domingo, 31 de marzo de 2019

PSC, EL CÁNCER DEL SANCHISMO

                        Desde hace bastante tiempo no pocos dirigentes del PSOE vienen apostando inútilmente por una Federación socialista más en Cataluña, similar a las del resto de CCAA, despojadas de la componente nacionalista que siempre caracterizó al PSC, asociado, que no integrado, al clásico PSOE y, en los últimos tiempos, incuestionable director del proyecto territorial sanchista. En efecto, jamás prosperó en las filas socialistas españolas la idea de evitar dejar huérfano de un proyecto socialista democrático moderado, válido para todos los territorios de España, al electorado progresista de izquierdas catalán, propiciando que el socialismo nacionalista catalán, o nacional-socialismo catalán (como prefieran, depende de si ponen el acento en lo socialista o en lo nacional), derive en una enfermedad política crónica dentro del socialismo democrático español, al extremo de que, últimamente, haya ido mutando en preocupante cáncer político con el sanchismo, por el que los nacional-socialistas catalanes apostaron fervientemente desde su aparición para reemplazar al clásico socialismo español no nacionalista y vertebrador de España, condicionando e impidiendo así que los socialistas españoles, incluidos los catalanes, que también los hay, puedan ofertar a toda España, incluida Cataluña, un proyecto común y uniforme, progresista y socialdemócrata o socialista democrático moderado, claro y contundente, y despojado de células cancerígenas nacionalistas y, sobre todo, garante de impedir en el futuro una posible metástasis al resto de territorios del Estado español que lo dejaría con tremendas secuelas o incluso podría llevarlo a su desaparición. Por ello es urgente y esencial que, de cara a estas elecciones, el sanchismo diga alto y claro, sin ambigüedades, qué va a hacer con el asunto prioritario del secesionismo catalán, si es que consigue seguir gobernando en España. Todos los españoles, incluidos los catalanes, tienen derecho a conocer los propósitos de Sánchez al respecto para poder depositar su voto con conocimiento de causa y no tener que lamentarse después inútilmente, siendo preocupante que en la presentación de su programa, desvelando nada menos que 110 medidas, no diga ni una palabra sobre su plan para Cataluña, ni cite siquiera el nombre de la Autonomía, ni diga si mantendrá el fracasado y bochornoso diálogo con el secesionismo totalitario que le llevó a convocar las elecciones, sin aludir al conflicto territorial ni responder a la demanda de si indultará o no a los procesados secesionistas en caso de que sean condenados, aunque, eso sí, aparcando de momento su idea del “carácter plurinacional del Estado” y, en genérico, apostando por fortalecer las autonomías; en definitiva, un olvido sospechoso y preocupante del problema primordial que de cara al futuro tiene España. Y para avalar las sospechas de los partidos constitucionalistas, va Iceta, el líder de los social-nacionalistas catalanes (para que nadie se enfade con el término nacional-socialistas), y pone la guinda, diciendo que si “el 65% de los catalanes quiere la independencia, la democracia deberá encontrar un mecanismo”, es decir, que si hay una mayoría más o menos cualificada de catalanes por la independencia, que no de españoles, el Estado debe concedérsela. Olvida Iceta que la soberanía es del pueblo español, y, si no lo olvida pero está dispuesto a apostar por ella, ya debe empezar el sanchismo a proponerle a los españoles una modificación sustancial de la Constitución para que, si.... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

miércoles, 27 de marzo de 2019

AL MENOS, NO MENTIR

                        Mientras en el Supremo gran parte de los testigos avalan con sus declaraciones un presunto delito de rebelión por el “procés” secesionista catalán, que, en todo caso se habrá de demostrar o no con las pertinentes pruebas, el reaparecido Pablo Iglesias miente descaradamente en televisión y se anticipa al veredicto diciendo que, aunque lo ocurrido fue “serio” (¡menos mal!) no se puede hablar de insurrección armada “que es lo que dice el delito de rebelión”, coincidiendo con Cuixart en que el 1-O sólo fue “un ejercicio de desobediencia”, y aboga por que haya proporcionalidad en las penas de los líderes independentistas. Sin embargo el artículo 472 del Código Penal, que es el que hay que aplicar, dice textualmente que “son reos del delito de rebelión los que se alzaren violenta y públicamente para cualquiera de los fines siguientes”, entre otros, “declarar la independencia de una parte del territorio nacional” o “sustraer cualquier clase de fuerza armada a la obediencia del Gobierno”…..sin contemplar en ningún momento que dicha violencia tenga que ser armada o alzamiento militar, con lo que Iglesias, acostumbrado a utilizar grandes dosis de demagogia, cinismo e incoherencias en sus ardientes discursos populistas y su comportamiento, miente descarada y cínicamente a los ciudadanos quienes, al menos, debieran exigir como mínimo no mentir a sus representantes políticos. En efecto, los testigos, obligados a decir la verdad ante el Tribunal (los políticos debieran estarlo igualmente ante sus electores), declaran que hubo violencia en el “procés” y, así, entre otros, los mandos de la Guardia Civil enviados a la Consellería de Economía, rodeada en su día de energúmenos para impedir que la Comisión Judicial hiciera su trabajo, describen la relevancia del líder de la ANC, declarando que “allí Jordi Sánchez tomaba las decisiones y los mossos lo acataban”, y la tensión que vivieron al advertirles los agentes catalanes “si salís con las cajas, os matan”, al extremo de tener que sacar a la jueza por la terraza del edificio. Es uno más de los múltiples episodios de violencia, que todos vimos en televisión, hasta desembocar en la declaración unilateral de independencia de Cataluña, al extremo de que la Guardia Civil ve, no sin razón, un verdadero “polvorín” en los días previos al ilegal 1-O. A todo ello hay que añadir últimamente que el Tribunal de Cuentas lleva a Fiscalía la acción exterior del “procés” e investiga al fugado Puigdemont, pues, según su informe, que el PSOE quiere ocultar, la Generalitat dilapidó 421 millones en la innecesaria acción exterior (competencia reservada al Gobierno central), al extremo de que las falsas  “embajadas” catalanas gastaron “sin ningún control” nada menos que 27 millones en promocionar el “procés” y Diplocat despilfarró casi 16 millones en viajes y congresos, pagando la Generalitat por equiparar Cataluña con un escenario de guerra, ya que el lobby estadounidense especializado en procesos secesionistas violentos cobró más de un millón de euros y el coste de los “observadores internacionales” del ilegal 1-O costó 550.000 euros. Pero todo ello no impide que Torra, que ahora busca marcar perfil propio frente a Puigdemont, pida dinero extra a Madrid, exactamente 1.400 millones de anticipo para Cataluña, con el indecente argumento de asfixia económica. Y mientras Sánchez mantiene su...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

domingo, 24 de marzo de 2019

ESPERPÉNTICO GOVERN

                        Es incomprensible que un pueblo culto, maduro, tolerante y desarrollado, como el catalán, soporte un minuto más al esperpéntico Govern dirigido por Torra y teledirigido desde el exterior por el prófugo Puigdemont; un impresentable Govern que hace oposiciones de forma permanente para acabar en el banquillo de los acusados al igual que hizo el anterior, dirigido por el fugado…. esperemos, que, al menos, Torra no tenga la cobardía de su Jefe y, a diferencia de él, tenga la gallardía y la mínima honestidad de comparecer ante la Justicia cuando llegue el momento, que llegará, para responder de sus irresponsabilidades y esperemos que no abandone a sus consellers, como hizo su jefe, para que sean sólo ellos quienes apechuguen con las consecuencias de su irresponsabilidad compartida mientras él se ríe de todos ellos y además pretende dirigirlos desde su refugio fuera de Cataluña y de España. En efecto, al final, el esperpéntico Torra, que sabía desde hacía varios días que el Defensor del Pueblo catalán recomendaría quitar los lazos y lo ocultó para aparentar indecente firmeza ante los suyos y ante el Gobierno de España, burlándose del Estado e incluso del independentismo, una vez más, ha tenido que claudicar ante la disyuntiva de ser inhabilitado, aunque sustituyendo los lazos amarillos por otros símbolos alternativos, anunciando medidas para respetar “la libertad de expresión”, mientras las consellerías colocaban símbolos para engañar en definitiva a la autoridad electoral. Por su parte el Tribunal Supremo trabajará en Semana Santa para acabar el juicio sobre el “procés” en mayo y finalizar la vista oral antes del 26-M, mientras la Guardia Civil confirma que vio al actual President en la nave donde se ocultaban diez millones de papeletas del 1-O, y denuncian el odio que sufrieron con testimonios como “nos insultaron, nos llamaron asesinos, hijos de puta, fuera fuerzas de ocupación”, “era para tener miedo, se asemejaba a los comienzos del conflicto vasco”, y además denuncian que Puigdemont pidió 11.000 millones a China para la independencia. La realidad es que este “estéril” y bochornoso comportamiento de Torra, buscando de forma esperpéntica cómo burlar la ley y a su vez cómo eludir la inhabilitación tras llevarle la Junta Electoral a Fiscalía y querellarse contra él por desobediencia, frente a la incomprensible pasividad del Gobierno de Sánchez que no dice esta boca es mía en tan grave asunto, genera malestar hasta en su propio Govern, tras pedir la Junta a los mossos que quitaran las nuevas pancartas y lazos de los edificios públicos de la Generalitat, lo que, finalmente han tenido que hacer, sí o sí, como es de ley, seis meses después de que Marlaska dejase el asunto en manos de la Generalitat. Y mientras Torra es increpado en Sabadell por un grupo de CDR, que le echa en cara haberse plegado “a la Justicia española” y haber aceptado la retirada de lazos y esteladas, el grupo antiindependentista Els Segadors del Maresme devuelve al President miles de lazos amarillos, que habían ido retirando de toda Cataluña, depositándolos y amontonándolos en la Plaza Sant Jaume, frente al Palau de la Generalitat, mientras ésta excarcela al hijo de Pujol después de sólo dos meses de haber ingresado en prisión y Fiscalía estudia recurrir la resolución que permite indecentemente al condenado Oriol ir sólo a pernoctar a la prisión…..son las...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

miércoles, 20 de marzo de 2019

SIMPLEMENTE, HACER CUMPLIR LA LEY

                        Mientras la Fiscalía ve “reforzado” el delito de rebelión tras las pertinentes declaraciones de los testigos en el juicio por el totalitario “procés” secesionista, Quim Torra, fiel a su antidemocrático comportamiento, nos obsequia con otra flagrante desobediencia, cuando su obligación como President de la Generalitat ha de ser, simplemente, cumplir y hacer cumplir la ley. Pero, claro, este principio, que es incuestionable en cualquier Estado democráticamente solvente, es discutible incomprensiblemente en España, donde de forma intolerable se es condescendiente con semejantes anomalías democráticas. En efecto, mientras, entre otras, la declaración de Castelví, alto cargo de los Mossos en el 1-O, es determinante para reforzar las acusaciones de que hubo violencia en aquellas lamentables fechas, avalando el presunto delito de rebelión para, al menos, nueve de los doce procesados, con Junqueras a la cabeza, la Junta Electoral Central, acabado el ultimátum al President para que retire de los edificios públicos de la Generalitat las ilegales esteladas y los lazos amarillos en apoyo de los inexistentes “presos políticos”, le sigue dando prórrogas antes de obligarle a retirarlas, sí o sí, como se haría en cualquier Estado democrático de forma incuestionable e inmediata. La Junta Electoral, que tras rechazar el recurso de Torra le había concedido 24 horas para quitar los citados símbolos separatistas y le había apercibido de “consecuencias penales”, como la inhabilitación, si no limpiaba ya los edificios públicos y, por tanto, desobedecía, tiene que soportar, como todos los ciudadanos españoles, incluidos los que viven en Cataluña, que el totalitario President lleve al límite su pulso al Estado, diciendo ahora su Govern que se ceñirá a lo que diga el Defensor del Pueblo catalán (el Sindic de Greuges), o lo que es lo mismo, pasándose por el arco del triunfo las resoluciones de la máxima autoridad en periodo de elecciones como es la Junta Electoral Central. En román paladino, que mientras todos los partidos políticos, todas las instituciones gubernamentales del entramado institucional del Estado y, por supuesto, sus gobernantes del rango que sean, al igual que todos los ciudadanos, tienen que acatar y cumplir las directrices emanadas de la Ley por los órganos pertinentes establecidos, si no quieren incurrir en delito, la Generalitat de Torra y su Govern, por arte de magia o simplemente por la gracia de Dios, como en los viejos tiempos, tiene bula especial para saltarse a la torera todo aquello que considere oportuno, actuando con el indecente estilo de cualquier gobernante fascista de pacotilla. Y mientras la Junta Electoral se dispone a acudir al Fiscal, no vaya a ser que si no se actúa con el más escrupuloso y delicado acierto y con todas las garantías democráticas, al final sea el propio Estado, ya acusado indecentemente de “opresor” por estos golpistas de tres al cuarto, quien encima apechugue con las consecuencias, cada vez crece más la indignación de cara a una campaña electoral en la que los españoles, incluidos los catalanes, nos jugamos el ser o no ser en el futuro próximo del Estado Español, uno de los más viejos Estados Modernos de Europa sin lugar a dudas. En cualquier otro Estado europeo, mucho más joven que el de España (históricamente casi todos lo son), este tipo de.....(sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).

domingo, 17 de marzo de 2019

PARLAMENTO ULTRA-RENOVADO

                        Aunque no tanto de ideas, pero sí de caras, se perfila un nuevo Parlamento ultra-renovado a tenor de las candidaturas que, bien con primarias domesticadas o bien sin ellas, los líderes de los partidos políticos van imponiendo en sus filas, a lo que se suma la más que probable aparición de un nuevo grupo parlamentario, el de Vox. En definitiva, se configura un nuevo Parlamento con mayoría de caras nuevas que pone en evidencia la renovación política generacional, pues, bien sea por la necesidad de “fichajes-estrella” o bien por el empeño de los nuevos liderazgos de conformar grupos parlamentarios dóciles y afines a nivel interno personal, la intensa renovación de caras parlamentarias está servida. En el PSOE, aunque Sánchez choca con Susana Díaz, su enemiga íntima, para imponer las listas en Andalucía, le impondrá entre otros, sí o sí, el “número dos” en la lista de Sevilla, recrudeciendo su particular guerra con la andaluza, y, decidido a purgar el susanismo, mandará al Senado a Antonio Pradas, hombre fuerte de la ex Presidenta, si prospera la negociación al respecto que pretende el PSOE-A, mientras que Ferraz, en otros lares díscolos con el sanchismo, también exige dejar fuera al turolense Urquizu aunque Lambán, el líder socialista aragonés, se resista a ello. Por su parte en el PP, Casado se libra de los sorayistas en la renovación de candidaturas y fulmina al marianismo, revolucionando sus listas, al relegar en las candidaturas a los últimos fieles a Rajoy (Montoro, Ayllón, Margallo, Maíllo, Jorge Fernández….), mientras recupera a otros, como Álvarez de Toledo, azote de Rajoy y cercana a Aznar, que rechazó ser número dos por Madrid para liderar la lista de Barcelona como contrapunto de Inés Arrimadas para intentar recuperar peso en Cataluña, y ficha a otros como Juan José Cortés, el padre de Mari Luz, quien afirma “me llamaron otros pero el PP es un partido de Gobierno, útil”; sin duda, una revolución de listas “sin complejos” como respuesta clara de renovación, ya que del equipo de Rajoy sólo repetirán Pastor, Tejerina y Catalá, aunque es cierto que Casado compensa con la lista europea a ex ministros de Rajoy como Zoido, García-Margallo y Dolors Montserrat, o a otros pesos pesados, como el ex portavoz del grupo parlamentario popular, Rafael Hernando. Así, mientras Sánchez pretende liquidar en sus filas el “susanismo” y el “anti-sanchismo” en general, Casado liquida el “sorayismo” y el “marianismo” en general, con el objetivo común de, imponiendo a sus fieles, conformar un Parlamento renovado y sin crítica interna alguna, para, en todo caso, consolidar definitivamente sus respectivos liderazgos internos y seguir al frente de sus respectivos partidos bien “en el Gobierno o en la oposición”. Por otro lado, ambos se aferran al voto útil….. y, mientras en...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

miércoles, 13 de marzo de 2019

EQUILIBRISMOS ELECTORALES

                        Según la última encuesta de GAD3, probablemente la empresa demoscópica más acertada en anteriores procesos electorales, la fragmentación del centro-derecha y el hundimiento de IUPodemos, permitiría a Pedro Sánchez volver a gobernar reeditando su pacto con Podemos, independentistas y etarras, ya que la suma PP-Cs-Vox se quedaría a 15 escaños de la mayoría absoluta; los resultados, según el sondeo, serían: PSOE 30´6% de votos y 134 escaños, PP 22´1% y 87, Ciudadanos 13´2% y 38, Vox 12´1% y 36, IUPodemos 11´8% y 30, y otros el 10´2% de votos y 25 escaños. Y según NCReport, en la Comunidad Valenciana, donde la izquierda estaría tan dispersa como la derecha y donde no hay candidaturas independentistas, curiosamente sucedería lo contrario ya que el PP recuperaría el Govern aliándose con Ciudadanos y Vox, a causa de la presunta caída de Compromís y el desplome de Podemos, que irán por separado a los comicios, mientras irrumpiría Vox en el Parlament con ocho escaños; los resultados serían PSOE 23´9% y 27 escaños, PP 23´6% y 27, Ciudadanos 15´6% y 16, Compromís 14´3% y 15, Vox 9´8% y 8, y UPodemos 8´2% y 6. Lo cierto es que, al margen del mayor o menor acierto demoscópico, la gobernabilidad del Estado y de muchas CCAA depende de un hilo y, por tanto, cualquier error estratégico, cualquier metedura de pata, por parte de cualquiera de las candidaturas puede dar un vuelco inesperado a las expectativas de unos y de otros, no ya en términos de izquierda-derecha sino dentro de cada uno de dichos ámbitos ideológicos, donde cabe aplicar la teoría de los vasos comunicantes pues a mayor fracaso de Ciudadanos o Vox, mayor éxito del PP, y a mayor fracaso de IUPodemos, mayor éxito del PSOE, ya que se juega a una especie de bipartidismo a varias bandas con populares y socialistas como protagonistas del mismo, y, al final, con los secesionistas y nacionalistas como árbitros de la gobernabilidad del Estado si es que los españoles no lo remedian en las urnas o los partidos indiscutiblemente democráticos son incapaces de ponerse de acuerdo. Y, en semejante tesitura, en el ámbito de la izquierda, mientras Pepu Hernández gana las primarias del PSOE en Madrid, con el 64% de apoyos en las primarias para la alcaldía, y Susana Díaz acepta a los ministros sanchistas, aunque se reserva una cuota de candidatos, la plataforma electoral de Errejón fagocita a Podemos y los críticos de Colau se van con ERC y “hunden” a Iglesias, generando una profunda crisis en los comunes, una de las marcas podemitas, incluyendo en el pacto el Ayuntamiento de Barcelona. Y en el ámbito de la derecha, mientras PP y Vox tienen cierta tranquilidad hasta el momento en la conformación de sus candidaturas, Ciudadanos se mete en un berenjenal de imprevisibles consecuencias, pues tras detectarse un pucherazo en la candidatura de Silvia Clemente, destacada militante del PP y apoyada por Rivera para encabezar la lista de Castilla y León, tras la impugnación por fraude del candidato perdedor, Francisco Igea, que se alza con la candidatura, aparecen nuevas impugnaciones en las primarias naranjas por parte de militantes en Madrid, Murcia y Cantabria, sufriendo Rivera su primer revés interno con la derrota de su fichaje-estrella castellano-leonés, arrebatado al PP, mientras Ciudadanos en Navarra compartirá lista con UPN y PP para no dispersar el voto constitucionalista…. Así.... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

domingo, 10 de marzo de 2019

VIOLENCIA MANIFIESTA

                        Las declaraciones de los testigos en el Tribunal Supremo por los graves incidentes provocados por el “procés”, salvo la de los acusados que hablan de ambiente festivo y pacífico, ponen de manifiesto que sí hubo violencia manifiesta. Una violencia que además se sigue produciendo en estos momentos, pues a pesar de que el Alto Tribunal ha accedido a permitir que no se difunda durante su declaración la imagen de la letrada judicial, retenida en su día en la Consejería de Economía, las terminales del independentismo se permiten difundir el rostro de Montserrat del Toro, que así se llama dicha letrada, para intimidarla por haber declarado todo lo que padeció durante aquellas 17 horas de asedio, que todos vimos, en la citada Consejería, cuando tuvo que pedir un helicóptero, huir de la turba por los tejados, esconderse en un teatro y salir protegida por agentes de paisano. Por tanto fue acosada de forma violenta entonces, y lo es ahora además por emitir en el juicio un testimonio clave como víctima directa del secesionismo totalitario. La realidad es que Montserrat, entre otros testigos, desmiente el “ambiente festivo” del que hablan los protagonistas del secesionismo, declarando que, para salir de la asediada Consejería donde acudió para hacer su trabajo, tuvo que pedir un helicóptero aquel lamentable 20-S, afirmando literalmente “tuve miedo cuando vi que había un tumulto de gente; era imposible salir; la gente estaba aplastada contra el cristal; gritaban, no saldrán” y, desmontando con ello el falso pacifismo de los Jordis y compañía, añade que pidió al juez: “me tenéis que sacar; no puedo salir”. Si esto no es violencia, que venga Dios y lo vea, teniendo claro que violencia no es sólo pegar palizas o asesinar. Violencia que también ratifican otros testigos como Trapote, Jefe de la Policía en el referéndum, al declarar que “estaba todo perfectamente organizado, sabían cómo tenían que hacer la resistencia, hacían cadenas humanas, nos agredían, nos empujaban”; o, como Gozalo, Jefe de la Guardia Civil, declarando que “en las Casas-Cuartel se sufría un acoso por parte de la ciudadanía con apoyo de algunas instituciones” y que “la oposición en el 1-O era violenta y manifiesta”; o, finalmente, como Castellví, comisario de los Mossos, manifestando que “éramos conscientes de que se podía producir una escalada de violencia, pero no de la magnitud que hubo el 1-O” y “advertimos al President del riesgo”, declaración que, en este caso, le ha valido hasta que se le haya tenido que poner protección por declarar bajo juramento semejantes verdades, pues, al tratarse de un ex alto cargo de una institución autonómica no les basta con descalificar cínicamente su testimonio con el indecente argumento de que todo lo que llega de la maldita España es podredumbre y mentira. En definitiva, por mucho que se quiera suavizar la gravedad de los hechos, una violencia manifiesta y organizada desde las propias instituciones, lo que la hace más grave e intolerable, advertida por los propios Mossos pero ignorada la advertencia por el Govern de la Generalitat, que, por acción u omisión, se erigía en el verdadero responsable de la misma. Entretanto, ahora, mientras el..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/). 

miércoles, 6 de marzo de 2019

UNA GUERRA SUCIA

                        Disueltas las Cortes y, “de facto”, en plena campaña electoral, el líder de la oposición, Pablo Casado, acusa al Presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de montar una “guerra sucia” desde Moncloa y le exige la dimisión de su Jefe de Gabinete por un mail en el que pedía a todos los ministerios “argumentos de ataque” al PP y al resto de partidos de la oposición, lo que en Ciudadanos consideran “el colmo de la indecencia”. Por otro lado, Exteriores puso a funcionarios a trabajar al servicio del PSOE sanchista, pidiendo a cargos no políticos del Ministerio que elaborasen iniciativas para que las usara el Grupo Parlamentario Socialista, mientras un alto cargo de la Vicepresidenta Calvo daba la orden de que funcionarios trabajaran para el PSOE, coordinando la Secretaría de Relaciones con las Cortes a los ministerios, lo que los empleados públicos califican de “abuso inadmisible”. Y a todo ello se añaden los decretazos digitales electoralistas en plena campaña electoral y anunciados por Sánchez para hasta la víspera de las elecciones (esperemos que al menos se respete la jornada de reflexión), generando incluso “dudas de constitucionalidad” en determinados expertos constitucionalistas que cuestionan su carácter de “urgencia y necesidad”, requerido en periodo electoral y con el Legislativo disuelto, lo que no respeta el Presidente del Ejecutivo, con lo que la “guerra sucia” de que habla Casado está servida, al extremo de que hasta Ana Pastor, Presidenta del Congreso, sale al paso de ella advirtiendo que “ningún Gobierno puede ir dopado a las elecciones” pues, como siempre ha sucedido, “se tiene que ir en igualdad de condiciones”, mientras Casado, coincidiendo con Pastor, confirma que el PP recurrirá ante la Junta Electoral Central los “decretazos” y la portavoz socialista, Adriana Lastra, perdiendo los papeles una vez más, califica de “hooligan del PP” a la Presidenta del Congreso por haber pedido un informe a los letrados de la Cámara para conocer cómo se ha de proceder ante tan inédito comportamiento del Ejecutivo. Y, ante tamaña perversión democrática e inédito abuso de poder por parte del Presidente Sánchez, el PP se plantea incluso recurrir al Constitucional y pide a la Junta Electoral que prohíba divulgar los insólitos y electoralistas “viernes sociales”, publicitados a bombo y platillo, y que lo haga “por el medio que sea”. En definitiva, una “guerra sucia” intolerable, que atenta contra la higiene democrática, teniendo en cuenta que la Democracia se basa en la división de poderes del Estado (Legislativo, Ejecutivo y Judicial), según el cual, y con arreglo a lo democráticamente establecido, cada uno es ejercido por órganos de gobierno distintos, autónomos e independientes entre sí, conformando la cualidad fundamental de un Sistema democrático saludable. Así pues, es una calamidad democrática la pretensión del Ejecutivo, en este caso, de gobernar en periodo electoral y con las Cortes disueltas mediante decretazos sobre asuntos que no tienen el obligado carácter de excepcionalidad, urgencia y necesidad, como es el caso (pues, salvo inesperadas situaciones imprevistas que pudieran surgir, como una catástrofe por ejemplo, cualquier otra medida puede retomarse tras el corto periodo electoral y por el Gobierno que surja de las urnas), con lo que se estaría..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)

domingo, 3 de marzo de 2019

LOS VIERNES SOCIALES

                        Mientras la tensión entre Sánchez y Rivera estalla en el último pleno del Congreso de los Diputados, que cierra esta turbulenta legislatura entre emociones y lágrimas de muchos de sus miembros (y miembras, no vaya a ser que alguien se enfade), el Gobierno de Pedro Sánchez, fiel a su incoherencia y estrambótica forma de gobernar, inaugura los insólitos “viernes sociales”, una especie de jornadas beneficiosas cargadas de inmensos parabienes a capricho del Ejecutivo, aunque, liquidada la Legislatura y con las Cortes disueltas, entremos en plena campaña electoral y, por tanto, en pleno funcionamiento de la Diputación Permanente, una especie de mini-cámara legislativa a la espera de la constitución del nuevo Parlamento que surja tras las elecciones. En definitiva, un periodo de transición en el que por mero sentido común e higiene democrática sólo cabría atender aquellas cuestiones de excepcionalidad a la espera de lo que decidan inminentemente los ciudadanos en las urnas. Pero Pedro no lo entiende así, frente a lo que siempre entendieron y respetaron sus antecesores como Jefes del Ejecutivo, tanto socialistas como populares, y convencido de que estos “viernes sociales” le aportarán beneficios electorales (a la hora de votar siempre se tiende a recordar lo último) encima los anuncia a bombo y platillo para que entendamos todos la bonanza de su proceder frente a la maldad de sus contrincantes políticos, que claman al cielo ante tanta osadía de dudosa lealtad democrática. En efecto, mientras los demás partidos habrán de esmerarse en presentar sus propuestas electorales en la campaña, Sánchez, aprovechando su condición de Presidente de Gobierno, añade este plus sustancial de ventaja a su partido, el PSOE, repartiendo el insólito maná electoral como la mejor forma de programa de cara a las elecciones, inaugurando un precedente peligroso que, sin duda, utilizarán otros gobernantes en el futuro. Así, mientras el PSOE sanchista, tiene media campaña hecha y Pedro se jacta de éstos inadecuados “viernes sociales” de campaña con medidas sociales e ideológicas, que habrá de gestionar el futuro Gobierno, ya sea suyo de nuevo o de otra opción política, el resto de contrincantes van soltando sus propuestas programáticas. El PP, principal partido de la oposición, promete prohibir la exigencia de lenguas cooficiales para empleos públicos, una ley para acabar con la discriminación del castellano, crear un Ministerio de Familia con competencias en Igualdad, impulsar que el castellano sea la lengua vehicular y el catalán la opcional, y una gran rebaja fiscal en favor del ahorro de los jubilados. Y Sánchez en su primer viernes social aprueba decretos sobre el alquiler (ampliando de tres a cinco años la duración de los contratos y limitando la subida durante los mismos al IPC), igualdad (obligando a las empresas a registrar sus tablas de sueldos para vigilar que no haya desequilibrios entre sexos) y paternidad (extendiendo el permiso de paternidad de las actuales cinco semanas hasta las dieciséis en tres años). Y, mientras cuela un préstamo de 13.800 millones para pagar las pensiones, al Presidente de Gobierno le importa un rábano que sus “decretos electorales” dejen una hipoteca de 19.000 millones más, pareciendo que lo importante para él es hacer campaña electoral con el Consejo de Ministros y con el dinero público (ya dijo su Vicepresidenta Calvo que el dinero púbico no era de nadie), mientras Bruselas avisa a España por la deuda desorbitada. Entretanto...... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)