Aunque era lo de esperar
en el líder de un partido que se declara antisistema democrático, cabe resaltar
que, mientras los partidos negocian o intentan negociar un pacto nacional
contra el secesionismo, Iglesias se autoexcluye del mismo, con lo que en consecuencia
se declara a favor del golpe de Estado que los independentistas han planteado
al Estado de Derecho, mientras Rajoy continuará las consultas con el resto de
partidos (ya ha consultado al PSOE, C´s y Podemos), mientras celebra el
“respaldo” del PSOE y de Ciudadanos para, como Presidente del Gobierno,
“liderar la respuesta del Estado ante el desafío” independentista y lamenta el
autodescarte de Podemos que se posiciona en contra. El pacto del que estamos
hablando es por la unidad de España, la soberanía nacional y la obligación de
cumplir las leyes democráticas, por lo que si Iglesias dice, tras la
entrevista, no estar de acuerdo con el Presidente en “casi nada” es obvio que
sitúa a Podemos contra la unidad de España, contra la soberanía nacional y contra
el cumplimiento de la legalidad, en coherencia lógica con su ideario
antisistema por más que en los últimos tiempos intenten vender lo contrario por
razones electorales. Rajoy celebra pues el “respaldo” de PSOE y C´s para el
liderazgo de la defensa del Estado de Derecho, que le corresponde como
Presidente del Gobierno, y dice estar “muy satisfecho con C´s…” ya que coincide
con Rivera en lo “sustancial”, como son los tres objetivos básicos citados
(unidad nacional, soberanía nacional y legalidad), que comparte también el
PSOE, y respecto a Podemos, seguramente porque se lo esperaba, manifiesta “nada
perdí por esta conversación” con Iglesias, quien, ante momento político tan
delicado, prefiere seguir mareando la perdiz instando al Presidente a que haga
un doble referéndum, uno en Cataluña y otro en el resto de España. Nada ganó
Rajoy en la entrevista con Iglesias, pero los españoles, incluidos los
catalanes, ganaron mucho pues a Iglesias se le ha visto el plumero totalitario
en momento tan crucial, en sintonía con los cinco votos que prestaron al
totalitario discurso de Forcadell en la constitución del Parlament. Al menos
con esta rueda de consultas sabremos quienes están a favor y en contra del
Estado de Derecho y de la democracia. De momento... (sigue leyendo en
Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)