CONVULSIÓN POLÍTICA

                         Cuando la gobernabilidad, en casi todos los niveles, se sustenta en la mediocridad, la miopía política y los intereses particulares partidistas sólo cabe esperar inestabilidad política, ruina económica y alarma social. Es lo que sucede en España desde el Gobierno de coalición hasta el de muchas CCAA pasando por el de no pocos ayuntamientos, en los que sólo cabe el regate corto, la pillería y la conveniencia de intereses particulares a corto plazo. En efecto, sin habernos repuesto del sorprendente apoyo de Podemos a la inmunidad de Puigdemont mientras el PSOE votaba en contra de la misma, como es lo sensato y razonable, Ciudadanos rompe la baraja de su alianza con el PP en Murcia, presentando una moción de censura junto al PSOE, y desbarata el mapa político de toda España, ya que Ayuso, con la mosca detrás de la oreja, se adelanta a otra presunta moción en Madrid y convoca elecciones anticipadas para el 4 de mayo, mientras en Castilla y León el PSOE presentaba otra moción de censura (parece que aquí Cs no se suma) contra el gobierno del PP y la oposición madrileña (PSOE y Más Madrid) hacía lo propio con sendas mociones de censura con la intención de paralizar el adelanto electoral que acababa de decretar Ayuso. En definitiva, un terremoto o convulsión política en toda regla al entregarse Arrimadas al PSOE para ganar para su partido la primera presidencia regional, la de Murcia, a cambio de entregar al PSOE el gobierno de la ciudad de Murcia. Arrimadas se entrega al PSOE y Ayuso los reta con elecciones para que los madrileños decidan si frenan o no el asalto de la izquierda al poder regional sin pasar por las urnas. Una arriesgada apuesta de Arrimadas ya que el movimiento auspiciado por ella desestabiliza los acuerdos en Castilla y León, Andalucía y en la capital de España, aunque en estos lugares parece que, de momento, Ciudadanos no está por la labor de romper la baraja y prefieren mantener el pacto con el PP. Por su parte Casado busca olvidar el fiasco catalán y confía en aprovechar la debilidad de Ciudadanos y la fortaleza de Ayuso para lograr una victoria que apuntale definitivamente su liderazgo. Y en medio de esta convulsión política aparece un verdadero embrollo jurídico ya que la Mesa de la Asamblea de Madrid, que debiera quedar disuelta tras el adelanto electoral, tramita las mociones de censura del PSOE y Más Madrid, presentadas después de la decisión de la Presidenta de adelantar elecciones, abriendo con ello una verdadera batalla judicial ya que, dichas mociones, al ser presentadas en tiempo y forma en Murcia, han impedido al Presidente murciano adelantar los comicios, pero habiendo sido presentadas después y precipitadamente las de Madrid pretenden lo propio aunque, en principio, con poca solvencia jurídica. En román paladino, en Murcia el PP se durmió en los laureles y en Madrid se adelantó a lo que presumía que iba a ser lo propio. En Murcia, salvo sorpresas de última hora, los populares serán desalojados del poder regional y de la capital, mientras en Madrid habrán de ser los ciudadanos en las urnas quienes decidan si hacen lo propio o no. Moncloa propicia el giro estratégico de....... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)