Sin duda alguna muchos
de los comportamientos políticos e institucionales que se dan en España serían
incomprensibles e inaceptables en cualquier otro Estado democrático del mundo.
Por ejemplo, mientras un gobierno, surgido gracias al apoyo coyuntural de
secesionistas totalitarios y populistas radicales, intenta recabar el respaldo
parlamentario permanente para mantenerse en el poder, una de las regiones más
prósperas, Cataluña, se desangra social, política y económicamente a causa del
manifiesto desgobierno independentista territorial, con quien el Gobierno
central se empeña en dialogar, sí o sí, para dar así la imagen de cierta
estabilidad en sendos ámbitos institucionales. Y al final, la Cataluña real,
que no la ficticia inventada por los secesionistas, pone en evidencia el
colapso insoportable provocado por un Govern irresponsable y antidemocrático,
mientras el Gobierno del Estado, en vez de poner de manifiesto tamaña
irresponsabilidad, opta por aprovechar el caos presionando a los soberanistas
para que le apoyen a la hora de desbloquear
los Presupuestos Generales y disimular así su propia inestabilidad. Y,
obviamente, la suma de dos irresponsabilidades conduce inevitablemente al caos.
En efecto, la Cataluña real, sin poder soportar más la situación de
desgobierno, evidencia el colapso del secesionismo con médicos, bomberos,
profesores y estudiantes en las calles, llevando sus protestas ante el
Parlament por los recortes de la Generalitat, mientras que JxCat les responde
que “no se distraigan” de reclamar la independencia y Sánchez les ofrece frenar
los recortes con los Presupuestos, cuando lo razonable sería alertar a todos
los catalanes, independentistas o no, de que durante seis años de gobiernos
secesionistas irresponsables las listas de espera se han disparado en Cataluña
al primer lugar en tasa de pacientes por cada mil habitantes, siendo la
Autonomía que menos invierte en Sanidad y Educación de toda España (la
Generalitat dedica sólo un 23´3% de su Presupuesto a la salud y un 17´3% a la
enseñanza) a pesar de ser uno de los territorios españoles más próspero, rico y
emprendedor. Pero claro, no es lógico esperar lo contrario con un Parlament que
sólo ha aprobado en este año tres reformas legislativas, entre ellas, la que permitía
votar al prófugo Puigdemont, ex President de la Generalitat, quien desde Bélgica ordena lo que se ha de
hacer a su sucesor Torra, que se esconde ante el avance de esta triste Cataluña
real, desapareciendo de la agenda pública y limitándose a difundir la foto de
una reunión de trabajo con sus consejeros, mientras ahora culpa a ERC (el partido
secesionista de izquierdas, que le sostiene en el poder) del recrudecimiento de
las protestas sociales, mientras JxCat (el invento electoral secesionista de
derechas de Puigdmeont, con la corrupta CDC y PDeCat como partidos
protagonistas) desprecia a los manifestantes por no centrarse en lo “esencial,
la independencia”, y mientras el Gobierno de España vincula la protesta en
Cataluña a la falta de Presupuestos Generales del Estado, que no puede..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista,
http://jorgecremades.blogspot.com.es/)
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