Algunos medios ya dan
por hecha la consolidación del “plan de Sánchez” para ser investido en segunda
votación como Presidente del Gobierno, por lo que sólo hay que esperar a que
Rajoy se estrelle en su investidura. Los 167 “síes” que suman PSOE, Podemos,
PNV e IU son suficientes para investirle, dándose por hecho que los
nacionalistas le apoyarán a cambio de que se mantenga el Concierto Económico
Vasco (un privilegio que habría que suprimir) y que los independentistas
catalanes se abstendrían para facilitar más “síes” que “noes” en la votación.
Sólo falta pues conseguir el “sí” de Pablo Iglesias, por lo que Podemos y el
PSOE intentan salvar obstáculos para lograr un pacto, como el acuerdo que
resuelve las diferencias para formar grupos en las Cortes, en el que, mientras
Podemos acepta finalmente formar un solo grupo en el Congreso en vez de los
cuatro que pretendía (era excesivo), a cambio los socialistas apoyan la
formación de dos grupos podemitas en el Senado, uno de la organización nacional
y otro el de sus aliados territoriales (menos da una piedra), aunque, al no
poder cumplir Iglesias su promesa de dar grupo propio a sus socios en el
Congreso, se ha generado un malestar en la coalición, al extremo de que
Compromís se fractura y pide constituirse de forma independiente,
inscribiéndose Podemos con 64 diputados tras perder a cuatro de Valencia, en
tanto que Iglesias cede poder a sus aliados para evitar el caos y acepta que En
Comú Podem y En Marea se alternen en las portavocías con él mismo y con
Errejón. Como ven una lucha por el poder, al igual que el de Sánchez después de
perder estrepitosamente las elecciones, mientras el Rey sondea la opinión de
los partidos sobre la reforma de la Constitución, imposible de llevar adelante
sin el concurso del PP y sus 123 escaños, que, como otras tantas reformas
imprescindibles, si sería posible con un gran pacto gubernamental PP-PSOE-C´s
que los socialistas rechazan. Y entretanto, dice... (sigue leyendo en
Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)
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