Al final ya sabemos de
qué va el asunto o, al menos, de qué dice Sánchez que va, pues públicamente el
Presidente, tras conceder a ERC la “soberanía fiscal” para Cataluña a cambio de
que invistan a Illa como President, aboga ahora, para justificar el entuerto,
por la “federalización del Estado” sin que el PSOE haya ofertado semejante
propuesta en sus programas electorales, aunque ya se sabe que eso importa bien
poco (tampoco figuraban en los programas electorales ni los indultos, ni la
amnistía, etc etc y ya ven como se han colado) y sin que el Gobierno cuente con
la mayoría amplia que semejante objetivo requeriría, pues ni siquiera cuenta
con la unanimidad de su propio partido. Pero ya ven, al final todo da igual
pues, siempre que nuestro insólito Presidente se garantice la permanencia en el
poder, el precio no importa. En efecto, Sánchez tira por la calle de en medio
para salir del paso como si los diversos modelos de Estados existentes
(unitarios, autonómicos, federales, confederados….) no fueran el producto final
de un largo y complejo proceso histórico de los pueblos en vez de la ocurrencia
coyuntural de un iluminado gobernante, provocando con ello, en este caso, una
reacción en cadena de todo el espectro político español, al extremo de que la
propia dirección del PSOE, que él dirige, se ve obligada a intentar contener la
reacción e inquietud de los propios barones territoriales socialistas liderada
por García-Page, el que más claro lo tiene, sobre quien el Presidente sostiene
en plan burlón que “la noticia sería que apoyara al Gobierno de España”, lo
cual es de agradecer ya que otros colegas le dirían que es un “facha”, como
dicen de cualquier socialista que no obedezca a ciegas las ocurrencias y
cambios de opinión permanentes de su amado líder. En definitiva, García-Page,
harto ya de tantas irresponsables concesiones al secesionismo catalán en
perjuicio de otras CCAA, como la suya, y de los principios constitucionales
progresistas, prende la mecha de la revuelta en el PSOE por esta última cesión
a ERC y con un rotundo “¡hasta aquí!” insta claramente a las federaciones
socialistas a no respaldar el “obsceno” cupo catalán pactado con los
republicanos por Sánchez, quien encima presume de que es un avance hacia la
“federalización”, mientras se van sumando públicamente otros barones territoriales socialistas al
plante de Page y ya son más de ocho federaciones las que se muestran en contra
de la insolidaria cesión fiscal a Cataluña a cambio de investir a Illa (como
sucedió con los indultos, la remodelación “ad hoc” del código penal o la
amnistía, para investir a Sánchez), mientras Felipe González y otros líderes
históricos del partido apoyan este plante. En semejante coyuntura, ya son cinco
las baronías socialistas que urgen al menos a un debate interno sobre el
insolidario pacto con ERC, convencidos de que “así no volveremos a ganar en
nuestros feudos tradicionales”,
indignados porque ni siquiera se les ha consultado, ni explicado nada
cuando “estamos hablando de las cosas de comer”…. De momento, sólo respaldan al
Presidente los sanchistas premiados por Moncloa (Canarias, Comunidad
Valenciana, Baleares, Rioja y Cantabria), mientras el extremeño Gallardo, Page
y Lambán elevan su crítica y le piden que dé explicaciones en el Consejo
Político Federal y abordar allí el concierto, y entretanto el asturiano Barbón
se convierte en el primer sanchista que se suma a la revuelta contra Moncloa
para impedir el cupo catalán. ¿Es justo este alto precio a pagar por la
investidura de Illa que como vencedor en las urnas debiera ser investido sin
más componendas o, en caso contrario, ir a nuevos comicios? ¿Fue justo el alto
precio pagado por la investidura de Sánchez que como perdedor de las generales
no merecía ser investido con calzador? Por lo visto para Sánchez sí son justos
tan altos precios que finalmente pagaremos todos los españoles y en especial
los socialistas.
Por su parte en ERC las aguas
también bajan turbias, aunque, al menos, han consultado a sus bases (unos 8.500
militantes) y éstas han dado el visto bueno al acuerdo para investir a Illa con
el 53´5% a favor, por lo que, despejadas las incógnitas, el Parlament prevé
fijar el pleno de investidura del socialista para el miércoles, dándose la
circunstancia de que, al requerir de todos y cada uno de los votos de Esquerra
queda la pequeña incógnita de que, si la diputada republicana de las juventudes
de ERC no la apoyara, todo este lío quedaría en agua de borrajas. El panorama
político, como ven, no tiene desperdicio; con el PSOE y ERC fracturados (las
bases republicanas “crispadas” y las socialistas en la inopia), quien lo tiene
claro es Puigdemont al frente del ultramontano Junts, que representa a la
derecha catalana más rancia y se erige en protagonista de cara a este nuevo
ciclo político que se abre en Cataluña con el acuerdo ERC-PSC-PSOE, en el que
lo único positivo va a ser la ruptura del secesionismo catalán que dejará de
ser un movimiento nacional secesionista para regresar al diferencial ideológico
de un secesionismo de izquierdas y otro de derechas, ambos, hasta ahora, socios
de Sánchez en Madrid para mantener su gobierno “progresista”, según el
sanchismo. Al final, la mitad de la militancia de ERC (3.397 personas) deciden
romper la solidaridad fiscal entre los españoles para que Sánchez e Illa
consoliden esa España federal o confederal imaginaria, cuando sus propios
socios secesionistas repudian incluso este invento y ratifican que su objetivo
no es federarse o confederarse sino independizarse, es decir, todo lo
contrario, cuando el actual Estado Autonómico Español goza de las mayores
cuotas de descentralización superando incluso las competencias de muchos
estados federales actuales. Es más, incluso así, con todas las cesiones al
secesionismo concedidas por Sánchez a cambio de sus votos, Marta Rovira, avisa
al PSC tras el pacto que se trata de un “sí vigilante” a la investidura de
Illa, mientras Bolaños lo celebra diciendo que “Cataluña guanya, España guanya”
e Illa lo defiende argumentando que el pacto “no va contra nadie” y garantiza a
ERC que cumplirá los acuerdos alcanzados.
Así las cosas, el PP acusa al PSC de
representar la continuidad del “procés” pues Marta Rovira en su regreso a
España tras ser amnistiada por Sánchez deja bien claro que “hemos venido a
acabar lo que empezamos y dejamos a medias” (más claro, el agua). Por su parte
Puigdemont, que todavía tiene más claro que Rovira a lo que el secesionismo ha
vuelto y para lo que está, desafía claramente al Estado y al Gobierno sanchista
abocando con ello a una nueva brecha entre el Tribunal Supremo, desautorizado
por Sánchez con la amnistía, y el Tribunal Constitucional, cada vez más
politizado, lo que, a diferencia de lo que dice Bolaños, ni es bueno para
Cataluña ni para España, sino todo lo contrario. El prófugo Puigdemont, a quien
recurrió Sánchez para que le apoyara en su investidura (caso insólito en la
UE), pone ahora en marcha su plan tras el acuerdo PSC-ERC y por carta pública
anuncia su regreso inminente a España, afirmando que su “detención es una
posibilidad real en muy pocos días” ya que, según el plan secreto de Junts para
que su regreso dinamite definitivamente el pacto de investidura de Illa prevé
ir al Parlament sin ser visto, negando a los Mossos que “coordinen” su regreso
(si su huida fue de traca, su vuelta no irá a la zaga), convencidos de que con
ello al final “Puigdemont irá a la cárcel, todo va a saltar por el aire y no
investirán a Illa”; ya ven, Puigdemont ya asume su detención cuando regrese y
mientras tanto arremete contra ERC y critica a los jueces por no aplicarle la
amnistía, mientras su partido, Junts, avisa a Sánchez de que “haremos valer
nuestros votos” (como lo han venido haciendo hasta ahora)…..Illa entretanto se
acerca cada vez más a ERC pese a las críticas internas del PSOE y deja bien
claro que “el pacto se cumplirá íntegro” en pleno crecimiento del descontento
de los barones socialistas que se preguntan “cómo definimos el país que somos”,
en plena ofensiva del PP ante “otras corrupción” de Sánchez para “comprar
votos” para investir a Illa. En fin, puede que Patxi López llevara razón cuando
allá por 2017 preguntó a Sánchez “Vamos a ver, Pedro, ¿sabes lo que es una
nación?”, sin duda, eran otros tiempos en los que todavía quedaba la esperanza
de que el PSOE no tirara por tierra sus principios más básicos sobre todo en
asuntos de Estado, otros tiempos en los que todavía no se habían producido los
cambios de chaqueta para estar al abrigo del poder y no perder cualquier
sillón…. hoy parece ser que Sánchez sigue sin saber “qué es una nación”, con la
agravante de que, al parecer, Patxi López, su actual escudero fiel, tampoco lo
sabe.
Y en medio de este caos sigue el
culebrón Begoña Gómez quien se querella, al igual que ha hecho su marido,
contra el juez Peinado por prevaricación, mientras Barrabés confirma sus
reuniones con Sánchez y su esposa en Moncloa, en tanto que el juez quiere
comparar el currículum de Begoña con los de otros directores de cátedras por si
ha habido trato de favor. Por su parte Sánchez, erigiéndose en juez y parte,
califica de “montaje patético” la visita del juez a Moncloa para tomarle
declaración como testigo y se abona al silencio para no dar explicaciones en su
balance de fin de curso haciendo una lectura triunfalista de su gestión y
atacando a la oposición, la culpable de todo, que ve como “frustrada”…por lo
visto él, a pesar de la que está cayendo, no tiene frustración alguna. Mientras
tanto, en uno de los feudos socialistas tradicionales, Extremadura, según NCReport,
el PP rompe el empate con el PSOE y roza la mayoría absoluta logrando cuatro
escaños más en menos de un mes, pues, en caso de elecciones autonómicas, el PP
obtendría el 43´5% de los votos y 32 escaños en la Junta Extremeña, el PSOE
39´4% y 29, y Vox 6´8% y 4…..pero no pasa nada, Sánchez tiene suficiente con
los votos del secesionismo catalán.
Por lo que se refiere a otros
asuntos, citar que Caixa-Bank gana 2.675 millones hasta junio (un 25´2% más) y
Telefónica roza los mil millones de beneficios (un 29% más) y aumenta la
facturación; que Iberia no comprará Air Europa ya que “las exigencias de la UE
le quitan sentido”; que España en el peor julio en 20 años destruye 9.783
empleos por el parón de la hostelería; y que cinco trabajadores de un centro de
menores de Zaragoza son encarcelados por torturas y agresión sexual.
Y del exterior, destacar que Rusia y
Occidente efectúan el mayor canje de presos desde la Guerra Fría, pues EEUU y
Europa liberan a espías y a un sicario del régimen condenado en Alemania a
cambio de periodistas, opositores, activistas y disidentes; que, tras el
asesinato del líder político de Hamas en un ataque en Irán, que Israel no
asume, se extiende el polvorín de Oriente Medio cada vez más peligroso para la
paz mundial; y que, como era de esperar, Maduro se atrinchera ante la presión
nacional e internacional por un escrutinio electoral justo, que simplemente
requeriría publicar todas las actas de las mesas electorales, y se aferra al
poder desatando la violencia con una balance ya de al menos 20 muertos y unos
1.000 detenidos, mientas María Corina se pone a resguardo porque dice “estoy
temiendo por mi vida”, aunque aparece sorpresivamente en una marcha
multitudinaria en Caracas desafiando a la represión y sostiene que “no vamos a
dejar las calles” para desenmascarar el fraude electoral perpetrado por el
dictador venezolano y reivindicar la victoria en las urnas de Edmundo González,
ausente en la citada manifestación, mientras EEUU y otros países
latinoamericanos le reconocen como Presidente electo y la izquierda
latinoamericana, como Lula, Petro u Obrador tratan de forzar al menos una
negociación… y ¿qué dice Zapatero al respecto?, misterios sin resolver.
Fdo. Jorge Cremades Sena
Blog Mi punto de vista,
http://jorgecremades.blogspot.com.es/
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