LA LEY NO BASTA

                    Como era de esperar Torra, que no iba a desperdiciar la ocasión, recibe a Sánchez en el Palau de la Generalitat con todos los honores y de igual a igual, como si se tratara de una reunión bilateral entre dos Jefes de Estado o de Gobierno; en definitiva, un simulacro de cumbre entre Estados organizado por la Generalitat, que algunos consideran como la habilitación o el blanqueo por parte de Sánchez del inhabilitado Torra aceptando este teatro que le exige el secesionismo para apoyar los Presupuestos y dar vida a la Legislatura. La realidad es que el Presidente es recibido por el President con un apretón de manos debajo de una pancarta “por la libertad de expresión” y pasa revista a una formación de los Mossos vestidos “de gala” para un recibimiento propio de un Jefe de Gobierno de un Estado extranjero de visita en Barcelona, al que Sánchez corresponde manifestando “he venido hoy con profundo respeto y emoción”, para después, entrando ya en materia, prometer más presupuesto e inversión para Cataluña (más de 4.000 millones), pacto fiscal y financiación para los Mossos, potenciar TV3 y la escuela en catalán y apoyo a las “embajadas”; aceptar formar ya este mismo febrero la mesa de negociación con los secesionistas y encabezarla junto al President inhabilitado; ofrecer el traspaso de competencias pendientes a la Generalitat y reducir litigios; y rematar su visita asegurando en una inédita rueda de prensa que “la ley no basta” para Cataluña, pero olvidando que, siendo cierto que para resolver problemas políticos no basta la ley (susceptible de ser derogada y cambiada con las mayorías, si se cuenta con ellas, y los procedimientos establecidos), ésta, es decir la ley, ha de ser respetada y acatada mientras esté vigente, a diferencia de lo que pretende y hace el secesionismo con Puigdemont, Torra y Junqueras a la cabeza, asunto por el que están encausados, fugados o condenados. En efecto, ante tanta generosidad y comprensión por parte de Sánchez, no hubiera estado de más recordar a Torra que cualquier negociación ha de tener en cuenta previamente el acatamiento estricto a la legalidad vigente y a los Tribunales de Justicia, no tratando asuntos que, siendo ilegales (salvo que se conviertan en legales en el futuro), no dependen ni siquiera del Gobierno….. así no hubiera dado pie a Torra para manifestar inmediatamente que el mediador es obligatorio para la mesa de diálogo, o que la autodeterminación y la amnistía a los presos políticos, que no políticos presos como dicen los secesionistas, no pueden ser moneda de cambio de nada ya que dichos supuestos, al no estar contemplados en la legalidad democrática vigente, ningún gobierno tiene la potestad de concederlos en un Estado de Derecho democrático como es el caso; una realidad palpable que, antes o después, se hará tozuda, pues llegará el momento en que el Gobierno tenga que aparcar el paripé y el postureo para decir al secesionismo que no, por lo que los secesionistas habrán de abandonar su actual totalitarismo para encauzar sus proyectos dentro del marco legal establecido. Entretanto los Jordis abren..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)