Hay que tener cara dura
para afirmar “soy objeto de caza mayor”, como ha hecho Artur Mas, después de
que el tesorero de su partido, CDC, haya sido detenido, junto al director de
infraestructuras catalán y otra serie de personas, implicadas en la presunta
trama del ya famoso 3%, que denunciara en el Parlament en su día Pascual
Maragall y posteriormente en Sede Judicial una concejala de ERC. La
investigación del caso sitúa a CDC en el centro de la trama y prueba que
ingresaba sumas millonarias a cambio de concesiones, dando un golpe en toda
regla a la red del 3% al desmantelar la trama empresarial de financiación
ilegal de Convergència con registros en varios puntos de Cataluña, señalando el
fiscal al tesorero de CDC como clave en el cobro de “sobornos”. La agenda del
tesorero de Mas prueba el cobro del 3% a los empresarios, demostrando que Andreu
Viloca concertaba entrevistas personales e indicaba la cantidad que debían
ingresar por transferencia, en metálico o en un cheque, así como que el
director de infraestructuras obligaba a sus empleados a modificar los pliegos
de condiciones de las obras adjudicadas. Ahora Fiscalía apunta a la Fundación
de Convèrgencia como “canal directo” de los “sobornos” que iban al partido, que
se convierte en el centro de la trama corrupta, pues “no son donaciones a la
Fundación, el dinero va a Convèrgencia”. Incluso uno de los seis empresarios
detenidos es sospechoso de dar comisiones a los Pujol. Y a pesar de todos estos
descubrimientos en el transcurso de la investigación, más o menos lo que se
viene haciendo en otros casos como Gürtel, EREs falsos, Formación, etc (los hay
para dar y vender), Artur Mas, a diferencia de los líderes de los demás
partidos afectados por dichos casos (que esquivan el temporal como pueden), con
un cinismo impresentable vincula la operación judicial al proceso soberanista,
que todo lo borra y todo lo cubre. Ya ven en las demás Autonomías y en los
demás partidos la investigación judicial sobre presuntos casos de corrupción o
financiación ilegal de partidos, que viene a ser lo mismo, es pura justicia,
pero, según Mas, en su caso y en Cataluña no se trata de justicia sino de “caza
mayor” para cargarse su totalitario proyecto independentista. Hay que tener
jeta para no.... (sigue leyendo en
Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)
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