domingo, 28 de abril de 2024

CATARSIS SOCIALISTA

 

                        La inédita carta de Pedro Sánchez, impensable en cualquier otro Estado democrático, da paso a una catarsis socialista suscitando todo tipo de emociones sobre el líder, mientras los ciudadanos andamos a la espera de conocer el resultado de sus íntimas reflexiones que nos ha prometido desvelar mañana lunes y, entretanto, obviamente, suceden todo tipo de especulaciones sobre las razones verdaderas de tan insólito proceder de nuestro Presidente de Gobierno, pues no se entiende su insólita reacción a la denuncia interpuesta por Manos Limpias contra su esposa, reacción impropia de cualquier dirigente político y más aún si se trata de un dirigente político acostumbrado a moverse en el fango del que habla con rotunda agilidad, por más que en el plano personal todos podamos entender sus sentimientos, como nos sucede o debiera sucedernos con otros u otras dirigentes (o “dirigentes”) que, por supuesto, no reaccionan así ante los presuntos acosos que reciben incluso de parte del propio Sánchez y su partido. Sánchez es libre y tiene todo el derecho a dimitir o quedarse, pero es discutible que tenga derecho a someter a los españoles a esta incertidumbre, que no pocos consideran se debe a una estrategia para ocultar algo y desviar la atención sobre el berenjenal en que él solito se ha metido, apoyado por su guardia pretoriana, con sus insólitos “cambios de opinión” sobre asuntos de gran importancia, obligado por sus impresentables socios de gobierno o sostenedores del mismo por meros intereses personales, aunque ahora se unan a esa catarsis cerrando filas con él para, acto seguido, seguir estrujándole, como acaba de hacer Puigdemont, quien, conseguida su auto-amnistía impresentable, ya le exige el traspaso de los impuestos a cambio de apoyar los Presupuestos Generales del Estado. Así las cosas, el catártico PSOE de Sánchez llama a la movilización general para que su líder no dimita y salve a los españoles y, al efecto, organiza una concentración en Ferraz fletando autobuses para apoyar a su pintoresco Secretario General, en tanto que su núcleo más duro tiene claro que la respuesta del líder mañana será que “se queda”, mientras una segunda denuncia contra Begoña Gómez envía un informe más completo al juez y mientras el fiscal pide el archivo del caso. Un PSOE desesperado que se cita para aclamar a su Jefe mientras los jefes territoriales y las bases se movilizan para acudir en masa a Ferraz y ver en directo el Comité Federal (órgano máximo del partido entre congresos que en su día Sánchez despreció), mientras Sánchez, aparcando su agenda en plena campaña electoral en Cataluña, reflexiona y nos dice por carta a los ciudadanos “me urge responder a la pregunta de si merece la pena, si debo continuar” como Presidente del Gobierno, amagando con dimitir y con ello sumiendo a la ciudadanía en la incertidumbre, pues el problema no es si al presidente le merece la pena dimitir o no (si quiere dimitir que dimita, y punto), sino que deje bien claro si este patético gobierno, secuestrado por las minorías secesionista de izquierdas y derechas, puede seguir gobernando España o desgobernándola por más tiempo, que es lo que Sánchez debe preguntarse en serio, en vez de buscar una serie de adhesiones a la desesperada y declararse “víctima de la coalición derechista y ultraderechista” (siempre el mismo mantra) que “no tolera la realidad de España”, cuando en realidad es víctima de sus propios socios de investidura, que son quienes no toleran esa realidad de España de la que habla Sánchez, es decir, de la España diseñada por amplísimo consenso de los españoles en la vigente Constitución Española.

            En definitiva, Sánchez pone a España en interinidad para victimizarse públicamente desencadenando una crisis política insólita al someter a la Presidencia del Gobierno a una reflexión y atribuye la investigación a su mujer a una “estrategia de acoso ultraderechista” y acusa a Feijóo de ser “partícipe”, mientras el PP da pasos para convocarle en el Senado si no renuncia. Y habla de estrategias olvidando la similitud con otras que especialmente sufren otros gobernantes, como Díaz Ayuso y sus familiares en Madrid, acusados de todo tipo de maldades, o como el propio Feijóo, ridiculizado a carcajadas por Sánchez en el debate de investidura (insólito en democracia), cuya mujer, al igual que la de Sánchez, fue acusada en el Congreso por la propia ministra Montero de presuntos delitos aparecidos en medios de comunicación, que desmintieron lo publicado por ser falso, mientras Sánchez aplaudía a su ministra, quien, ante la respuesta del líder del PP gritaba amenazante y casi histérica “¡y ahí mucho más!”, cuando no había absolutamente nada. La diferencia es que los contrincantes de Sánchez no dimiten ante esa supuesta estrategia de acoso de la que habla el Presidente, que, en este caso, desde luego no sería de parte de la “ultraderecha”, por lo que, al menos cabe preguntarse que si no es de la ultraderecha, ¿de qué “ultra” estaremos hablando? Ante todo esto el PP pide a Sánchez que dé una explicación sobre los escándalos que rodean al PSOE, a su Gobierno y a su pareja (caso Koldo, caso Delcy, caso Begoña Gómez, caso Pegassus….) pues considera que su problema no es sólo político sino sobre todo judicial, y que la anunciada “rueda de prensa del lunes no es más que un acto de campaña electoral” y denuncia “que opte por la victimización y no por rendir cuentas”, mientras, curiosamente, Puigdemont le insta a que se someta a una cuestión de confianza para “despejar dudas”.

            Lo que es meridianamente claro es que con su insólita decisión Sánchez ha eclipsado a Puigdemont en el inicio de campaña electoral catalana, a la que, estando ausente el Presidente, envía como sustituto a Zapatero (otro que tal baila), con lo que queda marcada por la política nacional, mientras la maniobra de Sánchez descoloca a las instituciones europeas, cuando su imagen ya se había visto deteriorada en Bruselas por su brusca gestión del reconocimiento de Palestina. Y mientras el PSOE agita el miedo a una dimisión y su bloque se agrieta al respeto, aunque intenta movilizarse para que Sánchez siga (asunto que muchos dan por hecho), Feijóo, por si acaso, prepara al PP para cualquier escenario y dice “estamos listos”, le reprocha que “no puede gobernar por adhesión y pretende hacerlo por compasión” y le acusa de “bochorno internacional” para España y de “secuestrar” el país como “estrategia electoral” ante las catalanas. Por su parte los socios de Sánchez reivindican la vigencia de la coalición gubernamental aunque consideran que “todo está abierto…pero el Gobierno tiene mucho que hacer”, difieren sobre una moción de confianza y critican el “tactismo” alertando del “daño al sistema político”, en tanto que el equipo de Sánchez agita por SMS la movilización “frente al odio” y la “jauría extremista” (bonita forma de alentar la moderación). Entretanto TVE permite a una activista pedir a Sánchez la “intervención” de medios de comunicación, pues la presentadora Silvia Intxaurrondo afirma que hay webs que “publican trolas del tamaño de una catedral” sobre Begoña Gómez (no sobre otras personas, por lo visto), y asociaciones de jueces denuncian que se insinúe que “no pueden investigar a determinadas personas” y dicen a Sánchez y su mujer que “no están al margen de la ley”, mientras Podemos y Sumar instan a tomar el CGPJ y mientras periodistas afines al PSOE sanchista acusan de golpistas a magistrado y medios. A todo este embrollo político se une la presidenta extremeña, María Guardiola, quien entiende “que el Presidente ponga en duda el sistema judicial es el  principio del fin de la democracia” y le pide “que dimita si quiere, pero que no haga un serial”, lamentando que la legislatura “avance a oscuras por los caminos de la insolidaridad y el secesionismo”…..mientras Illa, en plena catarsis por Sánchez, dice en el mitin de inicio de campaña, que “hasta la muerte con él” y llega a llamar a la “resistencia”. Es la patética realidad española, en la que, según NCReport, el 59´5% de españoles considera que Sánchez debería dimitir, el 62´4% defiende nuevas elecciones y el 55´6% de votantes socialistas cree que el amago de cese lastra la imagen de España.

            El broche final de esta catarsis colectiva socialista lo pone el Comité Federal del PSOE (que ahora sí le vale a Sánchez y no cuando se lo pasó por el arco del triunfo para imponer el modelo sanchista)  trasmitido en directo ante varios miles de personas en la calle Ferraz (debidamente trasladados en autobuses como en los mejores tiempos del franquismo) suplicándole a un ausente Sánchez “¡quédate, que merece la pena!” y desencadenando una especie de éxtasis colectivo de idolatría ciega al Jefe, más típico de Corea del Norte o de Venezuela que de la España democrática, con la ministra Montero, casi en trance, como protagonista saludando a las masas acompañada de la cúpula dirigente del partido, menos del amado Jefe que reflexionaba sobre su futuro inmediato (y por tanto el de España) a la espera de conocer su casi divina decisión con la que obsequiará a los pobres mortales dentro de unas horas. Una catarsis impropia de regímenes democráticos desarrollados para idolatrar al líder, dejar claro quiénes son los buenos y los malos, y atacar al principal partido de la oposición, que curiosamente fue el más votado en las elecciones. Ante semejante espectáculo, Feijóo dice que “estamos ante un tic autoritario que no veíamos desde Franco”, acusa a Sánchez de “dimitir de la democracia” y pide a los ciudadanos “que no se dejen engañar”, mientras Cuca Gamarra añade que “Sánchez se victimiza y  no responde a la corrupción”, que los socialistas “no pueden convertir un problema personal de Sánchez en un problema de los españoles” y vaticina que “Illa cederá la Generalitat a los independentistas para que Sánchez siga en el poder”. Y entretanto, un Gobierno, secuestrado por las minorías secesionistas, y paralizado que no ha podido aprobar una ley en más de un año.

            Entretanto la filtración de datos sobre el novio de Ayuso parte en dos la cúpula fiscal, ya que 15 miembros de la Junta de Fiscales respaldan investigarlo frente a la “número dos” del Fiscal General, y otros 16 fiscales, la mayoría designados por Ortiz y Delgado, apoyan rechazar la querella de Alberto González, mientras un  juez dice en un auto que la Fiscalía difundió datos reservados y perjudicó al novio de Ayuso pues “es evidente que ahora se enfrenta en peores condiciones a un proceso judicial”.

            Por lo que respecta a otros asuntos cabe citar que Teresa Ribera será candidata del PSOE en las elecciones europeas; que son procesados cuatro exjefes de ETA por el asesinato de Miguel Ángel Blanco; que la AIReF constata que sólo el 24% de los fondos UE ha impactado en el PIB; que los españoles pagaron 271.935 millones a Hacienda en 2023, un 6´4% y 16-500 millones más, con lo que el Estado se lleva el 40´2% del sueldo, más que Noruega, Dinamarca o Países Bajos; que España enviará una partida de misiles Patriot a Ucrania; que la segunda convocatoria de los MIR de Familia vuelve a pinchar con 246 vacantes, mientras el uso de la sanidad privada se dispara un 14% en un año por la crisis de la sanidad pública; que el Gobierno improvisa una “comisión de supervisión” y mantiene a Rocha en la RFEF proclamándole como presidente pese a estar imputado; y que el mercado laboral sufre un deterioro en el primer trimestre del año y la EPA revela un incremento del paro superior al habitual, pues el mercado laboral destruye tres contratos a tiempo completo por cada alta de empleo parcial…en definitiva, según la EPA, España pierde 140.000 ocupados en dicho trimestre, la peor cifra desde 2014 salvo el año de la pandemia.

Fdo. Jorge Cremades Sena

viernes, 26 de abril de 2024

RESPUESTA A LA CARTA DE SÁNCHEZ

                         Presidente, como ciudadano, demócrata y socialista democrático o socialdemócrata (llámalo como prefieras), me veo en la obligación de contestar a la carta que como ciudadano me has remitido públicamente (permíteme que nos tuteemos) pues entiendo que no hacerlo sería una descortesía por mi parte.

Quiero comenzar diciéndote que, desde el punto de vista humano, entiendo tu reacción y me solidarizo contigo, pero, dicho esto, no puedo entender, desde el punto de vista político, tu insólita decisión de tomarte unos días para reflexionar sobre si merece la pena o no seguir siendo Presidente del Gobierno, ante lo que llamas “campaña de acoso y derribo” orquestada por la “derecha y la ultraderecha”, que identificas como iguales, por el mero hecho de que una organización “ultraderechista”, Manos Limpias, haya puesto una denuncia contra tu esposa, que no una querella, y el juez haya decidido abrir diligencias al respecto, cuando la fiscalía ya se ha apresurado a pedir que se archive el asunto y cuando tú mismo dices que se trata de bulos y mentiras, con lo que, de ser así, más pronto que tarde, todo se esclarecerá y ella saldrá indemne de semejante trance y tú más reforzado. Y no puedo entender el énfasis que haces recalcando que Manos Limpias es una organización de extrema derecha como si ser de extrema derecha o extrema izquierda supusiera no tener derecho a denunciar ante los tribunales cualquier asunto que se presuma delictivo; y menos aún puedo entenderlo cuando en otras ocasiones no has criticado a Manos Limpias por poner denuncias y querellas contra otros personajes, bien de la Familia Real o del Partido Popular o de quien sea, sabiendo que, en todo caso, su razón de ser es denunciar sistemáticamente en los tribunales cualquier asunto sospechoso de delito con lo que, como es lógico, unas veces los tribunales le dan la razón y otras no, como a cualquier hijo de vecino. Asimismo me sorprende que anunciaras la decisión de cogerte esos días para reflexionar sobre tu posible dimisión (las dimisiones no se anuncian, se toman y punto) justo el día en que la prensa publicaba la citada apertura de diligencias sobre ese presunto delito “de tráfico de influencias y corrupción en los negocios” cometido presuntamente por tu mujer, Begoña Gómez, cuando curiosamente ese día en la sesión de control del Gobierno ni PP ni Vox sacaron a relucir el tema (sólo se refirió a él Rufián de ERC, tu socio) a pesar de que Feijóo y Abascal llevan meses solicitándote en vano que des explicaciones y salgas al paso de las noticias aparecidas al respecto en algunos medios, que calificas de “marcada orientación derechista y ultraderechista”, como si dichos medios, te guste o no te guste, no tuvieran derecho a publicar lo que consideren oportuno por el mero hecho de tener una u otra ideología política. Y sí estoy totalmente de acuerdo contigo en que Begoña, tu mujer, se disponga a defender su honorabilidad y a colaborar con la Justicia “para esclarecer unos hechos tan escandalosos en apariencia, como inexistentes”….pues es lo que en estos casos se ha de hacer y, si son, inexistentes como dices, nada hay que temer.

Dicho lo anterior, Presidente, me sorprende que me digas que todo obedece a una “estrategia de acoso y derribo” y que, por tanto, no te sorprende la “sobreactuación del señor Feijóo y el señor Abascal” porque ambos son “colaboradores necesarios” en “este atropello tan grave como burdo” y que fue Feijóo quien denunció el caso ante la Oficina de Conflicto de Intereses pidiendo tu inhabilitación, siendo la denuncia archivada por dicho organismo, y después instrumentalizó su “mayoría conservadora en el Senado” con una comisión parlamentaria para esclarecer los hechos….y que lo que faltaba ya era la judicialización del caso, que es “el paso que acaban de dar”. Y deduces que...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

miércoles, 24 de abril de 2024

¿HACIA DONDE VAMOS?

                         Los vascos han votado y, por supuesto, cabe felicitar a todos los que han conseguido incrementar su representación política y en especial a EHBildu, el triunfador de los mismos; pero, dicho esto, cabe también reflexionar sobre dónde nos conduce este resultado electoral y qué consecuencias tiene de cara al futuro. Los resultados han sido los siguientes: PNV el 35´2% de los votos y 27 escaños, los mismos que Bildu con el 32´5% de los votos, seguidos de PSE-PSOE con el 14´2% y 12 diputados, PP con el 9´2% y 7, Sumar con el 3´3% y 1, al igual que Vox con el 2% de votos. De entrada ya es preocupante que los partidos secesionistas (PNV y EHBildu) hayan obtenido el 72% de los escaños (nada menos que 54 de 75) mientras los constitucionalistas (PSOE, PP, Sumar y Vox) sólo hayan sumado 21, el 28% restante. Además, si comparamos los resultados con los de 2020, hay que tener en cuenta que el PNV con su pírrica victoria pierde cuatro escaños, EHBildu gana 6, el PSE-PSOE gana 2 y el PP 1, mientras Sumar consigue un escaño frente a los 6 que tenía Podemos (ahora, yendo cada uno por su lado, la izquierda española situada a la izquierda del PSOE y cogobernante en España con el PSOE, pierde 5 escaños) y Vox mantiene el que tenía. Incremento del nacional-secesionismo radical totalitario y descenso de las opciones constitucionalistas es la cruda realidad, sobre la que cabe preguntarse “¿hacia dónde vamos?” los españoles como Estado y ¿qué estamos haciendo tan mal para este rotundo triunfo del secesionismo en el País Vasco? Así las cosas, con este rotundo éxito de los abertzales (¡quién lo diría!) empatando con los nacionalistas de derechas, el PSOE y el PNV ya se disponen a reeditar su actual gobierno de coalición en Euskadi y, por ende, el apoyo del nacionalismo vasco de derechas al supuesto “progresismo” de izquierdas del gobierno sanchista minoritario de coalición con Sumar en Moncloa, lo que supone que peneuvistas y sanchistas han conseguido sus objetivos de que al menos las cosas queden como están tanto en Euskadi como en el resto de España, pues podría haber sido bastante peor si los abertzales hubiesen sorpassado a los peneuvistas o éstos no hubieran sumado mayoría con los socialistas. La cruda realidad, guste o no guste, es que, aunque algunos se conformen con sus particulares éxitos, el indiscutible gran triunfador de estos comicios ha sido EHBildu que ya es primera fuerza política en dos de cada tres municipios vascos al ganar en el 63% de las localidades con resultado abrumador en los pueblos, frente a un PNV que se salva “in extremis” y frente a un PSE-PSOE que ni siquiera es capaz de retener su feudo de Ermua donde asesinaron a Miguel Ángel Blanco, mientras los “abertzales” ganan en Álava y Guipúzcoa y se quedan a pocos votos de ganar los comicios y exigir la gobernabilidad de Euskadi. No en vano Bildu exhibe su éxito histórico y dice “tenemos que dar un salto en la soberanía”, es decir, en la soberanía que hace bien poco buscaba ETA mediante el tiro en la nuca, cuando, incluso ahora, Otxandiano, se niega a calificar a la banda como “terrorista” y, a pesar de todo, es el gran triunfador de los comicios vascos. Ya ven la poca memoria democrática que tenemos los españoles para algunos hechos históricos, algunos bien recientes, y la abundante que persiste y algunos exhiben para otros acontecimientos mucho más lejanos con el único objetivo de denigrar el pacto del pueblo español de 1978 y la consecuente convivencia democrática que desde entonces disfrutamos a pesar de que algunos hayan intentado e intentan volver a repetir los errores de antaño para volver a las dos Españas irreconciliables. ¿Hacia dónde vamos?...algo seguramente estamos haciendo fatal.

            Si de momento Sánchez ha logrado “evitar tensiones” con sus socios secesionistas de cualquier signo ideológico, la cruda realidad es que con su proceder pactista a base de claudicar a los chantajes del secesionismo, se ha llegado a este histórico éxito de los abertzales que se llevan la mejor tajada de una izquierda española tras la desaparición de Sumar-Podemos, pues la realidad es que Otegi da un salto de gigante a la sombra de Sánchez, sombra a su vez de aquel PSOE que pudo gobernar en el País Vasco poniendo la Constitución por bandera y, lamentablemente, del que hoy apenas queda nada. Y es que, como dice el actual senador socialista Lambán y anterior Presidente de Aragón, hoy “hay vergüenza en el PSOE a declararse español, te incluyen en la fachosfera”, cuando “el socialismo no vino a asociarse con el nacionalismo, sino a combatirlo” y añade que “aquello por lo que me afilié está a punto de irse por el desagüe”….es el sentimiento frustrado de muchos..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

domingo, 21 de abril de 2024

LA CABRA TIRA AL MONTE

                         Cuando todo vale y, como dicen los andaluces, “to er mundo e güeno” pasa lo que pasa pues, al final, la cabra siempre tira al monte como sucede finalmente con Bildu, blanqueado por Sánchez por meros intereses personales, cuyo candidato, Otxandiano, enseñó su patita totalitaria negándose a definir ETA como “banda terrorista” y, con ello, revolucionar una campaña electoral que hasta ese momento era bien tranquila y apuntaba incluso a una victoria de los abertzales. Así y todo se llega a los comicios vascos de hoy con la duda sobre el ganador, si Bildu o PNV, disputándose ambos la posibilidad de que los sanchistas les apoyen para gobernar Euskadi mientras ambos apoyan a Sánchez para que gobierne en España dado que al sanchismo le da igual que se trate de radicales de izquierdas con un evidente pasado terrorista o de derechas muy conservadora…. y ambas con el prioritario objetivo, como sucede en Cataluña, de independizarse de España, pues al Presidente, por lo visto, sólo le produce urticaria entenderse con la derecha española del PP, que se ha turnado con el PSOE tradicional en la gobernabilidad de España, o con la extrema derecha, representada por Vox, a quienes considera herederos del franquismo y, por tanto, totalitarios (los de Bildu, por lo visto, no lo son). Como ven, hay totalitarismos y radicalismos buenos y malos según convenga y a la carta, a los que, según interese, hay que poner cordones sanitarios o no, y aceptarlos o no como socios e interlocutores. Así las cosas, Bildu disputa hoy la victoria al PNV, que prevé repetir pacto con el PSE-PSOE, mientras Sánchez aprieta a los abertzales tras las posiciones de su candidato Otxandiano pero no cuestiona sus pactos con ellos en Madrid porque sabe que en ello le va mantenerse o no en Moncloa (como sucede en Cataluña con Junts y ERC). Por su parte, el candidato a lehendakari peneuvista, Pradales, manifiesta que “Sánchez tiene que cumplir: referéndum para un nuevo estatus de Euskadi” pues “queremos la misma bilateralidad que ya existe con el concierto económico” y puntualiza que “Bildu tiene un acuerdo con el PSOE no con el PNV” y “eso es lo que ha ayudado a su blanqueamiento”. Entretanto, las víctimas del terrorismo etarra llevan a Otegi ante el juez por el asesinato de Hergueta en 1980 que archivó la Fiscalía (Dignidad y Justicia se querella en la Audiencia por el papel desempeñado en dicho asesinato por el actual líder de Bildu) y Otxamendi, ante las críticas recibidas por sus palabras y el temor a perder votos, pide perdón a las víctimas sólo “si ha herido su sensibilidad” pero rechaza de nuevo llamar “terrorista” a ETA y con un abrazo en Vitoria con Otegi, ambos exhiben unidad, “frente a las maniobras y mentiras de la mayoría de medios, las élites económicas y los aparatos del Estado”. En definitiva, ETA marca el final de la campaña vasca y se publica que Otxamendi honró a una etarra porque “su lucha sigue viva” ya que hizo una “aurresku” (danza vasca solemne que se baila en público a modo de reverencia u homenaje) en 2015 en un acto por una miembro del “comando Donosti” muerta en un tiroteo con la Guardia Civil, homenaje que la Audiencia investigó y condenó a los cuatro organizadores por enaltecimiento del terrorismo.

            Y ante este giro inesperado de final de campaña propiciado por Otxamendi, lo cierto es que Sánchez seguirá con Bildu aunque “evidentemente” no rompa con ETA, pero reprueba las palabras del candidato abertzale, lo que no impide que le mantenga como socio porque “el Gobierno está en minoría” (ya ven, lo esencial es mantenerse en Moncloa a costa de lo que sea), en tanto que los socialistas vascos, aunque en sus estudios miden que la “injerencia” del Presidente les penaliza por Bildu y puede ser un lastre, acatan que Moncloa le haya impuesto como cartel electoral en el mitin final de campaña, mientas Feijóo le reta a aislar al partido de Otegi con un compromiso ante notario. No obstante el PP vasco en este final de campaña ha amortiguado los ataques a Bildu porque “da votos al PNV” y culpa al PSOE de haberles “engordado”. Por su parte el PNV...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

miércoles, 17 de abril de 2024

RECOGIENDO TEMPESTADES

                         Dice la sabiduría popular, la más sencilla y más sabia de todas las sabidurías, que “quien siembra vientos recoge tempestades” y, desgraciadamente, en España llevamos demasiado tiempo sembrando vientos, incluso huracanados, por lo que no extraña nada que al final nos dispongamos a recoger cosechas de tempestades muy preocupantes. A las que ya hemos recolectado cabe añadir las que están por caer; la primera de ellas este próximo domingo con las elecciones vascas mientras PNV y PSE-PSOE, valedores de un pacto para que el peneuvista Urkullu fuera el actual lehendakari y el socialista Sánchez fuera el Presidente del Gobierno español, intentan a la desesperada frenar a Bildu, socio de Sánchez en Madrid, apelando al voto del miedo y alertan de que los “abertzales” intervendrán la economía y de que “se meterá la mano al bolsillo de los trabajadores” pero con el temor añadido por parte del candidato socialista, Eneko Andueza, de que “Bildu y PNV van a confluir en lo que los une: la independencia”, mientras el PP no descarta dar sus votos al PNV si llegara a sumar mayoría con los peneuvistas, por lo que busca “acumular” todos el voto de Vox para sacar al PSE-PSOE del gobierno vasco con apoyo gratis al peneuvista Imanol Pradales (Urkullu ya ha sido relegado) si fuera necesario con el objetivo de descomponer el variopinto bloque de alianzas de Sánchez, que es lo que realmente motiva la estrategia de Génova, un bloque de intereses, al que llaman “progresista” aunque dependa de los secesionistas y nacionalistas de derechas (PNV y Junts) y de izquierdas (Bildu y ERC) así como del variopinto mundo político representado por Sumar, Podemos, Más Madrid…..y todo el que esté dispuesto a arrimar el hombro para que un acomodaticio Sánchez siga en La Moncloa aunque sea a trancas y barrancas. Un bloque que, en el País Vasco tiene como principales damnificados a PSOE y PNV que, según Feijóo, están en plena “decadencia” ganada a pulso por los vaivenes peneuvistas y sus traiciones al PP de Rajoy para que prosperara la moción de censura sanchista a cambio de lo que fuera, aupando a Sánchez al poder inesperadamente, y gracias también al mercantilismo de compra de votos de los sanchistas a cambio de lo que sea. Es la cruda realidad a la que ahora, en plena campaña electoral, se añade la resistencia de Bildu a censurar a ETA, negándose su candidato abertzale, Pello Otxandiano, a calificarla como “banda terrorista”, denominándola como “grupo armado” sobre el que se puede tener “diversas consideraciones”, lo que ha causado que Sánchez se escandalice ahora con los abertzales y que Moncloa deplore el pasado etarra de Bildu, tras cinco años de blanqueo permanente por intereses personales y que el Gobierno tache a Otxandiano de “cobarde” por negar el terrorismo etarra, y afirme que su actitud ante ETA es “incompatible con la democracia”, pero, ¡eso sí!, sin que ello suponga dejar de mantener a Bildu como socio en Madrid tras premiarle en Pamplona. Por su parte, las víctimas de ETA dicen sobre Bildu que tiene “el mismo discurso pero sin pasamontañas” mientras que “un PNV travestido ha votado todas las barbaridades ultras de izquierdas” especula con un pacto entre PSE y Bildu con un “hay que esperar a Sánchez” a quien en su día aupó al poder con la moción de censura a Rajoy con quien ya tenía un pacto de apoyo a los Presupuestos. Son las lamentables consecuencias de esta especie de relativismo político mercantilista que avala, según conviene, cualquier chalaneo de votos o cualquier pacto contra natura, perpetrado en los despachos y contrario al sentir mayoritario de los ciudadanos en las urnas, pues, por ejemplo, no se puede entender exigir un cinturón sanitario a Vox y a sus alianzas con el PP, mientras a su vez se avalan los pactos con Bildu o con Junts, dando lugar a estas tempestades que finalmente acaban en chaparrones inaceptables como el ataque con un spray al candidato peneuvista Pradales al salir de un mitin, que todos los demócratas debemos condenar enérgicamente por unanimidad, pues no cabe justificarlo ni como una consecuencia más de aquellos vientos que se han sembrado y que de forma urgente hay que dejar de sembrar de una vez por todas en España.

            Así las cosas, los últimos sondeos demoscópicos, que se pueden publicar antes de los comicios, dicen lo siguiente. Según 40dB, Bildu ganará las elecciones vascas aunque el PNV podría gobernar con el apoyo socialista, pues los resultados serían: Bildu 30 escaños, gana nueve; PNV 28, pierde tres; PSE 10, se queda igual; PP 6, se queda igual; Vox 1, se queda igual; y Podemos 0, pierde los 6 que tenía. Según GAD3, Bildu adelanta al PNV por la mínima y el PSE-PSOE decidirá quién es el lehendakari, pues lo resultados serían: Bildu el 34´2% de votos y entre 28-30 escaños, PNV el 35´6% y 27-29, PSOE 12´3% y 10, PP 7´5% y 6-7, Sumar 2´9% y 0-2, y Vox 2´2% y 0´1. Según SigmaDos, Bildu..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

domingo, 14 de abril de 2024

LA MASCARADA DE LAS COMISIONES

                         No me refiero a las comisiones ilegales que han cobrado, cobran y cobrarán una serie de amiguetes, parientes o allegados al poder, que lamentablemente no son una mascarada y sí una lamentable realidad para enriquecerse, me refiero a las comisiones parlamentarias creadas para, supuestamente, investigar los casos de corrupción política que, siendo investigados por los tribunales de justicia o meras sospechas interesadas de corrupción no pretenden aclarar nada sino desviar la atención enredándolo todo para que siga creciendo el fango de la corrupción miserable e insoportable que, desgraciadamente, sigue instalada en España desde hace demasiado tiempo para perjuicio y daño de nuestra convivencia democrática y, ¡cómo no!, para lucro de no pocos sinvergüenzas que encuentran en el fango político su forma ideal de sobrevivir y enriquecerse. En definitiva, una mascarada o farsa indecente que toma a los ciudadanos por idiotas haciendo creíble la popular frase de que lo mejor “para que una investigación no avance es crear una comisión”. Pues bien, en España en estos momentos electorales, en vez de una comisión parlamentaria ya tenemos dos, una en el Senado a instancias del PP y otra en el Congreso a instancias del PSOE….y todos contentos. La cruda realidad es que, tras hacerse púbico el “caso Koldo”, que se está investigando en los tribunales, el PP decide en paralelo formar una comisión parlamentaria para investigarlo en el Senado, donde cuenta con mayoría absoluta, y el PSOE responde con otra comisión en el Congreso de los Diputados, donde, aunque carece de mayoría absoluta, puede conformar una mayoría suficiente con sus aliados gubernamentales frente al mayoritario grupo parlamentario popular pero sin mayoría absoluta como en el Senado, y, al efecto, para no ceñirse al “caso Koldo”, amplía el objeto de la comisión a todos los presuntos casos de corrupción cometidos presuntamente con la compra de mascarillas durante la pandemia. Ya ven, la mascarada o farsa de las comisiones está más que servida, socialistas y populares, apoyados por sus respectivos voceros, en vez de dejar que trabajen los tribunales de justicia y que se depuren responsabilidades tras el esclarecimiento de los hechos se enzarzan en mezclar churras con merinas para ver si pueden dejar ciego al enemigo, que no el contrincante político, aunque en la refriega ellos se queden tuertos, mientras con semejante cortina de humo todo sigue igual y nada se aclara. Así las cosas, y con el ingrediente del caso “novio de Ayuso” por un lado y el de la “esposa de Sánchez” por otro, van haciendo la lista de comparecientes a la carta, no para esclarecer nada sino para seguir mareando la perdiz, como demuestra, entre otros, el hecho misterioso de que el Ministro Ábalos no sea incluido en la lista de comparecientes de la Comisión del Congreso (lo que para el PP es una “ocultación” intolerable), cuando todo el mundo sabe que es el origen del “caso Koldo” y que por ello ha sido expulsado del Grupo Socialista en el Congreso y forma parte del Grupo Mixto….. Ya ven, misterios sin resolver. Así las cosas nos disponemos a soportar la farsa de las comisiones parlamentarias, en medio de un ácido debate político en la calle y en las instituciones, como el que acaba de celebrarse en el Congreso donde ni siquiera queda al margen la política exterior, que debiera siempre ser consensuada, en el que Feijóo llega a decirle a Sánchez “que valiente es con los dictadores muertos” y le pide al Presidente que no use la política exterior como “cortafuegos de sus problemas internos”, en referencia a un asunto, como el reconocimiento del futuro Estado de Palestina, sobre el que sendos líderes discrepan en la forma de reconocerlo pero no en el fondo: el Gobierno apuesta por reconocer Palestina y el PP lo enmarca en una negociación con “más países con peso”…. si así están las cosas en asuntos no discrepantes del todo, imaginen como están en asuntos en que discrepan radicalmente.

            Entretanto, mientras el Senado cita a Koldo e Illa entre los primeros comparecientes y Zapatero dice “tengo la intuición de que no va a haber referéndum” en Cataluña, Sánchez dice a Feijóo que “quieren ocultar los buenos resultaos del Gobierno bajo el ruido”, en tanto que Sumar, oportunamente mirando para otro lado sobre el esclarecimiento del “caso Koldo”, achaca al PSOE la pérdida de protagonismo de Yolanda Díaz y mientras Bildu y PSE-PSOE pugnan por el voto de Sumar y de Podemos (más enemigos que nunca) en el País Vasco, e Iglesias, promotor de Yolanda en su día junto a Sánchez y ahora detractor de ella, dice que..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

miércoles, 10 de abril de 2024

DINAMITANDO LA DIVISIÓN DE PODERES

                         La amnistía y el “caso Koldo” toman la agenda de las Cortes Generales, dos controvertidos asuntos que amenazan a Sánchez por lo que la oposición busca acorralarle, especialmente en el Senado, donde el PP cuenta con mayoría absoluta y, al efecto Aragonés, envalentonado frente al Presidente del Gobierno, comparece en la Cámara Alta para desgastar a Illa, su candidato socialista a presidir la Generalitat, y avisa de que el referéndum y la financiación singular a Cataluña llegarán “más tarde o más pronto” pues, aunque de momento Moncloa lo niega, está convencido de que sucederá como ha sucedido, entre otros, con los indultos, la sedición o la amnistía, negados reiteradamente por el Gobierno para luego aplicar  aquello de “donde dije digo, digo Diego”. Y es que, obviamente, la credibilidad de este apuntalado Ejecutivo está bajo mínimos….y la de nuestra democracia empieza a ir por el mismo camino si no lo corregimos urgentemente. No en vano cabe señalar que entre los pilares básicos de cualquier democracia que se precie de serlo está el respeto profundo a las instituciones democráticas y sus respectivas competencias, así como el escrupuloso acatamiento por parte de todos a la división de poderes y su independencia, tal como establece la Constitución, que ni puede ni debe ser zarandeada a conveniencia de nadie, tal como viene sucediendo lamentablemente en estos últimos tiempos. Dinamitar la división de poderes para conseguir objetivos políticos, por loables que fueran, es tan inadmisible como torpedear la línea de flotación de la democracia, tal como pone de manifiesto, con toda la razón del mundo, el informe contra la amnistía elaborado por la mayoría del Consejo Fiscal que, entre otras cosas, dice (y todo demócrata lo sabe) que “la amnistía obedece a razones de conveniencia y oportunidad política”, que “pretende concederse en un contexto político-jurídico que no está viviendo la transición de un régimen dictatorial o autocrático a otro democrático” y que, por tanto, con dicha ley “el poder Legislativo invade el ámbito propio de atribuciones del Poder Judicial sin que la Constitución le habilite a hacerlo”. Más claro, el agua; todo el mundo sabe que la ley de amnistía obedece a la necesidad del Gobierno de los siete votos del prófugo de la Justicia Puigdemont, quien exige ser auto-amnistiado a cambio de ellos; todo demócrata entiende que, a diferencia de 1977, no estamos en un contexto de transición democrática sino en plena democracia y, por tanto, en este caso son los tribunales de Justicia quienes, con todas las garantías procesales, han de dilucidar los presuntos conflictos o delitos que cualquier persona o institución cometa; y todo el universo democrático, debería saber y defender que el camino para una amnistía sería, en todo caso, previa reforma de la Constitución, pero no mediante atajos de dudosa legalidad en temas tan fundamentales, asunto al que en España no recurre el Gobierno y sus socios por no tener una mayoría cualificada para hacerlo ni en las Cortes Generales ni en la propia ciudadanía española. No extraña pues que la insólita guerra interna en Fiscalía se recrudezca a pasos agigantados ante los desprecios del Fiscal General García Ortiz y su sometimiento sumiso al Poder Ejecutivo, coincidiendo con ello con la pintoresca insinuación pública de Pedro Sánchez de que el Fiscal General está o debe estar al servicio del Ejecutivo que es quien lo nombra y, por tanto, de quien depende, en vez de asumir que debe ser independiente y estar al servicio del interés general y de la defensa de los intereses del Estado, que no del Gobierno de quien, por tanto, no debe recibir órdenes de ningún tipo, pues sólo depende de la legalidad. No cabe olvidar jamás que el Ministerio Fiscal “es un órgano de relevancia constitucional y con personalidad jurídica propia integrado con autonomía funcional en el Poder Judicial” sobre el que el art. 124 de la Constitución dice que “tiene por misión promover la acción de la justicia en defensa de la legalidad, de los derechos de los ciudadanos y del interés público tutelado por la Ley, de oficio o a petición de los interesados, así como velar por la independencia de los Tribunales y procurar ante ellos la satisfacción del interés social”.

            Si nos olvidamos de todo esto procede y se entiende que la aparente sumisión de García Ortiz al Ejecutivo provoque la rebelión de los fiscales y el demoledor informe de la mayoría del Consejo Fiscal contra la amnistía que él negaba al Senado; procede y se entiende que las asociaciones pidan blindar la independencia del Ministerio Público antes de que Fiscalía asuma la instrucción penal a la que le urge Bolaños pero sin garantizar antes su autonomía, pues el borrador que verá el CGPJ (por cierto, pendiente de renovación por falta de acuerdo entre PSOE y PP) avisa de la necesidad de blindar primero la independencia de sus miembros, mientras el Fiscal General se apresura a convocar a las asociaciones de fiscales para abordar ya la reforma del Estatuto; y cabe y se entiende incluso que la Asociación de Fiscales, mayoritaria en el sector, baraje demandarlo ante el Supremo. Lo que no cabe ni se entiende ni procede, entre otras cosas, es que..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

domingo, 7 de abril de 2024

DESMEMORIA HISTÓRICA

                         De nuevo Sánchez en precampaña electoral lanza el Valle de los Caídos, hoy Cuelgamuros, contra el PP y Vox con la pretensión electoralista de movilizar a la izquierda y para ello visita sus instalaciones por sorpresa, acompañado, eso sí, de su equipo de imagen de Moncloa pero en ausencia de otros medios y lo hace bajo el pretexto de conocer “in situ” las tareas de recuperación de 160 víctimas reclamadas por sus familiares, exhibiéndose con los equipos forenses y anunciando a bombo y platillo que llevará ante la ONU, el Parlamento Europeo y el Consejo de Europa las llamadas “Leyes de Concordia” que los populares y los de Abascal promueven en algunas de las CCAA que gobiernan, presuntamente para contraponerlas a la Ley de Memoria Democrática, también conocida como “la ley Bildu” por el apoyo de los abertzales a la misma. Tras conocerse la inesperada visita de Sánchez a Cuelgamuros, de obvio carácter electoralista, la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha elevado una queja al Gobierno pues los familiares de las víctimas no pueden hacerlo….y, curiosamente, la respuesta inmediata ha sido que en el futuro sí se les permitirán acudir a los trabajos, mientras los contrarios a las exhumaciones, que también los hay, dicen que la visita de Sánchez y sus fotos con el equipo forense y con los huesos de los asesinados es “un espectáculo canalla”. La triste realidad es que una cosa es garantizar el derecho de esclarecer la verdad, toda la verdad, de aquellos atroces asesinatos, a lo que nada hay que objetar, y otra bien distinta es la utilización sesgada de aquellos atroces hechos, ya históricos, como arma electoral arrojadiza después de tanto tiempo, como pretende de un lado la izquierda más radical (a la que se suma incomprensiblemente el socialismo sanchista) y la ultraderecha (a la que no se opone la derecha moderada del PP), alimentando con ello el ambiente de radicalización entre los españoles, como sucediera en aquellos tiempos de nuestros padres y abuelos, que desencadenaron la guerra entre hermanos y después el sometimiento violento de los vencedores sobre los vencidos, como desgraciadamente sucede en todas la malditas guerras. Y todo ello con un sesgo histórico inadmisible que, como en otros casos, pretende ver los hechos históricos no de forma objetiva sino en clave ideológica, mientras, precisamente por ello, los historiadores proponen que se “diferencie claramente entre Historia como disciplina científica, que busca el conocimiento objetivo y general del pasado y que está dotada de los instrumentos adecuados y específicos para dicho fin, y Memoria, que es una apreciación o evocación inherentemente subjetiva, parcial y cambiante”. Es obvio que la interpretación sesgada de los hechos históricos, minimizando o maximizando algunos según convenga u omitiendo las causas que los provocaron y las consecuencias que tuvieron, no es el mejor camino para esclarecer la verdad y repararla. Por desgracia, algo de esto sucede con la Ley de Memoria Democrática que, por un lado, apela al loable deber de la sociedad de “memoria con las personas que fueron perseguidas, encarceladas, torturadas e incluso perdieron sus bienes y hasta su propia vida en defensa de la democracia y la libertad”, pero, por otro lado, acota en el tiempo cualquier referencia a las causas que coadyuvaron a la pérdida de dicha libertad (como, entre otras, el fracasado golpe de Estado de octubre de 1934, tras haber perdido la izquierda en los comicios de forma estrepitosa) provocando que desde entonces fuera inviable el frágil proyecto constitucionalista republicano de 1931, que con gobiernos a la deriva, asesinatos, tumultos y desorden por doquier, fue sobreviviendo hasta el trágico golpe de los militares en 1936 iniciándose con ello la trágica Guerra Civil (1936-39) en medio de un ambiente internacional dramático en el que se dilucidaba la hegemonía entre dos modelos autoritarios: el comunismo y el fascismo.

            Por tanto el sesgo de la Ley de Memoria Democrática, abarcando sólo el Golpe de Estado de 1936, la Guerra Civil y la Dictadura franquista, deja en la desmemoria histórica otros aspectos violentos repudiables, incluso aquellos que se dieron ya en plena Democracia, como, entre otros, los asesinatos de ETA, cuyos herederos, que apoyan esta Ley, son blanqueados ahora por el sanchismo y sus aliados, cuando lo que buscaban era abortar el consenso político entre los españoles de 1978 precisamente para finiquitar de una vez por todas las atrocidades cometidas por nuestros antepasados hace ya casi un siglo. Así pues, esclarecimiento y reparación de daños todos los que sean, pero no utilización de...... (sigue leyendo en  Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

miércoles, 3 de abril de 2024

EL CHICO DE LOS RECADOS

                         Justo cuando un juez archiva la investigación que llevó a dimitir a Mónica Oltra y justo en plena efervescencia de la corrupción en España con el paripé de sendas comisiones parlamentarias a la carta, una en el Senado, la del PP, y otra en el Congreso, la del PSOE, viene Koldo, el ex asesor de Ábalos, a decirnos a todos los españoles que él sólo era “el chico de los recados”, lo que, al margen de lo que la Justicia pueda probar o no (como ha sucedido con Mónica Oltra, entre otros muchos casos), debiera hacernos reflexionar sobre la perversidad de judicializar la política o politizar la justicia, que viene a ser lo mismo, para, en definitiva, no dejar trabajar a los jueces que son quienes en todo caso han de esclarecer los presuntos hechos delictivos cometidos. Y, por desgracia, en España no sucede así ya que, tanto los partidos políticos como los medios de comunicación (cada uno de éstos alineado descaradamente con su ideología política), andan más pendientes de que prevalezcan sus intereses particulares que el interés general de esclarecer los hechos para depurar las responsabilidades penales, si las hay, lo que requiere separar claramente la Justicia, que ha de ser siempre objetiva, de la Ética, que tiene una carga importante de subjetividad, en vez de mezclarlas en plena investigación judicial y adobarlas con previas condenas públicas temerarias que pueden causar clamorosos perjuicios a los afectados. No obstante debiera establecerse una especie de Código Ético de conducta que sirviera al menos como límite a quienes se dedican a la Política para evitar conductas que, no siendo reprobables desde el punto de vista penal o civil, no se corresponden con comportamientos inadecuados al sentido común y a la decencia al margen de su carácter delictivo o no. En este sentido, cabe enmarcar de momento lo actuado por Koldo, un simple asesor ministerial, que, al margen de que haya cometido delitos o no (los tribunales lo esclarecerán), rebasa cualquier límite competencial y así lo refleja claramente en sus declaraciones. Entre otras cosas, el ex asesor del ex ministro dice respecto a las mascarillas “ni yo, ni Ábalos, ni nadie del Ministerio ha cobrado un duro…. soy un chico de los recados que cumple bien las directrices”, “Ábalos me dijo céntrate en ayudar, e hice bien mi trabajo”, “llamé a cinco CCAA y cuatro ministerios para decirles que esta empresa funcionaba bien y no hay ni engaños ni estafas”….. y, respecto al oscuro episodio del aeropuerto de Barajas con la número dos de Maduro, jamás explicado a la opinión pública, añade que “el ministro hizo lo que tenía que hacer en el avión de Delcy para salvar a muchas empresas españolas en Venezuela”. ¿Es este el normal comportamiento de un simple asesor ministerial? ¿A qué directrices se refiere cuando dice que las cumplía tan bien? ¿Qué tipo de ayudas hizo el asesor sobre las que el ministro le dijo que se centrara en ayudar? ¿Cómo es posible que un simple chico de los recados entrara en contacto directo con las CCAA y los ministerios, tarea más propia del ministro o de algún destacado cargo del Ministerio que la de un simple asesor? Evidentemente, Koldo, en la práctica ni era un simple “chico de los recados” ni un asesor más entre las decenas de asesores con que cuentan los ministros. ¿Quién era Koldo para asegurar que en el oscuro “caso Delcy” su ministro “hizo lo que tenía que hacer para salvar a muchas empresas españolas en Venezuela”? ¿A qué empresas se refiere? ¿De qué había que salvarlas en el encuentro de Barajas, con nocturnidad y alevosía, al que asistía también Koldo y el empresario Aldama, uno de los principales investigados por la supuesta trama delictiva conocida como “caso Koldo”, cuando la ministra venezolana tenía totalmente vetado pisar suelo de la UE? Es obvio que Koldo miente pues no era el chico de los recados, como dice, sino muchísimo más que un simple asesor del ministro. Y entretanto se conoce que el clan Koldo buscó un nuevo pelotazo con el Gobierno Balear de Armengol (hoy presidenta del Congreso de los Diputados), pues trece días después de estafarle 3´7 millones de euros le volvieron a ofrecer medio millón más de mascarillas, operación que no se concretó por falta de espacio en el almacén.

            La triste realidad es que desde que saliera a la luz el “caso Koldo” se ha puesto en marcha el ventilador para esparcir porquería a los cuatro vientos de cara a las campañas electorales que se avecinan, con el famoso “y tú más” para, en vez de dejar a los jueces que hagan su trabajo desprestigiar al adversario político sea como sea en las citadas comisiones parlamentarias….y ya se sabe, cuando no quieras esclarecer nada, monta una comisión parlamentaria para marear más la perdiz. Así las cosas, el PP en la del Senado citará, entre otros, a..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

domingo, 31 de marzo de 2024

EL LABERINTO POLÍTICO NACIONAL

                         Cada vez se hace más confusa la salida del laberinto político nacional en que Sánchez y sus socios han convertido a nuestro país, España, al extremo de que, hoy por hoy, salvo que los ciudadanos lo vayan aclarando en las urnas, cada vez es más difícil prever el futuro inmediato de nuestro Estado de Derecho, que paulatinamente se va convirtiendo en un Estado de Desecho ingobernable, y de cara al año electoral que nos espera, más aún. En Cataluña, Aragonés presiona a Sánchez exigiendo el ilegal referéndum para sacar rédito electoral y recuperar terreno frente a Puigdemont, entrando al cuerpo a cuerpo con el prófugo acusándole de blando con Moncloa (¡quién lo diría!), mientras que en Barcelona el socialista Callboni tantea una alianza con ERC para el Ayuntamiento; por otro lado, mientras Anna Grau deja la política y no concurrirá con Ciudadanos a los comicios del 12-M, el PP controlará desde Génova las listas y la campaña del popular Fernández cuando el favorito como candidato era Reyes, el alcalde de Casteldefels, que irá de número dos (es la solución precipitada tras frustrarse una transición tranquila por el adelanto electoral, cuando el PP tiene pendiente un Congreso Regional para ejecutar el reajuste orgánico del partido). En el País Vasco, PNV y Bildu, ambos socios de Sánchez, con empate técnico según los sondeos y con el PSE como tercera fuerza, el PSOE habrá de decidir a quién apoyará para gobernar Euskadi, mientras Otegi le quita cinco escaños a Sumar, cogobernante en España con los socialistas; pues todo apunta a que casi 45.000 indecisos del PNV, por sus alianzas con Sánchez, serán decisivos en la lucha por el voto con EHBildu, también socio de Sánchez (los abertzales, según SigmaDos, ganan seis décimas en un mes, lo que les acerca a un empate de 29 diputados con el PNV de Pradales, el novedoso candidato de los nacionalistas de derechas), cuyo PSOE en versión PSE de Patxi López pierde 1´4 puntos y el 12% de sus votantes elegirían la papeleta peneuvista. En las elecciones europeas, ERC, Bildu y BNG, todos ellos socios de Sánchez, sellan entretanto su alianza con el objetivo común (aquí al menos hay un objetivo común) de “alcanzar Estados propios” en sus territorios, en definitiva, de convertir España en un mosaico de mini-estados independientes a la gresca unos contra otros frente a la unidad e igualdad proclamadas en nuestra Constitución, por lo que el PP denuncia esta coalición “radical” de los socios del Gobierno para comparecer en los comicios de la UE. Y mientras tanto a nivel nacional, es decir de España, el PSOE sanchista, cada vez más arrinconado y atado por los socios del Presidente Sánchez, endurece su estrategia de confrontación para intentar recuperar terreno en las urnas, pues, aunque dirigentes socialistas alertan del peligro de desmovilización, se impone el sector que apuesta por el choque frontal con el PP en todos los frentes….pues Sánchez ignora el bloqueo legislativo de sus propios socios para hacer campaña electoral, y, pese a que en los últimos tres meses su Gobierno no ha podido aprobar ninguna ley, anuncia cínicamente 49 nuevas normas, mientras el PP cree que la renuncia obligada por sus socios a los Presupuestos Generales del Estado demuestra a qué extremo llega la “dificultad del funcionamiento de este país”….y lo que nos queda.

            Así las cosas, Sánchez está cada vez más cercado por el “procés”, el “caso Koldo” y los Presupuestos con el Senado con mayoría absoluta del PP retomando el Pleno con el probable requerimiento al Congreso de los Diputados por la amnistía. El prófugo, socio de Sánchez y rehabilitado por él, se presenta a los comicios en plan personalista como “Junts más Puigdemont” incitando a una especie de unidad “fake” a las fuerzas minoritarias postconvergentes testimoniales que rechaza ERC, en tanto que el TSJC retrasa el juicio a los fontaneros de Junqueras para evitar “interferencias” en la campaña electoral. Sánchez se dispone a acabar con Yolanda Díaz y torpedear al prófugo, con lo que ninguneará a su Vicepresidenta, que progresivamente se desvanece en el liderazgo de Sumar y los socialistas la consideran ya amortizada, y también se dispone a busca fórmulas para frenar a un crecido Puigdemont, rehabilitado por él mismo con el objetivo de hacer la cuadratura del círculo entre sendos secesionismos de izquierdas y de derechas a la vez, mientras Illa, el candidato socialista a la Generalitat, sostiene que “el procés se supera con ERC y Junts en la oposición en Catalunya y el PP en España”. Y todo ello adobado con el pulso inédito por la hegemonía en Euskadi, donde el PNV habrá de medir en los comicios vascos el gran ascenso de Bildu, blanqueado por Sánchez, en los últimos cuatro años, con caras nuevas en sendos partidos aspirantes a ser los más votados. ¿Y cómo va a incidir la gobernabilidad en Euskadi y Catalunya en la gobernabilidad de España? Misterios sin resolver. Se atribuye a...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

 

miércoles, 27 de marzo de 2024

DEMOCRACIA, SÍ; DICTADURA DE LA MAYORÍA, NO

                         Confundir “democracia” con “dictadura de la mayoría” es un grave error que al final se paga muy caro, pues, aunque obviamente la democracia se sustenta en la conformación de mayorías parlamentarias para gobernar, jamás debe olvidarse que por encima de esas mayorías coyunturales en cada momento está el permanente entramado institucional y procedimental de convivencia diseñado en la Constitución, refrendada por el pueblo mayoritariamente, y que todo gobernante democrático, legitimado y amparado por ella, ha de considerar como límite ineludible a la hora de tomar decisiones por mayoritarias que estas sean para impedir que esas mayorías no actúen como les venga en gana al margen de las reglas de juego establecidas, atropellando con ello derechos ciudadanos contemplados en la Carta Magna, lo que en el fondo supone realmente una inaceptable dictadura de hecho por mucho que se quiera disfrazar de democracia. En “román paladino”, para que todo el mundo lo entienda, que las mayorías parlamentarias no pueden hacer lo que les venga en gana saltándose a la torera los límites impuestos por el marco legal emanado de la Constitución y por los procedimientos establecidos, que incluso contemplan la calidad de dichas mayorías parlamentarias según la importancia y alcance de lo que se quiera legislar (es decir, requiriendo mayoría simple, absoluta o cualificada, según para qué cosas), pues, por ejemplo, no es lo mismo modificar preceptos constitucionales fundamentales que regular leyes ministeriales del ámbito que sean. No tener esto en cuenta, supone, sin duda alguna, un fraude de ley inadmisible, lo que, según muchos juristas, sucede, por ejemplo, con la tramitación de la patética ley de amnistía, impuesta por Puigdemont y ERC, minoritarios en las Cortes, lo que en el fondo se convierte en una reforma encubierta de la Constitución, que, en todo caso, requeriría una mayoría cualificada que, hoy por hoy, no hay en las Cortes Generales, y, por tanto, genera obviamente un conflicto político de primera magnitud, que, al final, tendrá que dilucidar el Tribunal Constitucional, donde los letrados del Senado invocarán que se trata de una reforma encubierta de la Constitución y que, por tanto, el Congreso (cuyos letrados también se oponen, pero acatan la decisión del nuevo Secretario General) invade atribuciones que corresponden a la Cámara Alta ya que como reforma constitucional (encubierta o no) el Senado tiene capacidad para frenarla e incluso tumbarla pues tendría las mismas facultades que el Congreso, mientras que tal como la amnistía se pretende tramitar ahora con un procedimiento legislativo normal y de urgencia, el Senado queda simplemente como una Cámara de “segunda lectura” sin capacidad para frenar la iniciativa legislativa, tal como pasa con otras leyes de menor importancia que no afectan a derechos fundamentales. No en vano este conflicto entre Senado y Congreso, inédito hasta ahora como sucede en otros muchos asuntos con el Gobierno de Sánchez y sus socios, provoca cierta tensión en los letrados de la Cámara Baja al extremo de que algunos de ellos amagan incluso con la renuncia para no tener que verse obligados a defender la amnistía en el TC, al que, por cierto Sánchez recurre ahora para frenar la iniciativa del Parlament de Catalunya en favor de la independencia, iniciativa que, sin embargo, sus socios secesionistas defienden. Entretanto Sánchez endurece sus ataques contra el PP y Feijóo, al que equipara con Abascal, y asegura que “España va en la buena dirección y la oposición desbarra”, mientras el PSOE ve muy débil a su socia Yolanda Díaz que “ya no es una figura poderosa”, apuntando los socialistas “en su libreta” la decisión de los “comunes” (socios de Yolanda y de ellos mismos) de no apoyar los Presupuestos de Cataluña, convencidos de que Sumar no ha avanzado en su estructura y que eso lastra el liderazgo de la gallega. Ya ven, otros desbarran pero no Sánchez, arropado por esta serie infinita de socios minoritarios, convencidos de que la “democracia” es sinónimo de “dictadura de la mayoría”…o, si conviniera a sus intereses y llegara el caso, incluso de dictadura de las minorías, que sería el siguiente paso; esperemos que Sánchez, al final, no coincida ideológicamente con ellos y se pueda superar esta pesadilla antidemocrática.

            Así las cosas, mientras el PP acusa al Gobierno de reactivar el procés secesionista a base de cesiones de dudosa constitucionalidad y avisa de que los independentistas “no mienten” y son “insaciables” (es su razón de ser), Sánchez y su Ejecutivo, aunque ahora intentan frenar de cara a la galería las voraces demandas del independentismo, se ven desbordados pues tanto Junts como ERC, ambos contradictorios socios ideológicos de Sánchez, le exigen el famoso referéndum en plena campaña electoral catalana, al extremo de que Junqueras, en apariencia más sensato que el prófugo Puigdemont y más próximo al PSOE ideológicamente hablando, se suma abiertamente a este nuevo “procés” impuesto por el fugado y, tras la amnistía regalada, manifiesta, tras haber sido indultado por Sánchez sin nada a cambio, que..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

domingo, 24 de marzo de 2024

PUIGDEMONT, EL RESUCITADO

                         Un totalitario Puigdemont, resucitado por obra y gracia de Sánchez cuando estaba políticamente muerto y fugado de España, cada vez más olvidado, regresa triunfal a la primera plana de la política española y anuncia cerca de la frontera española (todavía no puede pisar suelo español por más esfuerzos que el Presidente del Gobierno hace ahora para que lo consiga lo antes posible a cambio de sus siete votos) que será candidato por Junts en los comicios catalanes como “president legítimo”, exigiendo por ello recuperar el cargo que perdió tras aplicar el entonces Gobierno de Rajoy a Cataluña el artículo 155 de la Constitución, obviamente con el respaldo de Sánchez, quien, entonces en la oposición, decía que “la mejor forma de defender la Constitución es poner freno a cualquier quiebra unilateral” (sabias palabras del entonces constitucionalista Sánchez). Hoy, sin embargo, mientras el prófugo reúne en Elna, la localidad francesa dónde los independentistas ocultaron las urnas para el patético referéndum unilateral del 1-O, nuestro Presidente Sánchez, bastante menos constitucionalista que entonces, se limita a minimizar la afrenta y las amenazas del chantajista Puigdemont diciendo que el sedicioso (perdón, ya se ha encargado Sánchez de borrar este delito del Código Penal) “está en su derecho” de plantear, entre otras cosas, que sólo volverá a España para ser investido ya que “se abre la oportunidad de restituir la presidencia destituida” y para lograrlo ofrece a todo el independentismo, y especialmente a ERC, una lista unitaria a modo de plebiscito en su primer mitin de campaña desde la “Cataluña Norte” (las tierras del sur de Francia donde obviamente, si hubiera hecho lo que ha hecho en la “Cataluña Sur”, es decir, en tierras del Estado Español, sin duda estaría inhabilitado o preso) dejando bien claro que regresa el “procés” pues por ello será candidato a los comicios catalanes, y no a los europeos, “para culminar la independencia” ya que su candidatura es “la oportunidad” de “acabar el trabajo que empezó el 1-O”, antes de largarse de España para no comparecer ante los tribunales de Justicia, y “retomar el camino que la represión bloqueó”. Y al efecto desafía a ERC a ir en una lista única, que Aragonés rechaza, para celebrar otro referéndum como el de entonces en 2027, mientras presume de haber arrastrado al PSOE a pactar con él fuera de España (insólito en cualquier país europeo) y anuncia que volverá a nuestro país si puede ser president, aunque no descarta hacerlo antes, en plena campaña electoral, aun a riesgo de ser detenido nada más pisar suelo español (bien sabe que en este supuesto sería por poco tiempo ya que la amnistía que le ha impuesto a Sánchez a cambio de sus siete votos le garantizaría su puesta en libertad nada más ser aprobada la ley por vía de urgencia en las Cortes Generales). Y entretanto Sánchez quitándole importancia a todo esto, que ahora ve normal en democracia, y mintiendo a los españoles al decir que todo ello es para mejorar la convivencia entre los catalanes y entre éstos y el resto de españoles, cuando todo el mundo sabe perfectamente que semejante barbaridad antidemocrática se debe a la necesidad que el Presidente tiene de los siete votos del prófugo para mantenerse en Moncloa.

Y mientras Puigdemont se dispone a dirigir su campaña contra el PSC, que podría arrebatarle la presidencia a la Generalitat (aunque el CIS catalán relega a Junts al tercer puesto, detrás de los socialistas y ERC), Aragonés (otro que tal baila), desde la Generalitat, lanza un órdago a Sánchez sobre la soberanía fiscal catalana diciéndole “no voy a aceptar que Andalucía nos limite la financiación”, mientras rechazan la oferta del Gobierno de negociar el nuevo sistema de financiación autonómica, que hay que mejorar, en un marco “multilateral” que los secesionistas catalanes rechazan. El PP por su parte fuerza al PSOE a tomar posiciones en el Congreso sobre el “cupo catalán” (aquí todo el mundo ha de retratarse de cara a lo que nos viene) mientras Puigdemont convulsiona a ERC y obliga a Aragonés a apretar el acelerador secesionista, amenazando con ello las opciones de ganar de los republicanos y su desgastado líder, el actual President de la Generalitat. Entretanto el Congreso y recursos judiciales frenarán el “cupo catalán”, pues las CCAA gobernadas por el PP, que son la mayoría, reaccionarán al pacto fiscal en favor de Cataluña ante los tribunales y el Constitucional, y difícilmente tendría el apoyo de otros grupos integrados en Sumar, que cada vez es más Restar que Sumar, como Compromís, BNG y Chunta (¡cómo justificarán ante sus respectivos electores este manifiesto trato de favor a Cataluña en detrimento de sus respectivos territorios!). Y para mayor intriga e incertidumbre el Gobierno se abre a...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

miércoles, 20 de marzo de 2024

DE AQUELLOS POLVOS…..

                         Estamos llegando a tal extremo de sinvergonzonería, cinismo y descrédito político por parte de nuestros gobernantes que la convivencia ciudadana se hace cada vez más difícil y el desencanto crece exponencialmente. Un desencanto, no ya ideológico sino democrático, en el que prevalecen las astucias y artimañas para que los ciudadanos sólo tengamos la capacidad de elegir entre lo malo y lo peor en vez de entre lo bueno y lo malo, en medio de un preocupante ocaso de las ideologías y los principios tradicionales que las sustentan y, obviamente, con semejantes planteamientos siempre salen ganando los más sinvergüenzas, cínicos y desacreditados, no ya a nivel electoral entre los partidos, sino también a nivel interno en cada uno de ellos con lo que, al final, siempre pierden los más coherentes, comedidos y sensatos, frente a los que más capacidad tienen de mentir y hacer barbaridades, moviéndose en el oscurantismo como pez en el agua con la imprescindible ayuda ciega de fieles colaboradores con orejeras que apelan, normalmente por interés personal, a una fidelidad infinita al jefe de la manada del grupo en vez de a la razón y la lógica. Y en esta situación kafkiana cabe todo, se justifica todo con tal de que tu partido y su jefe salgan mejor parados que el adversario, convertido en enemigo irreconciliable, pues es absurdo, angustioso e incomprensible que de todo se haga una torticera lectura maniquea, según la cual, todo está bien, si lo hago yo o mi partido, pero mal si lo hace mi contrincante, porque, simplemente, yo soy el bueno y él es el malo. Así las cosas sólo cabe esperar inéditos e insólitos comportamientos inesperados e indeseables como, entre otros, el choque constitucional entre el Congreso y el Senado por la ley de amnistía, después de que el informe de los letrados de la Cámara Baja y la Alta discreparan sustancialmente sobre la constitucionalidad de la ley de amnistía impuesta al Gobierno por Puigdemont a cambio de sus siete votos que le permitan seguir gobernando. En efecto, los letrados del Senado, que cuenta con mayoría absoluta del PP, advierten que la amnistía “dinamita” la Constitución y en su informe califican de “fraude” la ley aprobada por Sánchez y sus socios en el Congreso, donde prácticamente hay un empate técnico sobre dicho debate entre Gobierno y Oposición (178 votos frente a 172), y la acusan de dejar “en papel mojado” la carta Magna, aunque la tramitan obviamente por obligación, tal como establece la Constitución, a pesar de sus dudas sobre su constitucionalidad. Por su parte en el Congreso, a pesar del criterio en contra de los letrados de la Cámara Baja (ya ven que los expertos no discrepan tanto en el diagnóstico), la ley sale adelante con la citada mayoría y lo hace con el aval de su letrado mayor, Galindo, hombre de confianza de la Presidenta Armengol, quien, pese al criterio contrario de sus compañeros, defendió la legalidad de la dichosa ley, aunque ahora quede entre la espada y la pared frente al mayoritario rechazo de los letrados de ambas Cámaras Legislativas a la constitucionalidad de la misma, asunto que el propio Gobierno, con Sánchez a la cabeza rechazaba contundentemente hasta darse cuenta de que, tras el resultado electoral, cabía la posibilidad de arrebatar el Gobierno al ganador de los comicios (aunque sin mayoría absoluta), en este caso el PP, lo que es insólito hasta ahora en nuestra democracia, aunque semejante triquiñuela exigía el sometimiento al chantaje del prófugo de la Justicia, Puigdemont, sobre quien Sánchez prometió que le traería a España para ponerlo ante los tribunales para responder sobre los presuntos delitos graves que se le imputaban contra el Estado de Derecho por el que otros compañeros suyos de aventuras no fugados ya habían sido condenados y, para atraerlos a su proyecto, luego indultados por su Ejecutivo sanchista…..Y de aquellos polvos vienen estos lodos. Hoy, insólitamente, el Senado acusa al Congreso de “reforma constitucional encubierta” provocando el choque indeseado de las dos Cámaras Legislativa, después de que los juristas de la Cámara Alta hayan considerado que la ley vulnera hasta 16 artículos de la Constitución y, por tanto, planteará un conflicto de atribución de competencias contra el Congreso ante el Tribunal Constitucional que tendrá que decidir al respecto, pues los populares, con mayoría absoluta en el Senado, denuncian, visto lo visto, que la norma supone una modificación ”fraudulenta” de la Carta Magna, con la aquiescencia del Letrado Mayor del Congreso. 

            Y en medio de este putrefacto lodazal, PP y PSOE se enzarzan además en un patético debate sobre la corrupción, después de que, tras las dimensiones que está tomando el “caso Koldo”, saliera a la palestra el presunto fraude fiscal del novio de Ayuso por lo que casi en tromba el Gobierno pide la dimisión inmediata de la presidenta madrileña, equiparando este hecho a la trama del ex asesor del ministro Ábalos, quien por semejante asunto ahora forma parte del Grupo Mixto del Congreso tras ser expulsado del Grupo Socialista. Y como se trata de arremeter contra..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

 

domingo, 17 de marzo de 2024

CADA VEZ PEOR

                         Con impostada alegría el Gobierno de Sánchez y el Grupo Parlamentario Socialista celebraban en el Congreso de los Diputados la aprobación de la Ley de Amnistía impuesta por el secesionismo (y muy especialmente por Puigdemont, el más beneficiado cuando se aplique) por la pírrica ventaja de 178 votos a favor y 172 en contra, mientras que los variopintos socios de Sánchez (todo el secesionismo catalán, vasco y gallego, más todo el populismo del entramado de Sumar, incluido Podemos) exhibían su verdadera alegría y se felicitaban mutuamente por haber impuesto al patético y débil “gobierno Frankenstein dos” todas sus exigencias (incluso las que el propio Gobierno consideraba inconstitucionales a bombo y platillo hasta anteayer) a cambio de nada….bueno, sí, a cambio de los siete votos de Junts para seguir gobernando, pues los de los demás socios ya los habían comprado mucho más baratos. Una amnistía que, aunque algunos intentan equipararla, nada tiene que ver con la promulgada en 1977 que, con sus errores y aciertos, pretendía transitar sin violencia de un régimen dictatorial a un régimen democrático mediante un amplio consenso político-social y respondía a un verdadero clamor social y político, saliendo aprobada en el Congreso por 296 votos a favor, dos en contra, 18 abstenciones y un voto nulo (eso sí es mayoría incuestionable). Nada que ver pues con la actual amnistía sanchista aprobada con calzador en el Congreso, que transita hacia no se sabe dónde desde un régimen democrático, homologado con los que conforman la UE, donde los comportamientos delictivos se dirimen en los tribunales de justicia mediante procesamientos con todas las garantías procesales para los procesados; y, como ven, nada que ver con el resultado de la votación, que no obedece a clamor social o político alguno sino a satisfacer a quienes, a cambio de unos votos para apalancar al Ejecutivo, han cometido graves delitos contra el Estado de Derecho y, para colmo, sin compromiso alguno por parte de dichos delincuentes de no volver a repetir los mismos delitos. Así pues, por más que se pretenda disfrazar esta torticera amnistía, la realidad es que vamos cada vez peor en la consolidación democrática que se pretendía con la consensuada amnistía de 1977, pues ahora lo que se consigue es deteriorar gravemente el Estado de Derecho al desautorizar el Ejecutivo al Tribunal Supremo, blanqueando los delitos a cambio de nada (bueno, sí; de siete votos) y, por ende, dejando inmaculados a una serie de delincuentes que encima presumen de que esta amnistía “no es punto final de nada” sino el inicio de retomar su proyecto totalitario para imponer la autodeterminación de los pueblos de España por vía inconstitucional si el Estado chantajeado no se pliega a concederles este derecho como sea y, si fuera preciso, al margen de los cauces democráticos establecidos, como se hizo en el “procés”, hoy blanqueado por el Gobierno de España, o forzando previamente situaciones de dudosa legalidad (como ha sido el caso de esta amnistía) que no obedecen a ningún clamor general ni a ningún amplio consenso político-social para resolver un conflicto inexistente, sino que obedece a intereses personales espurios de unos pocos, como es el caso. Cabe decir de una vez por todas, claro y alto, que, de conflicto político, nada de nada, pues, a diferencia de lo que sostiene el secesionismo totalitario (especialmente el ultraderechista representado por Junts, con el prófugo a la cabeza) y que lamentablemente avala el Ejecutivo de Sánchez, en España no se persigue a nadie ni se impide que los secesionistas promuevan su proyecto separatista, lo que se persigue y debiera impedirse, como es lógico, es que pretendan imponerlo al margen de la ley y de la Constitución sin previa reforma de ésta que lo permitiera, lo que supondría unas mayorías amplias que hoy no se dan en España por más que uno de los partidos mayoritarios, en este caso el PSOE de Sánchez, juegue con esa ambigüedad, como hace con la amnistía recién aprobada, cuando lo que tiene que hacer, si es que así lo quiere, es asumir el objetivo de sus socios secesionistas como propia propuesta electoral socialista o, en caso contrario, decirle a dichos socios totalitarios que la fiesta se acabó, pues en asunto tan crucial no caben medias tintas ni ambigüedades, nos jugamos nuestra democracia.

            Cada vez peor pues con una amnistía que da el pistoletazo de salida a una precampaña electoral catalana tras decidir el president Aragonés un adelanto electoral al 12 de mayo, porque los socios de Sánchez no le han aprobado los presupuestos en el Parlament, generando más alboroto político si cabe, ya que, al parecer, la verdadera razón del adelanto electoral es..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

 

miércoles, 13 de marzo de 2024

CON EL TERRORISMO NO SE JUEGA

                         Mientras en España, con motivo de la patética amnistía, debatimos si procede o no seguir investigando a Puigdemont por presunto delito de terrorismo y mientras muchos demócratas consideran, o debieran considerar, que en asunto tan grave siempre procede aclarar judicialmente cualquier indicio sospechoso al respecto en vez de buscar subterfugios legislativos sobre terrorismos buenos o malos (todos son perversos en el grado que se den), en este caso, con tal de contentar al prófugo a cambio de los siete votos de Junts que necesita el Ejecutivo de Sánchez para mantenerse en el poder, ha querido el destino que semejante debate coincida con el 20º aniversario de los trágicos atentados del 11-M que dejaron 193 inocentes muertos y más de 2.000 heridos y que, desgraciadamente, marcaron un antes y un después en las relaciones democráticas del Gobierno y la Oposición en España a causa del repugnante uso político torticero por parte de unos y otros, cuando lo procedente hubiera sido ponerse de acuerdo para esclarecer los hechos lo antes posible y más aun teniendo en cuenta que tres días después del terrible atentado estaban convocadas unas elecciones generales que cambiaron todo radicalmente en lo referente a lo que hasta entonces había sido el proceder normal de la alternancia política. La trágica realidad fue que en plena amenaza terrorista etarra y yihadista, cuando todas las encuestas señalaban al PP como claro vencedor de los comicios con Rajoy a la cabeza, el Gobierno de Aznar sugirió que el atentado era obra de ETA y el PSOE de Zapatero le acusó de mentir exigiéndole que en plena conmoción nacional se aclararan los hechos inmediatamente mientras apuntaba a que la autoría era yihadista y no etarra. El dilema era, a tres días de las elecciones, que, si el mayor acto terrorista cometido en España lo había perpetrado ETA, tal como presumía el Gobierno, el PP barrería en las elecciones, y, si lo había cometido Al Qaeda, como presumía el PSOE, podía dar un vuelco a las encuestas. Y con esta irresponsable forma de proceder por parte de unos y otros se afrontó el final de la campaña electoral en la que, incluso en el día de reflexión, las sedes del PP fueron rodeadas por miles de manifestantes que acusaban al Gobierno Popular de Aznar de mentiroso. La tragedia, la confusión y los móviles con aquel “pásalo”, que se hizo viral, convirtieron los asesinatos del 11-M en el epílogo sangriento de una campaña electoral en la que ni gobierno ni oposición estuvieron a la altura de las circunstancias, iniciándose así un desencuentro profundo entre PSOE y PP (los dos partidos protagonistas de la gobernabilidad democrática desde aquel fatídico golpes de Estado del 23-F) que les ha convertido en enemigos irreconciliables hasta el día de hoy en vez de contrincantes políticos capaces de entenderse al menos en los asuntos de Estado aunque solo sea para salvaguardar la Democracia y garantizar la pervivencia de nuestro sistema constitucional de convivencia. El 11-M supuso que el terrorismo diese un vuelco electoral inquietante, y hoy el terrorismo sigue siendo parte sustancial de la lucha política sin cuartel entre PSOE y PP, cuando ambos debieran saber que con el terrorismo no se juega. El Gobierno de Sánchez modifica a la baja los delitos terroristas con una modulación intolerable sobre la violencia empleada con el objetivo de contentar a Puigdemont, investigado, entre otras cosas, por terrorismo y se permite en plena investigación judicial desacreditar a los jueces diciendo, como sostiene el secesionismo, que en las actuaciones de Tsunami Democrátic y los CDR nada de nada, pretendiendo dejarlo todo como meros altercados callejeros.

            La gravedad del 11-M fue tal que, aún hoy, circulan teorías, bulos y desinformaciones sobre lo ocurrido pese a que en 2007 el tribunal condenó a los yihadistas como autores de la masacre que, por cierto, ha prescrito ahora después de veinte años sin que todos los cabos ya hayan sido atados, cuando ya sólo quedan en prisión tres de los 18 condenados. A las víctimas de la masacre se las homenajea en este aniversario con un acto principal con la presencia de los Reyes de España y el Vicepresidente de la Comisión Europea, ya que la Comisión ha elegido Madrid para celebrar este homenaje haciéndolo coincidir con el 20º aniversario, un acto al que, por cierto, no asiste Feijóo, alegando que el PP no ha sido invitado al mismo. Por su parte Aznar reivindica hoy su gestión del 14-M, ataca a quienes desmontaron las mentiras y dice que ningún documento oficial confirmó la autoría yihadista, y el PP le defiende. Entretanto el Gobierno de Sánchez..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)