánchez tiene un valor supremo ya que siempre cumple con lo que dice, y en caso contrario, si además cuenta con la palabra y la tesis de Zapatero, que acaba de manifestar que “si hay que cambiar de opinión se cambia”, tanto mejor pues ya sabemos que Sánchez es especialista en cambiar de opinión incluso cuando hace lo opuesto a sus promesas electorales. A tal efecto, el Presidente no ha tenido vergüenza alguna de prestarse a una foto con los de EHBildu, como pago a su previa confirmación de que le van a decir “sí” a su investidura (no sabemos si en medio del oscurantismo negociador ha habido algún otro pago en negro) y, al parecer, no tiene reparo alguno incluso en verse con Puigdemont en Waterlóo ya que los de Junts son los más reacios a apoyarle y se fían bien poco de sus promesas o de su palabra, lo que es bien extraño dada la fiabilidad que la palabra del Presidente tiene. Pero, visto lo visto, es casi lógico que los post-convergentes catalanes quieran amarrar fehacientemente que sus chantajes serán cumplidos tras haber comprobado que sobre Bildu, con quien ya se ha cerrado el pacto, Sánchez decía lo siguiente: “con Bildu no vamos a pactar, si quiere se lo digo cinco o veinte veces” (dijo a los periodistas en 2015), “el único partido con el que les anuncio que no vamos a entablar conversaciones es Bildu” (2016), “el PSN y el PSOE tenemos la misma posición, con Bildu no se acuerda nada” (2019)…..y ya ven lo que ha pasado. Bueno, también debiera pensar Puigdemont que de él dijo que lo traería a España para ponerlo ante la Justicia y ahora dice que, con la prometida amnistía, lo va a traer para exonerarlo sobre cualquier delito que haya cometido. Pero no se alarmen por estas mentiras y “cambios de opinión” de nuestro Presidente, su palabra es sagrada y sus “cambios de opinión”, que avala Zapatero, también lo son.  

            Así las cosas el PSOE quiere que Junts se comprometa con la legalidad (es como pedirle peras al olmo) cuando los de Puigdemont han hecho de la ilegalidad su razón de ser, y al efecto Ferraz busca un acuerdo de garantías con la “seguridad jurídica”, lo que contrasta con la flagrante desautorización de la Justicia, incluido el Tribunal Supremo, que supone la pretendida amnistía que Sánchez está dispuesto a conceder. Pero Sánchez está convencido de que podrá..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

jueves, 12 de octubre de 2023

REPRESIÓN PENAL

                         No lo digo yo, no piensen que me he vuelto loco, lo dice Sumar en su informe o dictamen jurídico sobre la amnistía en el que critica la “represión penal” del “procés” para justificarla como pretende Sánchez, un indecente argumento que utiliza concretamente al proponer en el documento una amnistía desde 2013 para dejar atrás la “política criminal punitiva” con que se respondió al “procés” y además añade que el “conflicto político” entre Cataluña y el Estado (como si Cataluña no fuera parte de ese Estado) se agravó por “una contundente represión penal y por la falta de proporcionalidad con la que se adoptaron ciertas decisiones judiciales”; es en definitiva un plan activado desde el propio Gobierno (no hay que olvidar que Sumar es Gobierno, junto al PSOE) para denigrar nuestro Estado de Derecho que incluye en el perdón gratuito a los pacíficos CDR (entiendan la ironía) y a las indecentes conexiones de Puigdemont con Putin (o viceversa) que aún se están investigando. Dicho en “román paladino” para que lo entienda todo el mundo, el infame informe dice que los buenos fueron los totalitarios secesionistas, que acabaron proclamando ilegalmente la República de Catalunya, y los malos fueron los ciudadanos españoles, incluidos los catalanes, que conforman el Estado Español porque se opusieron a semejante felonía y para abortar la operación su Gobierno de turno envió a la zona del conflicto (no al conflicto entre España y Cataluña, sino al provocado por la flagrante comisión de delitos) a las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado para restablecer la legalidad vigente, tal como el Gobierno democrático debe hacer en estos casos. Y ante este repugnante y tendencioso informe jurídico de Sumar (no me extraña que luego se aprueben leyes tan deficientes como la del “sólo sí es sí”) la otra parte del actual Ejecutivo, es decir el PSOE de Sánchez, traga y calla ante semejante barbaridad de su socio cuando el mismo Presidente y su partido avalaron entonces las medidas adoptadas, incluido el art. 155 de la Constitución, para finiquitar aquella locura totalitaria, mientras ahora busca asesoramiento incluso entre los miembros progresistas del Tribunal Constitucional (consecuencia lógica de la politización de la Justicia, bien alejada de la objetividad) para intentar encajar constitucionalmente una amnistía a la que se oponía en la campaña electoral por considerarla inconstitucional. Un Sánchez, entregado ahora por meros intereses personales a la causa secesionista, que, a pesar de tanto despropósito interno de su gobierno, traslada a su partido tranquilidad absoluta y le asegura una legislatura de cuatro años a pesar de que según dicen públicamente no tienen un pacto cerrado con el secesionismo, de que tanto PNV como BNG (y todos son imprescindibles para la ajustadísima investidura) dicen distanciarse de un pacto a cuatro años, de que el PSOE evita poner fecha al pleno de investidura (ahora no es una pérdida de tiempo como decía que era cuando Feijóo lo intentaba como ganador de los comicios,) y a pesar de que la UE advierte de que hay “límites” a la amnistía y dice que la vigilará “de cerca”, pide la urgente renovación del CGPJ y el Comisario de Justicia advierte expresamente de las dificultades para borrar la malversación que cometió Puigdemont, mientras tres representantes de la Comisión Europea trasladan su temor a un grave “conflicto abierto” entre el Gobierno español y el Tribunal Supremo de España, que, desautorizado por la amnistía, quedaría al final como el malo de la película en sintonía con lo que dice Sumar. Pero, ya ven, Sánchez misteriosamente tiene claro que saldrá airoso de este patético enredo…..¿por qué lo tiene tan claro si es cierto que nada hay cerrado y que dicen la verdad sus presuntos socios? ¿quién miente en esta misteriosa negociación a varias bandas contradictorias cuando debiera ser pública y trasparente? En fin, lo típico en el oscurantismo sanchista.

            El caso es que el PSOE de Sánchez admite que necesita “más tiempo” para pactar con Puigdemont, ya que el acuerdo, que “parecía cerrado”, se alarga ahora, pues tras constatar en la reunión con Feijóo el esperado alejamiento a cualquier pacto con el PP, sus previsibles socios secesionistas siguen poniéndoselo difícil, mientras los sindicatos, cada vez más dóciles con este Gobierno, avalan esta curiosa política de distensión en Cataluña consistente en ceder al secesionismo todo lo que exija para asegurar la investidura. En efecto, Feijóo en la reunión clama contra la amnistía y reta a Sánchez a ir a elecciones el 14-E para que los españoles decidan con claridad cómo salir de este embrollo y el Presidente le pide respeto y rechaza que se agite la calle, mientras Lobato, desde el PSOE de Madrid manifiesta que “ir a nuevas elecciones no es un drama si no hay mayorías” y el PNV le exige el..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

lunes, 9 de octubre de 2023

NO EN MI NOMBRE

                         Decenas de miles de personas, a las que me sumo desde aquí, se manifiestan en las calles de Barcelona bajo el cartel de “amnistía no” al grito de “no en mi nombre” y de “Puigdemont a prisión”, dejando claro desde la sociedad civil su repulsa contundente al engaño a los ciudadanos que pretende hacer el Presidente del Gobierno y sus socios, incumpliendo su promesa electoral de que traería a España al ex president catalán, fugado de la Justicia, para ponerlo a disposición de los tribunales y de que rechazaba la amnistía y el referéndum de autodeterminación, con el contundente argumento de que ambas exigencias del secesionismo no cabían en la Constitución….y con esas premisas fuimos a votarle en las urnas, para ahora, traicionarnos vilmente en asunto de tamaña trascendencia con esta irresponsabilidad antidemocrática. Así pues, un rotundo “no en mi nombre” para no convertirme en cómplice, sino en un engañado más, de este atropello democrático que puede traer consecuencias muy graves a la concordia civil y a la convivencia pacífica de los españoles, por el mero hecho de que Sánchez necesita los pocos votos del prófugo y sus compañeros de aventuras totalitarias para conseguir ser investido Presidente en el Congreso de los Diputados, pasándose por el arco del triunfo todas las líneas rojas que él mismo anunciaba a bombo y platillo, prometiendo que jamás las cruzaría, para ahora dejar bien clarito que la línea roja de la amnistía sí se puede traspasar mientras intenta que sus socios secesionistas acepten que, de momento y hasta mejor ocasión, no exijan que se traspase la otra línea roja del referéndum de autodeterminación porque ambas cosas de golpe ya sería inaceptable del todo dentro y fuera de nuestro país. “No en mi nombre” pues a esta indecente cesión con cuentagotas al secesionismo para ir desmantelando, paso a paso y poquito a poco, nuestro actual Estado de Derecho diseñado por todos los españoles, incluidos los catalanes, durante la Transición, al que ahora los socios de Sánchez llaman “Régimen del 78” y dicen que lo quieren finiquitar, con la complicidad miserable del actual gobierno cuando debiera ser la institución del Estado más interesada en evitarlo al estar obligada a defenderlo, pues cuando sus miembros toman posesión del cargo, incluido el Presidente, juran o prometen ante el Jefe de Estado “cumplir fielmente las obligaciones del cargo”, “con lealtad al Rey” y “guardar y hacer guardar la Constitución”…. y ya ven para que vale el juramento o promesa, ni lealtad al Rey, al que hacen desplantes frecuentemente, ni hacer guardar la Constitución, manoseada permanentemente según convenga en cada momento a los intereses de unos u otros. “No en mi nombre” a que la Vicepresidenta Yolanda Díaz, izquierdista de toda la vida, diga miserablemente que Puigdemont, derechita y secesionista totalitario de toda la vida, “es un político fuera del país que merece respeto” (como si estuviera fuera del país de vacaciones o por asuntos propios y no huido de la Justicia) cuando es un prófugo de la Justicia española que no merece respeto alguno, y además añada la Vicepresidenta que “las ideas políticas no pueden terminar en la cárcel”, cuando todo el mundo sabe que el prófugo ni nadie está perseguido en España por sus ideas políticas, que puede ejercer y difundir con absoluta libertad, sino que está en busca y captura por huir de los tribunales tras haber cometido, como sus cómplices condenados, graves delitos contra el Estado de Derecho como es la sedición o la malversación…..es decir, que se trata de un presunto delincuente, con lo que, indecentemente, Yolanda miente a los españoles dejando entender que en España se persiguen las ideas y no los delitos, como es el caso. Y “no en mi nombre” a que, ante este rechazo del constitucionalismo a las cesiones del separatismo, lo que descoloca al PSOE, y reivindicando que se cumpla el constitucional principio de la “igualdad de los españoles”, me salga el PSC de Illa acusando cínicamente de “generar miedo y crispación” a esas decenas de miles de manifestantes en Barcelona, cuando el miedo y la crispación la genera su Jefe Sánchez, seguido por todos sus subalternos, incluido Illa, cambiando totalmente sus promesas electorales, y poniéndose, por intereses personales, a los pies de un prófugo, sobre quien dijo que lo traería a España para ser juzgado y ahora pretende traerlo, con todos los honores, para rehabilitarlo, borrando con la torticera amnistía su conducta filogolpista, a cambio, eso sí, de que le aúpe a La Moncloa, con lo que, al final, va a resultar que el delincuente sea el Estado de Derecho y sus Tribunales de Justicia por haber perseguido y condenado a quienes mediante atajos inaceptables pretendían cargárselo. Un rotundo “no en mi nombre” a tanta osadía de corte totalitaria que, atropellando mis derechos como ciudadano, en vez de protegerlos, pone en riesgo mi propia libertad.

            Y es que, tras demasiados días de vergonzoso silencio excluyendo de su vocabulario el maldito vocablo “amnistía”, por fin Sánchez habla ya de la amnistía sin avergonzarse y lamentablemente no lo hace para negarla, como hacía antes de las elecciones, sino para, según él, “superar” el “procés” aunque, de momento, no asume la propuesta que al respecto ha enviado Sumar a ERC y Junts, pero defiende la amnistía del 1-O ante los líderes de la UE reunidos en.... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/

 

jueves, 5 de octubre de 2023

REALIDAD DISTORSIONADA

                         Cuando la mentira y el enredo se instalan de forma sistemática en el proceder de los gobernantes para justificar lo injustificable, avalando al efecto cualquier cosa y la opuesta si les conviene a ellos y a sus intereses personales, se llega a distorsionar la realidad al extremo de hacerla irreconocible, y, lamentablemente, es lo que sucede últimamente en España, donde una democracia avanzada y homologada con las del resto de la UE es tratada por el propio Gobierno casi como una república bananera en la que cabe cualquier cosa y la contraria a gusto del consumidor totalitario que se lo exija. Una peligrosa realidad distorsionada, inadmisible e inaceptable, que los ciudadanos, si queremos seguir siendo ciudadanos y no súbditos, debiéramos desenmascarar y rechazar con todos los medios democráticos a nuestro alcance, exigiendo como mínimo, que, al menos, no se nos trate como imbéciles en un asunto tan delicado e importante como es la “amnistía”, de dudosísimo encaje constitucional, tal como el propio Presidente Sánchez afirmaba en la campaña electoral para pedir el voto pero que ahora, por exigencias de sus posibles socios totalitarios de gobierno, pretende conceder a pesar de ello mientras Moncloa busca al efecto el aval del TC con el pretexto de que ya hay hasta 22 sentencias del mismo que avalarían la validez de la amnistía y más de 30 tratados internacionales que validan genéricamente la medida de gracia. Cabe preguntar pues: ¿Desconocía estos términos el Presidente hace dos meses o, conociéndolos, los ocultaba para conseguir votos? Grave en ambos supuestos y más aún si ahora Moncloa, para justificar su ignorancia o su engaño anterior busca otra manipulación de la verdad para distorsionar la realidad, pues no hay nada más engañoso que tratar como iguales asuntos o situaciones desiguales ya que, en todo caso, no es comparable aplicar amnistías en supuestos de menor rango (como, por ejemplo, las de tipo económico o fiscal) que en supuestos que atentan directamente a la propia esencia del Estado de Derecho, como es el caso de España que ahora nos ocupa; ni es lo mismo equipararla con las amnistías aplicadas a países no democráticos o de dudosa consolidación democrática, incluida la que se dictó en la Transición. Una amnistía de esta envergadura no sería tolerada en ningún país de la UE ya que supondría reconocer que en dicho país no hay división de poderes y, por tanto, no hay democracia, así como aceptar que los tribunales actúan de forma arbitraria sin las garantías procesales adecuadas en una situación de absoluta normalidad democrática, como es el caso actual de España, por más que algunos, incluido ahora insólitamente el Gobierno de Sánchez, distorsionen la realidad diciendo en sintonía con los secesionistas que la amnistía es para resolver un conflicto político inexistente en vez de decir que es para borrar sin que quede huella alguna los graves delitos contra el Estado de Derecho, como la sedición, que cometieron los líderes secesionistas y que, por ello, fueron juzgados y condenados, como cualquier otro ciudadano, con todas las garantías procesales, esperando todavía de algunos de ellos que comparezcan ante la Justicia ya que para evitar las condenas, como las de sus compañeros de aventuras totalitarias, se fugaron de España con nocturnidad y alevosía. Y todo este embrollo sólo a cambio de que los catorce votos secesionistas de derecha e izquierda apoyen la investidura de Sánchez para formar lo que él llama “gobierno de izquierdas progresista”. ¿Alguien lo entiende? Creo que no, salvo que ponga a mayor nivel sus interese personales que los generales del Estado y de sus ciudadanos.

La realidad no distorsionada es que en España, contra lo que defiende el secesionismo totalitario con el que Sánchez pacta para ser investido, no hay presos ni exiliados políticos, ni persecución alguna contra el secesionismo o cualquier otra opción o ideología política, cuyos promotores, con absoluta libertad, lo difunden sin problema alguno, pues en la España real y no en la distorsionada, simplemente lo que hay es la aplicación de la Justicia con todas las garantías procesales a unos delincuentes por haber actuado al margen de la Ley y que, a pesar de que los ya juzgados y condenados ya han sido incluso indultados por el Presidente del Gobierno, siguen diciendo que volverán a cometer los citados delitos (por sedición ya no, pues Sánchez ya se encargó de borrar esta figura delictiva del Código Penal) en sintonía con lo que dicen también los fugados de dicha Justicia que por arte de magia han pasado con Sánchez de ser delincuentes en busca y captura a convertirse todos ellos en sus presuntos socios del futuro Gobierno democrático que, gracias a ellos, Sánchez pretende formar y con ello convertirlos en salvadores de la gobernabilidad del Estado Español, diseñado en la Constitución, que, paradójicamente, quieren destruir. Y como ahora los secesionistas.... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

lunes, 2 de octubre de 2023

JUEGO DE TRILEROS

                         Después de su mutismo sospechoso a cal y canto durante el fallido debate de investidura de Feijóo, llama la atención que, de pronto, el Presidente Sánchez se ponga las pilas y salga a la palestra para decir a los ciudadanos “sí a la amnistía, pero no al referéndum” como nuevo límite a la baja a las exigencias de los secesionistas totalitarios, con quienes pacta su propia investidura, cuando hasta hace cuatro días se negaba a concederles ambas cosas por considerarlas inconstitucionales y por ello fue incapaz de contestar a Feijóo en el debate del Congreso, dando la callada por respuesta a sencillas preguntas como “¿amnistía sí o no, yo digo no…y usted?” o “¿referéndum sí o no, yo digo no….y usted?” que Feijóo le hacía para que todos los ciudadanos, empezando por los diputados, supieran a qué atenerse. Ya ven, silencio sepulcral ante los representantes políticos de los españoles en el Sancta Sanctorum de la Democracia y, como si se tratara de un juego de trileros, consistente en esconder muy hábilmente la bolita entre tres vasos opacos para engañar al apostante, destapar ahora astutamente su bola oculta, es decir, su verdadera propuesta al chantaje secesionista, al que usa como gancho y viceversa, tras haber engañado al apostante, es decir, al ciudadano, para que se decantara por la bola equivocada con semejante estrategia diabólica, por la que él y sus socios siempre ganan y los demás perdemos. Un peligroso juego de trileros en que la bola oculta, es decir el engaño habilidoso, es ceder en última instancia a lo menos despreciable (la amnistía) para negar lo totalmente intolerable (el referéndum) que se pretende dejar aparcado hasta la próxima apuesta, tal como ya se hizo en jornadas anteriores con los indultos, la eliminación del delito de sedición o la rebaja de las penas por malversación….todos ellos negados por activa y pasiva hasta la saciedad por Sánchez, quien además tiene el cinismo de acusar a Feijóo de mentiroso, cuando él en esta asignatura ha obtenido matrícula de honor y cada vez son más quienes, al margen de sus voceros, van dejando de creerle. Por su parte y para seguir engañando a la gente, Junts y ERC, en plena gresca entre ellos por liderar el secesionismo totalitario y para que sus respectivos líderes Puigdemont y Junqueras puedan tener futuro político (cuando merecen ser apartados de la política, el primero, por estar fugado de la Justicia y el segundo por estar condenado por graves delitos contra el Estado, aunque indultado por Sánchez) pactan en el Parlament no investir a Sánchez sin amnistía ni negociación del referéndum, un aparente órdago al que el PSC (brazo socialista del chalaneo con el independentismo) contesta que “por ese camino no hay avance posible” y apela al diálogo (a ese falso diálogo de la inútil mesa de negociación, ya que no se puede negociar lo innegociable), para que enseguida salga Sánchez a la palestra con la nueva mentira (él lo llama “cambio de opinión”) de que ahora “amnistía si, referéndum no” ante la estupefacción ciudadana por no haber contestado en el Congreso, como procedía, hace dos días a las preguntas de Feijóo si tan claro tenía la respuesta (silencio ¿para evitar debatir en sede parlamentaria sobre sus contradicciones y mentiras?....quién sabe). Lo lamentable es que todo esto forma parte de este juego de trileros, incluido este órdago independentista de última hora pactado entre Junts y ERC, enemigos íntimos, pero ambos, con estrategias distintas, socios de Sánchez en lo fundamental, es decir, en la mentira, ya que el órdago secesionista conjunto aunque aparentemente “enfada” al PSOE (algo hay que decir para contentar a las respectivas clientelas) no cambia para nada los planes de Sánchez ya que, a pesar de todo, “las negociaciones van bien” y el Presidente, fracasada la investidura de Feijóo, pide paso diciendo “ahora nos toca a nosotros” y está convencido de que formará un “gobierno de izquierdas, progresista” de coalición con Sumar (¡menuda papeleta!) apoyado por Junts y ERC, que, como saben, son paladines de la defensa del actual Estado de Derecho Español y de la democracia enmarcada en la actual Constitución Española.

            Así las cosas, el Rey inicia la segunda ronda de consultas para nominar candidato a Sánchez, quien curiosamente comparece sin tener asegurada esa mayoría que de forma mezquina le exigían previamente a Feijóo para que aceptara la candidatura a ser investido a pesar de haber ganado las elecciones, argumentando que si aceptaba la propuesta del Rey era perder el tiempo, pero que ahora, con menos votos asegurados es totalmente legítimo que Sánchez aspire a la investidura si el Jefe de Estado se lo propone. Ya ven, distinta vara de medir para que..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).