jueves, 30 de marzo de 2023

NI SIQUIERA UN MAQUILLAJE

                         Sánchez liquida las vacantes en el Gobierno de las ministras socialistas Maroto y Darias, que abandonan el Ejecutivo para ser candidatas respectivamente en Madrid y Canarias, con una mera sustitución de ellas en sus ministerios nombrando a Hector Gómez en Industria y a José Manuel Miñones en Sanidad, cuando se especulaba y esperaba que, tal como está el patio, el Presidente aprovecharía la situación para hacer cambios más  profundos de cara a los pocos meses que quedan de Legislatura pues nadie se explica que determinados ministros (ministras o ministres) sigan calentando el sillón, como es el caso, por ejemplo, de Irene Montero, Belarra o Marlaska, además del desaparecido Garzón y alguno que otro desconocido más. En fin, ya ven, Sánchez opta por la resistencia y se limita a hacer este pequeño obligado retoque que ni siquiera logra ser un pequeño maquillaje para decirle a la opinión pública que está dispuesto a enderezar entuertos, aunque ya sabíamos que en lo referente a las ministras podemitas no sucedería nada ya que en este pintoresco gobierno de coalición de dos en uno el Presidente caree de la potestad de nombrar y cesar a todos sus ministros, insólito en cualquier otro gobierno de coalición del mundo mundial, pues los podemitas son intocables. No en vano, barones del PSOE lamentan tener que ir al 28-M con el “lastre” del intocable Podemos que, siendo pocos, están mal avenidos al extremo de que en el grupo parlamentario andan entre ellos a la gresca (15 diputados apoyan a Yolanda Díaz y 18 a Montero y Belarra), mientras el apoyo a Díaz de Errejón, que ya se largó de Podemos para crear su propio partido como ahora pretende Yolanda Díaz, pone de los nervios a Pablo Iglesias ya que “ella está más cerca de Más País”, cuando Podemos trata por todos los medios y sin éxito hasta ahora de que la Vicepresidenta, nombrada a dedo por el emérito Iglesias, firme un previo pacto que la comprometa a unas “primarias abiertas” para encabezar una candidatura conjunta, aunque el emérito podemita opera como líder en la sombra para apartar a su díscola discípula de un protagonismo victorioso frente a su invento de Podemos, cada vez más de capa caída y con riesgo de romperse definitivamente, mientras a Sánchez, que apuesta por Díaz de forma inequívoca, le preocupa cada vez más que los partidos a su izquierda comparezcan más divididos todavía lo que restaría votos a su objetivo de poder volver a editar el actual gobierno de coalición. De momento, ya ven, ni tocar un pelo a sus ministros podemitas, ni a sus ministros del ala socialista más cuestionados, como es el caso de Marlaska, que acaba de recibir un varapalo bien serio por parte del Tribunal Supremo que anula su caprichosa decisión de cesar al Coronel Pérez de los Cobos en la Guardia Civil, con lo que el cese del militar, decretado por Marlaska, fue ilegal. En efecto, el Supremo anula la represalia de Marlaska a Pérez de los Cobos al ratificar que el Ministro del Interior y la recién dimitida Directora de la Guardia Civil, a cuyo marido está investigando la Justicia, lo apartaron de forma ilegal tras negarse él a informar al Gobierno de la investigación judicial por la manifestación feminista al inicio de la pandemia. No en vano la Guardia Civil celebra el varapalo a Marlaska ya que “lo de Pérez de los Cobos fue la vendetta del peor ministro” y mandos y agentes recuerdan que el coronel se limitó a “cumplir la ley” al no informarle de la investigación del 8-M de la pandemia, por lo que ahora, tras la sentencia del Supremo, Interior tendrá que restituirle….¿y qué hace Marlaska?, en vez de dimitir, como haría cualquier otro ministro ante semejante fiasco, maniobra para impedir la reincorporación del coronel y vincula ahora a De los Cobos con los fondos del “caso Kitchen”, sabedor de que, como las ministra podemitas, es intocable, pues Sánchez no sólo no le cesa, como le pide la oposición, sino que incluso alaba su gestión al frente del Ministerio.

            Y mientras Sánchez se limita a este mínimo retoque obligado en el Ejecutivo, nombrando a dos nuevos ministros de perfil bajo, renunciando a fichajes estrella que le pudieran hacer sombra, y afirma que la coalición llegará hasta el final, aunque el partido no descarta cambios más profundos tras el 28-M (dependerá de los resultados), nada menos que el Consejo de Estado pide a su Gobierno “más rigor” en sus leyes, pues, aprovechando el informe sobre secretos oficiales, le recrimina su inadecuada técnica legislativa y le pide “extremar” el celo en los tiempos y en la tramitación de las leyes. Entretanto los partidos reabren..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

lunes, 27 de marzo de 2023

CARRERA ELECTORAL HACIA EL 28-M

                         Con la pseudo-moción de censura se acaba de dar el pistoletazo de salida a la carrera electoral hacia el 28-M, cuyos resultados supondrán, sin duda, otro pistoletazo de salida hacia las elecciones generales de final de año. Es evidente que los partidos, y muy especialmente los mayoritarios, PSOE y PP, ante semejantes retos, buscan ya sin rodeos las formas de arrinconar a su adversario político pero sin olvidar que van a necesitar a sus más próximos partidos minoritarios, ideológicamente hablando, pues lo más probable es que los españoles sigan rechazando las mayorías absolutas de ninguno de ellos. Así las cosas, la búsqueda del voto y la posterior gobernabilidad se hace más compleja y las rencillas partidarias más complicadas por lo que se requiere acertar en las estrategias para salir victoriosos, no vaya a ser que se pasen de frenada y, tras los comicios, la gobernabilidad sea imposible. En definitiva, se trata de buscar el voto dónde sea y cómo sea, por lo que cada partido busca apurar al máximo su posición de salida en cada territorio según sea gobernante u oposición, sin olvidar que a nivel nacional el partido gobernante es el PSOE y, como tal, ha de responder y dar cuenta de la gestión realizada, pero, a su vez, cuenta con la ventaja de gobernar, al extremo de que ya Albares pide unos 600 funcionarios para el aluvión de nacionalizaciones, alentadas por el Ejecutivo (no cabe el lujo de desperdiciar un solo voto), mientras los sindicatos denuncian la “avalancha” de peticiones que soportan los consulados por las prisas del Gobierno para tramitarlas antes de las elecciones, mientras proliferan como nunca los anuncios del Ejecutivo en televisión sobre las políticas realizadas a lo largo de la Legislatura que consideran más acertadas y mientras intenta relegar las más perniciosas y escandalosas, propiciadas por Podemos, en favor de Yolanda Díaz con la intención de que su  proyecto “Sumar” aglutine al deteriorado proyecto de Unidas Podemos, que cada vez tiene menos fuerza para defender su “no” a la vicepresidenta puesta a dedo por Pablo Iglesias como su sucesora en el Ejecutivo. Por su parte el PP se fija el objetivo de “sumar más votos que la izquierda” para poder gobernar en solitario y Feijóo se vuelca en las veinte provincias dudosas para Vox a quien, junto a Ayuso, repudia por su “antipolítica” tras la presentación de la esperpéntica moción de censura que puede haber dado oxígeno a Sánchez, mientras Abascal amenaza con represalias; en definitiva, Feijóo y Ayuso se desmarcan de Vox ante la carrera electoral del 28-M: el presidente del PP reniega de la moción calificándola de “esperpento político” y la presidenta madrileña rompe directamente con la ultraderecha tras cuatro años como aliados, dejando claro en la Asamblea de Madrid que “cada uno siga su camino” tras el choque por el rechazo a las rebajas fiscales a inversores, culminando así la tensión entre Ayuso y Monasterio desde que Vox rechazara aprobar los Presupuestos para 2023. Entretanto Cuca Gamarra, la portavoz popular en el Congreso y Secretaria General del PP, sostiene que “el PP no comparte la alternativa que ofrece Vox” y añade “buscamos aglutinar una mayoría suficiente para poder gobernar de la mano de Feijóo con estabilidad” mientras anuncia que “reformaremos y derogaremos todas las leyes de ingeniería social” y deja claro que “con Ayuso hay diálogo, respeto y buena sintonía, cuenta con nuestro respaldo absoluto”. Y ante esta ruptura del PP con Podemos el PSOE y el Ejecutivo dicen que es pura estrategia y que lo que desean ambos es gobernar juntos, mientras dirigentes socialistas sostienen que durante la moción de censura “la operación de Sánchez es para salvar a Yolanda Díaz de las garras de Podemos”, cuando, según GAD3, el 78% de españoles respaldan reformar la ley del “sólo sí es sí” y dos de cada tres votantes de UPodemos apoyan la modificación de la norma estrella del Ministerio de Igualdad, que, de momento, rechaza el sector morado del Gobierno y respalda el PP.

            En fin, un enfrentamiento a cara de perro entre PSOE y PP, es decir, entre Sánchez y Feijóo, para ver quien sale más dañado o más beneficiado, incluso ante la propia UE. Al respecto Feijóo ofrece ya un programa “de gobernanza” y no de resistencia y presenta la hoja de ruta del PP para el 28-M mientras denuncia la pinza “surrealista” de PSOE y Vox y cree que Sánchez busca “destruir a la oposición” y “manipular” sus palabras para hacerlo parecer ante la opinión pública como incapaz de gobernar, mientras el Ejecutivo busca regularizar urgentemente a medio millón de migrantes con una iniciativa parlamentaria, apoyada por Podemos, para darle papeles de forma “exprés” e intentar pescar votos como sea, mientras el PSOE cree que su socio UPodemos ya ve ganador a Feijóo y trabaja para un futuro con Irene Montero, por lo que “impulsa la figura” de la ministra de Igualdad para ser el “referente de la izquierda” contra PP y Vox, cuando el Gobierno promueve a Yolanda Díaz para ver si su liderazgo en esa izquierda equilibra el manifiesto deterioro de UPodemos que vaticinan las encuestas. En efecto,....... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

  

jueves, 23 de marzo de 2023

SHOW PARLAMENTARIO

                         Quienes hemos tenido el tiempo y las ganas suficientes para seguir en directo el farragoso debate de la pseuda moción de censura (evitando así que los diferentes tertulianos nos lo cuenten luego de forma subjetiva e interesada en los medios de comunicación) hemos podido constatar desde el inicio del debate (si es que se puede llamar así) que se trataba de cualquier cosa menos de una moción de censura que el mismísimo Sánchez, en su primera y larguísima intervención, ya calificaba como “delirante” y “show parlamentario”, cuando en días precedentes sostenía que la iniciativa del ultraderechista Abascal con el comunista Tamames como candidato había que tomársela muy en serio, y además calificaba de “indecente” la anunciada abstención del PP, cuando el PSOE hizo lo propio (es decir, se abstuvo, junto a PNV y PDeCat) en la moción de censura que Pablo Iglesias presentó en 2017 contra el Gobierno de Rajoy y que sólo contó con los votos afirmativos del proponente Podemos (al que se sumaron los de ERC, Bildu y Compromís) y fue rechazada con los votos del entonces gobernante PP y de Ciudadanos. Show parlamentario o no, lo cierto es que, como sucediera en la citada moción de Iglesias contra Rajoy o en la posterior de Abascal hace dos años contra Sánchez, ambas mociones ya nacían de entrada condenadas al fracaso, pues, al no estar interpuestas por el principal partido de la oposición no cabe en cabeza humana que puedan prosperar contra el Gobierno de turno y a la vez contra el principal partido de la oposición de turno, lo que es sencillamente un sinsentido y un disparate. Pero es que, además, en esta moción de ahora, ni siquiera el candidato alternativo, Tamames, es el líder del partido minoritario proponente, Vox, que nada tiene que ver ideológicamente con él sino todo lo contrario, con lo que tampoco es viable el exigido programa de gobierno alternativo, aunque, en honor a la verdad, cabe decir que esto ya sucedió también con la exitosa moción de censura de Sánchez a Rajoy, en la que, al menos, quien la interponía, el PSOE, si era el principal partido de la oposición y el candidato alternativo era su líder, saliendo adelante de chiripa, aunque llame la atención que ahora Sánchez reproche en este debate a Vox que no se haya presentado un programa de gobierno alternativo y califique la moción de “destructiva” y alejada del carácter constructivo que exige la normativa, cuando él hizo lo propio en la moción que le aupó al poder. En fin, un “show parlamentario” sin duda en el que participan todos aportando sus incoherencias y cinismos, sin importar para nada el objetivo de una mejor gobernabilidad alternativa a la existente y que, de entrada, comenzaba con la presentación de la moción y del candidato Tamames por parte de Abascal a quien, antes de que interviniera Tamames, Sánchez, que podía intervenir en el momento que quisiera, replicaba con una intervención de casi una hora para enzarzarse con el “telonero”, como calificaba a Abascal, en un agrio debate de réplicas y contrarréplicas acusando a Vox de generar “odio” y de “querer destruir la convivencia” con esta moción “destructiva” y de ”tierra quemada” mientras Tamames esperaba pacientemente para intervenir y presentar su programa alternativo, que, cuando por fin pudo leerlo, consistía más bien en un diagnóstico de la situación de España, más parecido a una conferencia académica que a un programa de gobernabilidad alternativo, que era lo procedente. El show parlamentario estaba servido incluso antes de saber qué alternativa presentaba el candidato, que, obviamente, no fue ninguna.

            Un show parlamentario en el que Sánchez, empeñado en la estrategia de sus socios de investidura, se esmeraba en denunciar el “inmenso daño” que el PP hace a la democracia española con su abstención (él por lo visto no hacía ninguno cuando se abstuvo en la moción de Pablo Iglesias a Rajoy) y aseguraba que se trataba de un pago a Vox, al que necesitará en el futuro si quiere gobernar, olvidándose de los pagos que él ha tenido que hacer para gobernar a los secesionistas y al resto de socios de su investidura. Se trataba, junto a Yolanda Díaz, su elegida como coportavoz del Gobierno, de presentar a la derecha y a la ultraderecha como similares, arremetiendo contra...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

lunes, 20 de marzo de 2023

PINTORESCA MOCIÓN DE CENSURA

                         En la acepción de “extravagante o chocante”, que no en la de “atrayente, agradable o interesante por su tipismo”, cabe calificar de “pintoresca” la moción de censura que no se sabe contra quién es o para qué se debate en el Congreso de los Diputados a instancias del partido de extrema derecha, Vox, con un conocido candidato alternativo de izquierdas, Tamames, quien, a sus casi 90 años de edad, es referente histórico del Partido Comunista de España y prestigioso economista, y que ha aceptado la oferta de Abascal para encabezar este reto contradictorio y absurdo carente de cualquier lógica y ajeno a todo lo que representa y debe ser la moción de censura diseñada en nuestra Constitución con carácter constructivo, es decir, con el requisito de ofertar, desde la oposición, una seria y viable alternativa de Gobierno para evitar precisamente un adelanto electoral y para mejorar la gobernabilidad, cuando, precisamente ya estamos en las puertas de unas elecciones obligadas por caducidad de la Legislatura y cuando, de entrada, la pintoresca moción sólo cuenta “a priori” con el respaldo minoritario de Vox y, por tanto, está condenada al fracaso más rotundo, aunque, visto lo visto, si nos fijamos en la que aupó a Sánchez al poder, que tampoco contaba “a priori” con una mayoría parlamentaria ni presentaba una alternativa viable que mejorara la gobernabilidad, siempre cabe esperar cualquier cosa, incluso la traición de algunos (en aquel caso fue la del PNV) para que por sorpresa salga adelante, aunque en este caso se necesitaría demasiados traidores para hacerlo posible. En definitiva, más que una seria moción de censura cabe esperar cualquier otra cosa en el Congreso de los Diputados, algo que no se sabe bien qué va a ser pero que mueve a todos los grupos políticos a especular sobre los beneficios o perjuicios que semejante mascarada parlamentaria les puede aportar mientras, de momento, parece que sólo Vox, el proponente de la moción, y el PSOE, cuyo gobierno es el destinatario de la misma, se toman el asunto en serio o aparentan tomárselo, pero entre un mar de dudas sobre las consecuencias que el asunto pueda tener para sus particulares intereses. Y al efecto Moncloa descarta de entrada dar protagonismo a Podemos, que quiere que sus ministras Belarra y Montero, como miembros (perdón: miembras, miembres, miembris o miembrus) del Ejecutivo censurado, repliquen a Vox, mientras se filtra el discurso de Tamames tras enviárselo a sus amigos; un Tamames que no cambiará su discurso pese a haberse filtrado y que, entre otras cosas, pedirá elecciones y declara públicamente que “España se asemeja a una autocracia”, “no he votado nunca a Vox, de cara al futuro ya veremos”, “se puede decir que España es una nación de naciones, una supernación”, “no hay que acabar con las autonomías porque ya han enraizado mucho”….. En fin, como ven, total sintonía ideológica con Vox (perdonen la ironía), el partido que lo propone, aunque, puestos a sintonizar, poco tiene que envidiar a la sintonía existente entre PSOE y Podemos en el actual gobierno de coalición, que tantos espectáculos nos viene ofertando sobre tantos asuntos esenciales en esta Legislatura que agoniza.

Y, ante tanto desbarajuste y falta de sentido común, hasta el propio Vox ya admite incluso que su ala derecha no entiende la moción de censura planteada por la dirección del partido, aflorando el malestar de las bases más ideologizadas con el candidato, mientras se agudizan las lógicas diferencias con él y surge la incertidumbre sobre lo que pueda decir durante el debate, en tanto que Abascal interviene para atajar la crisis de nervios en el partido compareciendo con Tamames para intentar recuperar el control de la moción. Por su parte el PSOE, ante el interés de protagonismo de Belarra y Montero durante el debate, busca “otras fórmulas” de intervención y valora la estrategia de que sea Yolanda Díaz, como ministra del Gobierno, la que intervenga en las réplicas junto a Calviño, mientras Sánchez atacaría la abstención del PP anunciada por Feijóo “como un acercamiento a la ultraderecha”. Un PP que, por cierto, se dispone a..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

viernes, 17 de marzo de 2023

¿ENSOÑACIONES O REALIDADES?

                         Justo cuando acaba de fracasar la reforma de la “ley mordaza” porque ERC y Bildu (socios de investidura de Sánchez) votan con PP, Vox y Ciudadanos para tumbarla…. y justo cuando se evidencia la ruptura interna del Gobierno de coalición de Sánchez al votar su socio Podemos en el Congreso en contra de la reforma del “sólo sí es sí”, que sale adelante gracias a los votos del PP, dice cínicamente Bolaños (ministro de la Presidencia y mano derecha de Sánchez) que las discrepancias con sus socios se limitan al “sólo sí es sí”, que “hemos logrado un clima más habitable en Cataluña, antes las empresas no invertían, huían”, que “el sector financiero tiene una muy buena salud”, que “hay que dialogar más, y nos gustaría llegar a más acuerdos con el PP” y, por tanto, pide “otra legislatura” ya que “estamos mejor que hace cinco años” y “seguiremos dando profundidad a las medidas contra la inflación que ya hemos aprobado”. Por su parte le sigue Patxi López, portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, manifestando que “todos podemos tener en casa un corrupto o un corruptor” como justificación indeseable del deplorable “caso Mediador” o del diputado socialista “Tito Berni”, convertido por arte de magia para desviar la atención en el “caso cuarteles” dadas las presuntas implicaciones o complicidades entre ambos asuntos de corrupción que la Justicia está investigando, cuando la Eurocámara pide analizar si el diputado socialista Tito Berni recibió o no fondos europeos pues la eurodiputada Hohlmeier, presidenta de la Comisión de Control de los mismos, anda “preocupada” por “la ejecución de proyectos en las Islas Canarias”, mientras el Congreso de los Diputados rechaza la propuesta del PP de establecer una Comisión de Investigación sobre el asunto. Y ante estas rotundas declaraciones cabe preguntarse si las palabras de Bolaños obedecen a ensoñaciones ya que las realidades que describe dejan bastante que desear pues la ristra de discrepancias profundas entre morados y socialistas en el Ejecutivo es interminable y no se limita al ”sí es sí”, pues el clima más habitable en Cataluña es muy discutible a pesar de todas las cesiones indecentes que se han hecho a los secesionistas, pues las empresas siguen incómodas no sólo en Cataluña sino en toda España en medio de insultos y señalamientos desde el propio Gobierno, pues el sector financiero sigue aquejado de inestabilidades como se está poniendo en evidencia en estos días, pues no se puede llegar a más acuerdos con el PP si miembros del Ejecutivo le descalifican y califican como extrema derecha permanentemente, pues no estamos mejor que hace cinco años y basta con preguntar en la calle para comprobarlo, y pues, ya ven, las medidas anti-inflacionistas tomadas siguen sin dar resultado con los precios disparados al subir el IPC en febrero un 6% y el precio de los alimentos nada menos que un 16´6%, empobreciendo a los asalariados a niveles de 1996, mientras el Gobierno culpa de ello al clima. En definitiva, o Bolaños está en las nubes o percibe realidades bien distintas a las que sufre la mayoría de los ciudadanos. Por su parte Patxi López, simplemente escaquea el bulto en un asunto tan feo como es la corrupción (asunto que aupó a Sánchez al poder con su moción de censura a Rajoy) con la obviedad de que “todos podemos tener en casa un corrupto o un corruptor” cuando lo que esperan los ciudadanos es que, al menos, cuando esto se detecta, se adopten y acepten las mismas medidas que los socialistas exigían cuando estaban en la oposición, en vez de crear verdadero malestar en la Guardia Civil, como es el caso, por el uso partidista que se hace del “caso cuarteles” para sepultar el escándalo del “Tito Berni”, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid ya que ambos asuntos presuntamente se relacionan y la realidad es que, mientras Marlaska responsabiliza al PP de paralizar el caso durante el Gobierno de Rajoy (un anónimo acusaba al Jefe de Ávila de quedarse dinero), él mismo como ministro desoyó tres intentos de la juez de investigar la corrupción en la Guardia Civil y desde enero de 2022 reclama a Interior un perito que no llega tal como el propio ministerio admite, cuando se conoce que el empresario de las obras a dedo en la Guardia Civil también está vinculado al “caso mediador”, ¡qué casualidad!, y cuando se sabe que la Oficina Antifraude de la UE investiga Fiiapp, la fundación pública de dicho caso dependiente de Calviño, al requisar papeles y correos “por graves irregularidades" dos meses antes de que saliera a la palestra el escándalo del Tito Berni. En fin, ¿ensoñaciones o realidades?….o demagógicas y cínicas cortinas de humo para desviar la atención, Júzguenlo ustedes.

            Y entretanto, como es que andamos entretenidos en otras cosas, seguramente pasa desapercibido por ejemplo que Educación cancela casi 25 millones de fondos europeos “por causas sobrevenidas” (buena explicación) a pesar de que 450 empresas y ONGs ya habían recibido la notificación de la concesión para cursos de formación, aunque, eso sí, en pleno...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

martes, 14 de marzo de 2023

PENSIONES COMO ARMA ELECTORAL

                         Hubo un tiempo, ya lejano, en que las pensiones se revalorizaban cada cuatro años, es decir, en año electoral, y servían (o pretendían servir) como arma electoral arrojadiza hasta que, con el tiempo, el sistema de pensiones en España se fue consolidando para convertirse en uno de los pilares fundamentales del modelo de protección y bienestar, lo que ya, prácticamente, nadie discute, y, por tanto, debiera estar al margen de la lucha electoral partidista por el bien de todos. Así se entendió cuando en 1995, en plena crisis económica se constituyó el Pacto de Toledo, una comisión parlamentaria para analizar el estado de las pensiones y proponer y adoptar medidas tendentes a mejorar el sistema y, sobre todo, a garantizar su sostenibilidad, hasta que, con la actual crisis, Pedro Sánchez, en octubre de 2022, sumándose una vez más a los planteamientos populistas de sus socios de Podemos, acusa a Feijóo y al PP (la derecha maldita para el populismo de la izquierda radical) de romper el pacto porque sostenían que los planteamientos del Ejecutivo “ponen en enorme riesgo” la sostenibilidad del sistema y, al efecto, instaban a Sánchez a hacer caso a las recomendaciones de la Comisión Europea y a “sentarse a hablar” para acometer las pertinentes reformas estructurales, cuando había que enfrentarse a un descomunal gasto por una subida del 8´5% de las pensiones debido al desbocado incremento del IPC, subida a la que obligaba la aplicación de la ley vigente aprobada en las Cortes y el cumplimiento del Pacto de Toledo, firmado también por el PP y actualizado en 2020, mientras Sánchez presumía y se arrogaba como iniciativa propia la medida. Con semejante estrategia y de cara al año electoral en el que estamos, el Pacto de Toledo, aletargado en los últimos años, se rompía casi definitivamente en medio de acusaciones y verdades a medias, mientras se aprobaba la obligada subida de las pensiones, con el voto del PP incluido como no podía ser de otra forma, aunque el tema de las pensiones volvía a convertirse lamentablemente, como antaño, en demagógica arma electoral arrojadiza con la resurrección de los viejos mantras de que las pensiones, que son y deben seguir siendo un asunto de Estado, dependen de los partidos que gobiernen cuando el problema real es si, con unos u otros partidos gobernando, las pensiones llegan a ser viables y sostenibles en el futuro con el actual sistema vigente, que es lo que han de buscar entre todos mediante las pertinentes reformas estructurales que la propia UE exige para garantizar su viabilidad. Sin embargo, ni sentarse a negociar, ni nada de nada, sencillamente Escrivá, acuciado por la exigencia de la UE de reformar las pensiones para poder seguir recibiendo fondos europeos, presenta “in extremis” por su cuenta y riesgo a última hora (tiempo había habido para haber reunido el Pacto de Toledo) una reforma pactada por fin con sus socios podemitas (hay que cicatrizar las heridas de la crisis interna del Gobierno ante las elecciones y esto viene como anillo al dedo), consiguiendo el visto bueno de la UE (necesitada de un documento reformista) y de CCOO y UGT, pero no el de otros partidos políticos ni el de los empresarios, quienes ven en la propuesta una cesión a Podemos y un nuevo afán recaudatorio. Mal asunto cuando el lugar natural de la necesaria reforma estructural, que no coyuntural, debiera situarse en el Pacto de Toledo y buscar allí un amplio consenso como asunto de Estado que es. En definitiva, en la iniciativa de Escrivá, en vez de una propuesta de reforma estructural del sistema de pensiones, se hacen meros retoques sobre el cálculo de la prestación (se podrá elegir entre 25 o 29 años cotizados), pero se sigue cargando sobre el empleo la reforma (elevando las cotizaciones sobre empresarios y trabajadores, especialmente sobre los más altos, para esquivar ajustes y contener a Podemos) y, en definitiva, la gran novedad es la promesa a la UE (para conseguir su visto bueno) de que los sucesores gobiernos de España, éste no, estarán obligados a hacer un ajuste automático si se desviara el gasto, ya que cada tres años el Ejecutivo de turno habrá de hacer una evaluación sobre subir cotizaciones o hacer recortes si, como sucede ahora, no cuadran las cuentas. Ya ven, el objetivo es compensar el aumento del gasto en el futuro sin abrocharse el cinturón y, mientras tanto, conseguir una tregua con sus socios gubernamentales…..algo así como que el que venga detrás que arreé, pero yo no. Mal asunto que el gobierno se refugie en las pensiones y en las ayudas para sortear su crisis, en vez de propiciar la reforma de envergadura que el vulnerable sistema de pensiones necesita.

            Entretanto, los expertos sostienen que “no es muy  progresista proteger a los mayores añadiendo cargas a otras generaciones”, cuando incluso sigue el problema de la sostenibilidad del actual sistema de pensiones y su viabilidad financiera futura; peor aun cuando el golpe de Escrivá a los sueldos ni siquiera cubre ahora la mitad de la obligada subida de las pensiones, pues la reforma presentada a Bruselas (para algunos, un parche para salir del paso) elevará tres puntos el gasto en jubilaciones (sin contar ya con las crecientes protestas para que las mínimas sean de 1.080 euros) mientras los..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

viernes, 10 de marzo de 2023

INSÓLITO DESGOBIERNO

                         Es difícil encontrar ejemplos (y menos aún en los países desarrollados democráticos) de lo que está sucediendo en España con este insólito desgobierno que los españoles estamos padeciendo, tal como se ha puesto en evidencia con el pleno del Congreso de los Diputados en la víspera de la celebración del Día Internacional de la Mujer para reformar la controvertida ley del “sólo sí es sí”, cuya aplicación está causando estragos y estupor por las incomprensibles rebajas de condenas a violadores y maltratadores sexuales, cuando la propia ley, según el Gobierno, tiene como objetivo, precisamente, proteger a las mujeres de semejantes monstruos sexuales, lo que demuestra que algo se ha hecho mal en la elaboración de dicha ley y que, por tanto, se ha de reformar sí o sí, lo que, por fin (más vale tarde que nunca), ha llegado a entender el sector mayoritario socialista del gobierno (o desgobierno) pero no el sector radical morado del mismo y sus aliados de investidura quienes, autoproclamándose infalibles, prefieren “sostenella y no enmendalla”, lo que explica, una vez más, que cuando los radicalismos fanáticos (sean de izquierdas, de derechas o mediopensionistas) alcanzan el poder sólo traen ruina, frustración y desgobierno, viéndose obligados finalmente para seguir gobernando a recurrir al totalitarismo para imponer como sea a la sociedad, compleja y variable, su peculiar minoritaria forma de ver la vida, es decir, su verdad absoluta. En efecto, la toma en consideración de la reforma de la controvertida ley a instancias de una proposición de ley del grupo socialista ha salido adelante en la Cámara Baja por 231 votos a favor (del PSOE, PP, Ciudadanos y algunos aliados minoritarios de la investidura), 56 en contra (de UPodemos, socios del Gobierno, y de ERC y Bildu, esenciales sostenedores del Ejecutivo de coalición) y 58 abstenciones (entre ellas la de Vox) tras un bronco e insólito debate entre la parte socialista del Ejecutivo y la parte populista del mismo, con la bancada azul del Congreso sin ningún ministro socialista, ni el Presidente del Gobierno, y sólo con las ministras radicales Irene Montero e Ione Belarra haciendo acto de presencia, lo que demuestra una doble división irreconciliable en el Ejecutivo: la del sector socialista con el sector podemita y, dentro de éste, la del sector populista de Belarra con el sector comunista de Yolanda Díaz. Ya ven, un insólito desgobierno que en cualquier otro país democrático se resuelve con ceses inmediatos de los ministros díscolos o con voluntarias dimisiones de los mismos, pero que aquí, en España, para mayor bochorno y rabia de los ciudadanos, en vez de resolverse se eterniza porque resolverlo supone romper la coalición y, obviamente, renunciar al chollo de seguir en el poder. Así las cosas, el PSOE se harta de la “impresentable” Irene Montero pero Sánchez no la cesa (ni ella dimite al quedar desautorizada), entre otras cosas no la cesa porque carece de autoridad para ello, pues cuando firmó la coalición con Pablo Iglesias no se especificó que, una vez presidente, es él el responsable de nombrar y cesar ministros (todos los ministros y no sólo los socialistas), ni se elaboró un programa de gobierno común para garantizar la gobernabilidad, ya que simplemente se hizo el cálculo matemático para obtener una pírrica y variopinta mayoría de investidura, sostenida a lo largo de la Legislatura a base de cesiones a los grupos más minoritarios e intransigentes que han hecho valer sus minoritarias propuestas a base de chantajes y amenazas de romper la baraja….. Y de aquellos polvos, estos lodos. Lo insólito en Europa no es un gobierno de coalición, sino todo lo contrario, lo insólito es este gobierno “Frankestein”, que dijera el socialista Rubalcaba, y con el que, según Sánchez, “no dormiría tranquilo”; acertó a medias el hoy Presidente, pues la realidad es que con semejante insólito desgobierno quienes no pueden dormir tranquilos son la mayoría de los españoles.

            Y tras este espectáculo bochornoso e insólito en el Congreso de los Diputados, con acusaciones y descalificaciones mutuas entre miembros del mismo gobierno, se celebra el 8M con Podemos acusando al PSOE, su socio gubernamental, de “traicionar a las mujeres” por reformar la ley del “sí es sí” con la derecha, mientras Ferraz considera que “se han roto todos los puentes” entre los socios gubernamentales y el PP carga contra Moncloa por no cesar a la ministra Montero. Un feminismo roto y dividido que..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

martes, 7 de marzo de 2023

LA RISTRA DEL VÉRTIGO

                         Finiquitada la Legislatura prácticamente le toca al Gobierno afrontar el cúmulo de despropósitos que ha venido acumulando a lo largo de la misma y que, para muchos, según los sondeos, nublan los aciertos que, obviamente, también ha habido, como es lógico. En efecto, las reformas inexplicables del Código Penal (eliminación de la sedición, rebaja de penas por malversación….) y los indultos a los secesionistas condenados, con el único objetivo de Sánchez de satisfacer las exigencias de sus voraces socios independentistas para que sigan apuntalando su Gobierno minoritario de coalición, se suman a una ristra de asuntos que provocan ahora un verdadero vértigo en el Ejecutivo en pleno periodo preelectoral mientras Sánchez toca suelo en sus propios sondeos y, de alguna forma, como sucediera en la última legislatura de Felipe González, hace que ya suene en el PSOE un “sálvese quien pueda” en medio de una crisis política, social y económica descomunal sin visos de solución. Una ristra de asuntos como, entre otros, el giro copernicano de Sánchez en el asunto del Sahara, las discrepancias internas con su socio Podemos en asuntos esenciales (gasto en defensa, ley de vivienda, topes a los precios y alquileres, respuesta a la okupación, desencuentro con los empresarios….), la polémica Ley Trans o el fiasco de la aplicación del “sólo sí es sí”…..a la que, para colmo, se añade ahora el “caso Mediador o caso Berni” mientras se desconoce el coste electoral que pueda llegar a tener. En definitiva, nubarrones que empañan aciertos como la subida del SMI, la vinculación de las pensiones al IPC, los cheques y ayudas a jóvenes…..aunque muchos de estos aciertos, dada la situación de grave crisis que estamos viviendo, suenen más bien a intereses electoralistas y generen dudas acerca de su viabilidad real en el futuro con la deuda de España disparada alcanzando límites insospechados, que antes o después los españoles habremos de pagar. Y en medio de este ambiente de incertidumbre Sánchez busca a toda costa desviar la atención en vísperas del 8-M anunciando por sorpresa que impondrá por ley la paridad de género en empresas y gobiernos (las famosas listas cremallera) para tapar el fiasco de la ley del “sí es sí” y afrontar la celebración del día de la mujer con un movimiento feminista dividido y cada vez peor avenido…..y vende dicha paridad como algo propio cuando simplemente se trata de la aplicación obligatoria de una directiva europea que incluso fue apoyada por el partido popular, con lo que habrá que estar atentos en los términos de esa ley no vaya a ser que, como en el “sólo sí es sí”, se dé la paradoja de que al aplicar la paridad Sánchez tenga que reducir en su propio Gobierno el cupo de mujeres en los ministerios, que, actualmente no es paritaria con los hombres en clara minoría. Y todo esto mientras Moncloa negocia “in extremis” con Irene Montero para evitar el cisma sobre la reforma del “sólo sí es sí” y que no salga con la oposición de sus socios, dado que el PP ya ha anunciado que en principio la apoyará, y en pleno clamor contra la reforma de la llamada “ley mordaza” por parte de la policía y guardia civil que advierten a Sánchez de que es “una irresponsabilidad” pues parece más bien que legisla para los violentos al hacer más difícil, casi imposible, el trabajo de las fuerzas de Seguridad del Estado.

            Entretanto Fiscalía recurre cientos de rebajas de penas por el “sí es sí”, que siguen en aumento, mientras PSOE y Podemos pugnan por capitalizar el 8-M con actos paralelos, con los morados jactándose de “avances feministas”, y mientras se dan los primeros cambios administrativos de sexo que satisface a quienes pueden cambiarlo en la documentación oficial sólo con su “declaración expresa” y sin necesidad de informes médicos que acrediten disforia de género ni obligatoriedad de dos años de hormonación como establecía la ley anterior; ya ven, más fácil, imposible, quien no se cambia de género es porque no quiere. En definitiva, la izquierda llega rota al 8-M, entre otras muchas cosas por la reforma del “sí es sí” si es que nadie lo remedia en estas últimas horas pues el Congreso vota hoy mismo la iniciativa socialista con la oposición de Podemos y los socios de investidura del Ejecutivo, que, dividido, está dispuesto a..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

sábado, 4 de marzo de 2023

LA PUNTA DEL ICEBERG

                         Cómo si no tuviéramos suficiente con todo lo que está cayendo salta a la palestra un presunto turbio caso de corrupción, otro más, conocido como “caso Mediador” que afecta directamente al PSOE de Canarias y al Grupo Parlamentario Socialista del Congreso de Diputados, dado que su presunto cabecilla es el diputado socialista Juan Bernardo Fuentes Curbelo, más conocido como “Tito Berni”, quien, nada más publicarse el oscuro caso ha dejado su acta de diputado y, al parecer, ha sido suspendido de militancia en el PSOE, cuando no pocos se preguntan si estamos ante la “punta del iceberg” de un despreciable e intolerable macrocaso de corrupción, como ya sucediera con el “caso de los ERE” u otros tantos casos conocidos, pues, la realidad es que el “caso Mediador” tiene toda la pinta de ello, justo cuando los retoques del Gobierno en el Código Penal facilitan en cierta forma las conductas delictivas con la supresión o suavización de penas por determinados delitos que todos tenemos in mente. Punta del iceberg o no, el caso es que este feo asunto tiene todos los ingredientes para provocar una conmoción en el Grupo Socialista del Congreso en pleno año electoral, mientras cargos del PSOE piden que “deben dar un paso al frente” para evitar esta nueva mancha colectiva cuando precisamente Sánchez, que es quien tiene que darlo, accedió al poder por primera vez gracias a una moción de censura interpuesta contra el anterior Gobierno de Rajoy basándose en la presunta corrupción del PP y exigiendo, con toda la razón, que, al margen de lo que decidiera y demostrara la Justicia, habría que dilucidar responsabilidades políticas mediante una Comisión de Investigación en el Congreso, que, justo ahora, cuando el PP la solicita, el PSOE de Sánchez se niega a apoyar, tal como en su día hacía el PP, prefiriendo esconderse bajo el patético y manido discurso del “y tú más” que cada vez hastía más a los ciudadanos. Asistimos pues al demagógico debate público sobre “tu corrupción o la mía” pero con los papeles cambiados, si el PSOE era antes el acusador es ahora el acusado y viceversa, mientras Podemos, socio del Gobierno, que decía venir a eliminar la corrupción en España, manifiesta que sólo apoyará la creación de la Comisión de investigación parlamentaria si la solicita el propio PSOE y no el PP…..¡bonita forma de luchar contra las prácticas corruptas en nuestro país y esclarecerlas! Ahora, cínicamente, quienes pedían desde la oposición que, al margen de la Justicia, era necesario investigar sobre las responsabilidades políticas creado una Comisión de Investigación Parlamentaria, gritan a los cuatro vientos que sólo sea la Justicia la que averigüe lo sucedido, aunque Sánchez sí ordena investigar a nivel interno que se averigüe, como parece, si hubo más diputados en las fiestas que Tito Berni organizaba con empresarios y con el mediador del asunto, un tal Navarro Tacoronte, que ahora se dedica a tirar públicamente de la manta, mientras, de momento el único en prisión preventiva por tan feo asunto es nada menos que el general de la Guaria Civil Francisco Javier Espinosa, quien en su casa de Madrid escondía más de 60.000 euros en una caja de zapatos y entre la ropa, en tanto que la propia jueza, que lleva el caso, no se explica cómo Fiscalía no ha pedido prisión preventiva para Tito Berni teniendo por ello que dejarlo de momento en libertad. Ya ven, en este caso de corrupción no falta de nada.

            Y mientras los barones piden la lista de los diputados amigos de Berni, el Partido se pregunta estupefacto si hay cargos del Gobierno que fueron “facilitadores” de las mordidas, temiendo...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

miércoles, 1 de marzo de 2023

PATÉTICA Y ESPERPÉNTICA MOCION DE CENSURA

                         Sus señorías, nuestros diputados, como si no tuvieran otra cosa mejor que hacer, se enzarzan en una absurda polémica sobre apoyar o no la patética y esperpéntica moción de censura presentada por Vox contra el Gobierno de Sánchez cuando, en realidad, Abascal y los suyos la presentan contra Feijóo y para tener cierta notoriedad y protagonismo electoral dentro del marco político del centro-derecha. Es patética en su acepción de “despreciable por sus cualidades negativas” y esperpéntica en su acepción de “grotesca, absurda y alejada de lo convencional, el orden o la realidad”, por más que los grupos parlamentarios, aprovechando que el Pisuerga pasa por Valladolid, busquen obtener supuestos beneficios electorales de tan innecesaria moción a cuatro días de las obligadas elecciones. En efecto, la moción de censura, que en España tiene un carácter constructivo y, por tanto, requiere presentar una alternativa que, en caso de triunfar, sustituya al Gobierno censurado en vez de la disolución de las Cortes y la pertinente convocatoria de elecciones generales, carece de sentido práctico si, como es el caso, se presenta en solitario por un grupo parlamentario minoritario, como es Vox, y en pleno año electoral que casi hace inviable, en el improbable caso de que triunfara, la conformación de un nuevo Gobierno cuando prácticamente tocan ya elecciones locales, autonómicas y generales de inmediato. Pero todavía es más patética y esperpéntica la moción de censura si, como es el caso, la presenta el grupo parlamentario de extrema derecha pero, para más recochineo, proponiendo como candidato alternativo al Gobierno no a su jefe de filas, Abascal, que sí lo fue en su anterior fracasada moción de 2020, sino a Ramón Tamames, prestigioso economista enmarcado ideológicamente en las filas del Partido Comunista del que fuera cargo destacado en su día, y que, ahora, a sus 89 años de edad, se presta a protagonizar semejante mascarada, cuando incluso hace bien poco, el 3-10-17 tras el ilegal referéndum del 1-O, propuso por carta al expresident catalán Artur Mas que aprovechara “la gran ocasión” para conseguir un “nuevo estatus” de Cataluña respecto a España bajo el nombre de “Nación Catalana” mientras el Rey, nuestro Jefe de Estado, hacía su discurso en defensa del orden constitucional y del Estado de Derecho atacado por el secesionismo. Ya ven, ni pies ni cabeza; una absurda moción que Abascal se encargará de defender ante el Pleno del Congreso sin tiempo límite antes de dar paso a Tamames, el pintoresco candidato alternativo a la Presidencia, quien, al parecer, centrará su intervención en exponer las razones que, a su juicio, evidencian la necesidad de un relevo en el Palacio de la Moncloa. Un Tamames comunista y, por tanto, en las antípodas ideológicas de Vox, que dice ahora que “Abascal me da libertad absoluta en el discurso” y añade que “Vox no es un partido de ultraderecha; de fachas, nada, de racistas, menos; si acaso podrían decirles nacionalistas españoles”. Sin comentarios, pues, ya ven, la charlotada cómica parlamentaria está servida y podría incluso servirnos de divertimento si no fuera por el caos político, social, económico, institucional y territorial que estamos viviendo.

            Pues bien, así las cosas, mientras los expertos creen que una moción “inútil” como ésta dará “oxígeno al Gobierno” (y Sánchez así lo piensa también), Vox hace claramente un “uso partidista” para conseguir “visibilidad” a pesar de que no tuviera recorrido en 2020 y de que ahora se plantea desde el primer momento como una vía muerta o una estrategia para sacarle rentabilidad, cuando el verdadero problema es que la moción de censura, siendo una herramienta constitucional, se use para fines partidistas y que, por intereses de unos u otros, le den apariencia de seriedad a...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).