SUIZA EXONERA A JUAN CARLOS I

                     La campaña torticera contra la Monarquía aprovechando las presuntas fechorías del anterior Jefe del Estado, Juan Carlos I, debería hacernos reflexionar seriamente, pues una cosa es que se investigue judicialmente a un ex Jefe del Estado, tal como se está haciendo, y otra bien distinta es que se utilice dicha investigación, como algunos pretenden, para cargarse la forma de Jefatura de Estado que han elegido los españoles, es decir, la Monarquía Constitucional, tal como eligieron en otros países tan democráticos y desarrollados como Reino Unido, Noruega, Dinamarca o Suecia por ejemplo. Sin ir más lejos, en Francia, donde la forma de Estado es la República, el anterior Jefe de Estado, Nicolás Sarkozy, ha sido condenado a tres años de prisión por corrupción y tráfico de influencias, sin que ello haya supuesto menoscabo alguno para el régimen republicano ni para su actual Jefe de Estado. ¿Por qué en España no sucede lo que debiera ser de sentido común y diferenciar la conducta concreta personal de un determinado Jefe de Estado de la propia Institución? Es la trampa que usan los republicanos en España y que no usan los monárquicos en Francia para minar la forma de Jefatura de Estado elegida por sus ciudadanos, sin tener presente que ambas formas de Estado son perfectamente democráticas y a falta de otros argumentos para defender teóricamente una opción o la otra. Y esta reflexión debiera incluso ser más intensa tras conocer que Suiza ha cerrado la causa sobre la donación saudí a Juan Carlos I, que le exonera no sólo a él de su fortuna oculta sino también a los gestores de la misma y a su ex amante, descartando que el Emérito cobrara comisiones por el AVE a La Meca, creyendo el fiscal Bertossa que no hubo blanqueo en la donación de 65 millones del Rey a Corinna Larssen. El carpetazo de la Fiscalía de Suiza despeja de alguna forma el horizonte penal de Juan Carlos, ya más que condenado por algunos “a priori”, pues el fiscal no ve vínculo “suficiente” entre los cien millones que el Emérito recibió de Arabia Saudí y las obras del AVE a La Meca…. Y ya se sabe que la verdad jurídica siempre ha de ser más que contrastada y probada fehacientemente, no bastando ni las apariencias ni las sospechas más  o menos fundadas. Pues bien, Juan Carlos I, sin haber sido condenado por nada todavía, lleva ya demasiado tiempo fuera de España sólo por estar siendo investigado, mientras, tras el archivo en Suiza, PP y Vox apoyan su regreso a España y el ala socialista del Gobierno, que no el ala comunista, quiere que dicho regreso sea con discreción y alejado de la Familia Real y Fiscalía comparte los argumentos de Bertossa sobre la donación millonaria a Larssen. Así las cosas Gobierno y Casa Real ven cerca dicho regreso, por lo que Moncloa y Zarzuela empiezan a dar pasos para preparar la vuelta. Por su parte Juan Carlos I quiere regresar para el 5 de enero y estar en España “una temporada”, trasladando a amigos empresarios su satisfacción por el archivo de la causa suiza y la “ilusión” de celebrar su cumpleaños en nuestro país, lo que contrasta con la frialdad en Zarzuela ante una inminente vuelta a España. No en vano la campaña interesada de desprestigio de la institución monárquica por este asunto ha causado cierto deterioro, pues algunos ya no sólo condenan de antemano a Juan Carlos, sino a la Institución que su hijo Felipe representa ahora de forma impecable. Por cierto, la Justicia, en este caso la española, acaba de..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).