Empezamos bien la
precampaña electoral. Nuestros partidos discrepan hasta en la factura electoral,
convirtiéndola en la primera batalla partidista del 26-J: Podemos propone
gastar más en su campaña y que el resto reduzca hasta un 75% al proponer en la
reunión de hoy con todas las formaciones que el tope de gasto sea de tres
millones, más de lo que invirtió en el 20-D, mientras PP y PSOE quieren
recortar un 30% el presupuesto pero no renunciar al “mailing” de cada partido
como reclama Ciudadanos, que defiende un ajuste del 50%, lo que obviamente
beneficiaría a las siglas con menos escaños. Como ven, ya desde el inicio y en
asuntos organizativos, que no programáticos, cada partido va a lo suyo, aunque
esperamos que, al menos en esto, sean capaces de llegar a un consenso que
satisfaga a todos. Entretanto, Podemos y PSOE inician la lucha por la hegemonía
de la izquierda; los socialistas sitúan a los emergentes en el comunismo (ya era
hora en vez de soñar con pactar con ellos y rebatirlos) e Iglesias ignorará a
Sánchez, aunque sostiene que si le gana en las elecciones y puede formar
gobierno con el apoyo socialista propondría a Sánchez como su vicepresidente de
gobierno (¡que los dioses nos cojan confesados!). Por su parte el PP empuja a
Rajoy a no esquivar el debate a cuatro, por lo que altos cargos del partido
intentan vencer sus reticencias, aunque como alternativa se plantean encuentros
cara a cara con los otros candidatos (el debate a cuatro, tras como tienen
planteado el cordón sanitario todos los partidos pondría a Rajoy en clara
desventaja y se convertiría en una especie de todos contra uno). Así andan
nuestros ilustres candidatos en este arranque electoral, mientras condenan a
los votantes a una ausencia de propuestas programáticas concretas que,
contrastadas y razonadas, puedan ilustrarles a la hora de emitir su voto.
Esperemos que durante la campaña al menos sean capaces de exponer con claridad
sus recetas mágicas, razonables y razonadas, para sacar definitivamente a
España de la crisis y desatascar los grandes retos que nuestro país tiene
planteados no sólo en el terreno económico y social, sino también en el terreno
político-estructural, con graves amenazas como el independentismo o los
populismos radicales antisistema, así como el terrorismo yihadista, que
amenazan seriamente nuestra convivencia futura en paz, libertad y progreso
dentro de nuestro sistema democrático. Graves asuntos que de entrada requieren
un gobierno sólido y con... (sigue leyendo en
Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)
No hay comentarios:
Publicar un comentario