El “caso Rato” va para
rato a tenor de la movida y las especulaciones desatadas al efecto. Hay
argumentos para todos los gustos. Mientras Hacienda justifica por “eficaz” su
actuación en el “caso Rato”, afirmando en el Congreso el director de la Agencia
Tributaria, Santiago Menéndez, que actuó con “sorpresa e inmediatez” y que ya
se han producido otros 88 registros desde 2014, se especula con que la
actuación de Hacienda deja el caso en una especie de limbo judicial y que el
manejo del mismo deja a Montoro en difícil situación en el Gobierno, en tanto
que toda la oposición centra las críticas en Hacienda; por su parte, Fiscalía
se desdice y niega ahora vínculos con Bankia. Un embrollo de padre y muy señor
mío, cuando lo que se debiera dilucidar es si Rato delinquió o no y, en caso
afirmativo, que apechugue con las responsabilidades que le correspondan. Que si
zonas oscuras de su detención, nada convencional; que si irregularidades,
intrigas y chivatazos; que si los fiscales cursaron la denuncia sin informar a
sus superiores; que si Hacienda ocultó que Anticorrupción consideraba aun poco
madura la investigación; que si los fiscales jefe de Madrid “no daban crédito”
al ver al ex vicepresidente detenido y exigieron su inmediata libertad; que si
Rajoy despreció por “inconsistentes” las primeras filtraciones; que si el
Ministro de Justicia avisó a Rajoy del registro y éste se sorprendió cuando le
telefoneó para comunicarle la inminente intervención de la Agencia Tributaria;
que si hay cruce de acusaciones por airear un escándalo que causa “un daño
demoledor” al Gobierno y al PP; que si el juez plantea a fiscalía quitar el
pasaporte a Rato, que si …. Al final,
Montoro estalla contra Rato, quien pierde todos... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)
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