DIRECTOS A LA RUINA

                     Cada vez son más quienes temen y vaticinan que con las políticas que aplica este gobierno de coalición social-comunista, al final, los españoles, en todos los sentidos, vamos directos a la ruina económica, social y política si en las decisiones gubernamentales sigue predominando el radicalismo populista de Podemos y el secesionismo radical de ERC y EHBildu, los pilares en que se apoya Sánchez para mantenerse en el poder. En efecto, un IPC desbocado ya castiga duramente a las familias y además desborda al Gobierno en sus previsiones presupuestarias, pues la inflación ya alcanzó el 4% en septiembre, su máximo desde 2008, mientras los precios meten presión para el alza a pensionistas y funcionarios que ven peligrar su poder adquisitivo (de nada vale subir salarios y pensiones y alardear de ello si, por otro lado, los precios suben por encima de dicha subida, pues aunque suban tus ingresos tienes menos capacidad de compra por razones obvias) si no se les compensa del alza de precios “in crescendo”, pues sólo la escalada de la factura de la luz alcanzará hoy mismo un nuevo record histórico y registrará un pico de 221 euros MWh a las nueve de la noche, con lo que este aumento desmesurado de los precios y a su vez la previsión a la baja de crecimiento por parte del INE desbaratan inexorablemente las previsiones optimistas del minoritario y mal avenido Gobierno de Sánchez, cuando dos de sus ministros, el socialista Escrivá y la comunista Díaz, no tienen ya recato alguno en entrar a la gresca pública, incluso en las ruedas de prensa, exhibiendo públicamente sus diferencias y descalificaciones al extremo de que el titular de Seguridad Social reprocha a la titular de Trabajo que critique sus propuestas sin leerlas. ¿Podemos seguir así mucho más tiempo sin riesgo de ir a la ruina económica, si es que ya no estamos instalados en ella? Esa es la cuestión. Entretanto el gas sube un 400% mientras la luz marca otro record histórico y el precio del MWh del combustible roza hoy los 80 euros y la electricidad ya roza los 190 en esta triste y vapuleada España que extrema su dependencia energética de Argelia después de perder el suministro de 19 buques gasísticos por la competencia de los países asiáticos. Y mientras Sánchez avisa a sus socios de que “en octubre habrá Presupuestos Generales del Estado”, su ministro Escrivá quiere subir un 10% el empleo, aunque no dice cómo, entre los 55 y 74 años para pagar el IPC pues cree que estimulando el trabajo en esta franja de edad (¿por qué no en la franja de 18 a 40 años?) se podrá financiar el incremento de las pensiones, mientras consigue “in extremis” un principio de acuerdo para prorrogar los ERTE hasta finales de febrero tras ceder ante los empresarios y mejorar las exenciones fiscales a las empresas. En definitiva, políticas de..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)