Mientras De Guindos
facilita a Rajoy una remodelación del Gobierno, pues, tras lograr el apoyo del
Eurogrupo, el Ministro de Economía será nombrado próximamente Vicepresidente
del BCE, con lo que España volverá seis años después al núcleo duro de decisión
de la política financiera europea, gracias al apoyo de Francia y Alemania,
poniéndose de manifiesto que Europa vuelve a confiar en España, y, mientras el
propio De Guindos dice que, por tanto, dejará el Gobierno “en los próximos
días”, la desastrosa política lingüística que se viene practicando en España
desde hace décadas se extiende como un nubarrón en algunas Comunidades
Autónomas bilingües, dándose la paradoja de que los alumnos de dichos
territorios vean amenazada su formación lingüística en una de sus dos lenguas
oficiales, en este caso en el castellano o español (al ser lengua común en toda
España), lo que al final les convertiría en verdaderos analfabetos en lo
referente al conocimiento de su propia lengua (una de las tres primeras más
habladas en el mundo). Al final, los gobernantes autonómicos se sienten más
dichosos practicando idénticos métodos que en su día practicaba el franquismo,
en aquel caso, marginando la lengua vernácula del territorio y en favor de la
lengua común….y ahora, al revés. Un desastre se mire como se mire. El Gobierno
de España, aunque promete un 25% de castellano en Cataluña y Méndez de Vigo
asegura que cumplirá con la sentencia del Constitucional, que impide la
exclusividad del catalán, se decide por no cambiar el modelo educativo y,
aunque se dispone a defender el español, no sabe cómo hacerlo, consciente de
las dificultades para conseguirlo, y busca contra reloj la forma de aplicar el
español también como lengua vehicular, mientras los expertos dudan de que haya
tiempo y descartan la posibilidad de incluir una casilla específica en las
matriculaciones para que los padres puedan elegir la lengua principal en la que
estudien sus hijos. Y, mientras el Gobierno “garantiza” que el castellano será,
como el catalán, vehicular en Cataluña, el PP catalán propone que haya un
colegio español por municipio y le avisa que necesitará al menos un año para
que el cumplimiento de la ley sea eficaz. ¿No sería lo correcto, como en otros
tantos asuntos, que se cumpliera la ley con todas las consecuencias? Cumplir y
hacer cumplir la ley serviría como revulsivo para disuadir a otras CCAA
bilingües que ya andan haciendo pinitos progresivamente en la marginación del
castellano en sus territorios. No extraña pues que, por ejemplo, miles de
personas en Baleares se manifiesten en el centro de Palma contra el decreto del
gobierno autónomo que obliga a los médicos de las Islas a saber catalán y por
ello reclaman “más sanidad y menos política”, conscientes de la ofensiva contra
el castellano…. Pero, ya ven, es preferible desterrar a una eminencia de la
Medicina si no ejerce su ciencia en “catalán”, para favorecer a otro médico
mediocre si éste, para coger el bisturí, se expresa en este idioma…..si sólo.......(sigue leyendo en
Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/)
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