El variopinto bloque de investidura de Sánchez saca unido las leyes más polémicas (el Senado aprueba derogar la sedición y reducir la pena de malversación sin lucro personal, mientras la Ley Trans sale adelante sin las enmiendas del PSOE, pero con su voto, y la norma de Bienestar Animal deja finalmente fuera a los perros de caza) lo que, ni en los mejores momentos de gobiernos con mayorías absolutas, tanto del PSOE como del PP, se hubiera podido imaginar, especialmente aquellas que, como la sedición o la malversación, atentan directamente contra la solidez de nuestro actual Estado Democrático de Derecho surgido en 1978, que, a partir de ahora es claramente más débil que ayer. No en vano ERC aplaude la entrega del PSOE (vía PSC especialmente) a sus objetivos secesionistas y celebra que “los pilares del 78 se tambalean” proclamando en las Cortes que han logrado “disminuir la capacidad del Estado”…..Y, llevan razón, ¿acaso su objetivo no es disminuir la capacidad del Estado para tener más fácil proclamar la independencia de Cataluña? Es obvio que ERC no miente, va a lo que va y alardea de arrancárselo al Gobierno de Sánchez, pues la realidad es que, indultados los sediciosos condenados por obra y gracia de Sánchez, sin manifestar arrepentimiento alguno por sus graves delitos cometidos contra el Estado de Derecho, ahora, con la desaparición en el Código Penal del delito de sedición, además son exonerados de toda culpa, pues, por obra y gracia de Sánchez, lo más que se les podría reprochar sería un delito menor de “desórdenes públicos agravados”…..es decir, que aquella patética y grave declaración unilateral de independencia que proclamaron desde las propias instituciones catalanas sólo fue una especie de travesura juvenil, que merece obviamente las pertinentes rebajas penales adecuadas a la levedad del nuevo delito, pues, en definitiva, los sediciosos son directamente borrados del mapa delincuencial español. Y por si no fuera suficiente todo este indecente entreguismo gubernamental a los intereses de los secesionistas catalanes de Esquerra, se revisa además a la baja la pena del delito de malversación, delito cometido cuando un funcionario o cargo público realiza una administración desleal o una apropiación indebida del patrimonio o del dinero público, al extremo de que los malversadores serán beneficiados desde ahora con una sustancial rebaja de condena si malversan pero no con ánimo de lucro personal, es decir, que pueden utilizar el dinero público indebidamente siempre que no se lo lleven calentito a su bolsillo, dejando claro que si malversas para enriquecerte eres peor malversador que si malversas, como es el caso, para atentar contra la unidad territorial de nuestro país (por gravísimo que sea este asunto) o, como en otros casos, si malversas para enriquecer a terceros, ya sean amigos, familiares o compañeros de partido….. En fin, se trata de poner más fácil la malversación para habilitar lo antes posible a los condenados del procés, mientras los juristas, como sucede con la patética ley del “sólo sí es sí”, ya vaticinan una oleada de revisiones de penas en buena parte de los casos más alarmantes de corrupción que todos tenemos en mente y tanto daño han causado al crédito de los políticos. Y en este lamentable entreguismo a sus socios minoritarios y al bloque de investidura, se aprueba la..... (sigue leyendo en Blog Mi punto de vista, http://jorgecremades.blogspot.com.es/).
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